..........
sábado, 29 de marzo de 2014
Javier Tomeo echa el telón
..........
jueves, 12 de diciembre de 2013
El Buñuel de Max Aub en Barcelona
........
jueves, 24 de octubre de 2013
El `Almanaque de asombros´, de Ángel Olgoso
Médicos de sombra
| Ilustración de Claudio Sánchez Viveros para "Médicos de sombra" |
lunes, 24 de octubre de 2011
La Matute y las muletas del Rey
....
sábado, 22 de octubre de 2011
Ana María Matute en Bellaterra
domingo, 13 de febrero de 2011
LUIS MARTÍN-SANTOS
"La justificación"
Quisiera justificar de alguna manera mi evidente incapacidad para escribir una obra maestra. Esta incapacidad puede ser debida a dos causas: O bien a mi falta de dotes naturales para llevarla a cabo, o bien a mi falta de vigor moral para poner aquellas dotes en acción. A decir verdad, este dilema podría resultar falso. Pudiera ocurrir -y hasta parece probable que así sea- que una de las dotes naturales imprescindibles para la realización de la obra sea precisamente la capacidad moral que permite intentarla con la necesaria energía. Pero esta aparente simplificación no acaba de convencerme. Es muy posible que haya en mí algo que me impide realizar los grandiosos proyectos que imagino en mis noches de insomnio y que este “algo”, en resumidas cuentas, venga a depender de mi libre voluntad, aunque yo no sepa muy bien de qué modo ponerla en marcha. Si esto fuera así, a la amargura simple del fracaso y vacío de mi vida se añadiría otra amargura más compleja, que me haría enjuiciar ese mismo fracaso como “pecado”.
.........
Aunque tal vez no pueda llamarse “pecado” a tal determinación negativa, sino más bien “acto virtuoso y heroico”, pues si de verdad realizara la obra maestra del modo que ha sido soñado y ésta llegara a estallar en la plena luz del día con la violencia de una explosión volcánica cegando los ojos de mis posibles competidores, el orgullo resultaría su consecuencia inevitable y esta pasión incurable, deformando moralmente mi espíritu e invadiendo como un cáncer la totalidad de mi mente, hasta ahora racionalmente equilibrada, llegaría a destruir las dotes (en sí mismas sencillas y naturales) cuya existencia supongo en lo más hondo de mí y que son la obscura razón que me reconforta y me ha permitido, hasta aquí, resistir los inevitables y continuos desencantos de que se compone toda existencia humana.
........
........
viernes, 14 de enero de 2011
Jardiel vuelve, 2
Lo mejor de todo es que el editor, Jan Martí, a quien no tengo el gusto de conocer, pero con quien he intercambiado algunos correos, es un joven músico, forma parte del grupo de rock electrónico bailable Mendetz. El cuidado y la ilusión que ha puesto en este relanzamiento de Jardiel, muestra una pasión y un interés del que solemos estar faltos. No podemos dejar los clásicos sólo en las manos de los profesores. En un inteligente manifiesto, titulado "10 razones poara que vuelva Jardiel", se acaba afirmando que Jardiel ha vuelto en el 2010 y que "vamos a ver qué pasa esta vez". A ver si es verdad que se rompe, de una vez por todas, esta historia guadianesca de nuestro autor, y que haya vuelto para quedarse definitivamente, pues muchos de sus libros siguen siendo tan divertidos y amenos como inteligentes, y a modernos y vanguardistas les dan sopa con ondas a la mayoría de nuestros más o menos jóvenes autores que no parecen cansarse nunca de proclamar lo vanguardistas y modernos que son.........
..........
jueves, 2 de diciembre de 2010
¿Quieres jugar con Max Aub?
viernes, 27 de agosto de 2010
La novela de postguerra, según Sanz Villanueva
No es la primera vez que Santos Sanz Villaneva se ocupa de la historia de la novela española de postguerra, pues algunos de los mejores trabajos dedicados a la materia se los debemos a él, como Tendencias de la novela española actual (1972), Historia de la novela social española (1942-1975) (1980) y El siglo XX. Literatura actual (1984). En este nuevo volumen repasa la historia del género, desde los primeros años de la postguerra hasta algunos de los nombres más significativos que empezaron su trayectoria durante los setenta, como Eduardo Mendoza, aunque donde se detenga más sea en los narradores de la llamada generación del mediosiglo. Los que en alguna ocasión hemos intentado hacer balances más o menos similares sabemos de las dificultades que presenta tener que seguir el hilo de la historia, así como escoger las tendencias, autores y libros más significativos. Tras el trabajo de Sanz Villanueva, se advierten infinitas y muy provechosas lecturas y una extraordinaria capacidad de síntesis, pues es capaz de mostrarnos lo esencial de un autor y lo que caracteriza su obra en pocas líneas o párrafos. A mí, particularmente, me hubiera gustado ver integrados en esta historia a los autores del exilio republicano (Rosa Chacel, Ramón J. Sender, Francisco Ayala o Max Aub, por sólo recordar a algunos de los nombres más destacados), materia que tan bien conoce el autor, pues él fue uno de los primeros en llamar la atención sobre el valor de sus novelas en el artículo "La narrativa del exilio", que data de 1977. Pero no pienso ponerme a echar nada de menos porque me parece que estos ambiciosos trabajos, tan útiles como imprescindibles, deben juzgarse por el valor de su conjunto, no por detalles nimios. Así, este nuevo libro del profesor y crítico de El Cultural, titulado La novela española durante el franquismo (Gredos, 2010), se convertirá pronto en un manual de imprescindible consulta para todos aquellos que estén interesados en los avatares del género durante la segunda mitad del siglo XX.
sábado, 6 de febrero de 2010
`El don de Vorace´, de Félix Francisco Casanova
.....
......
......
- FA: Por supuesto. Es ley natural que los nuevos derriben las estatuas de los viejos para instalar las suyas.
.......
.....
......
lunes, 15 de junio de 2009
Umbral y Vicent se liquidan `Tiempo de silencio´
"Tiempo de silencio es (...) la parodia provinciana del Ulises, es decir, un subproducto que perplejizó a los antifranquistas de entonces que no habían leído a Joyce. Martín-Santos hace su libro con aplicación, pero no con genio, como el irlandés" (Francisco Umbral, Diccionario de literatura. España 1941-1995, de la posguerra a la posmodernidd, Planeta, Barcelona, 1995, pp. 164 y 165).
....
"La novela Tiempo de silencio es una referencia en la literatura contemporánea, pero no deja de ser un reflejo paródico de un Joyce de segunda mano amasado con un costumbrismo madrileño" (Manuel Vicent, "Juan Benet: en un tiempo de silencio", El País, 30 de mayo del 2009).
lunes, 19 de mayo de 2008
Ricardo Doménech
La jubilación de un profesor, de un maestro, no siempre tiene sentido. La de Ricardo Doménech, a sus 70 años, alguien que sigue en plena forma, con deseos de proseguir con sus clases en la Real Escuela Superior de Arte Dramático (RESAD), de Madrid, de la que ha sido director, representa uno de esos casos. Pero una obtusa y mecánica legislación se lo impide. Su buena disposición viene avalada, además, por la petición de los estudiantes y el respaldo del director del Centro, el dramaturgo Ignacio Amestoy. .
.
.
Conocí a Ricardo Doménech, primero, en su faceta de crítico literario, en revistas tan prestigiosas y diferentes como Ínsula y Triunfo. En la primera nos dejaría, entre otros muchos, un artículo temprano (1962), y ya clásico, sobre Tiempo de silencio, "Ante una novela irrepetible".
.
Me familiaricé después con el ensayista e investigador, experto en el teatro español del siglo XX, sobre todo en Valle-Inclán, Lorca, los dramaturgos del exilio republicano (véase su Teatro del exilio: obras en un acto, Fundamentos, 2006) y Buero Vallejo. Hace unas pocas semanas, en conversación con Liz Perales, recogida en El Cultural de El Mundo, confesaba que Buero Vallejo era quien más lo había influido como escritor. Se unía así a todos aquellos que consideraron siempre el ensayo un género literario. No hay más que recordar sus libros sobre El teatro hoy (Doce crónicas) (1966), El teatro de Buero Vallejo. Una meditación española (Gredos, 1973) y La casa de Bernarda Alba y el teatro de Lorca (Cátedra, 1985)..
viernes, 28 de marzo de 2008
Fernando Arrabal: A propósito de `Solo de trompeta´, de Antonio Fernández Molina
* El retrato de Antonio F. Molina es obra de Josefa Echevarría, su mujer.