Nos acompañan creencias en nuestro ser emocional.
Transcurre nuestra vida y muchas veces no llegamos a entender.
Las emociones parecieran que actúan solas.
¿De donde salió esta actuación?. Si yo no soy así.
¿No creía poder hacer esto o aquello? ¿Que me motivo a hacerlo?
Esas emociones ocultas (sombras), nos llevan por caminos que nos coscientizan las maneras de actuar y enriqueces pues muestran que en el sótano de nuestra vida hay recurso que no utilizamos y otras veces nos derivan a lo opuesto.
Solemos asustarnos cuando emergen, pues no las reconocemos y ¡Allí están!
No nos engañemos pensando que no somos ello también.
Consideremos que el error o el desconocimiento nos abre fronteras muchas veces.
Respetemos nuestro margen de error.
A través del mismo podremos sacarlo a la luz.
ASOMBRARNOS.