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sábado, 14 de diciembre de 2013

Llámame


Llámame ilusión rota,
corola por los suelos,
cielo de verde oliva
y gris de madrugada,
pasteles con estrías en la tarde
y niebla negra.

Llámame cobardía
y luto en el ocaso.

Llámame
llama que se consume
en las ramas de un eco
y en resinas responde
con un triste gemido.
Llámame.

Llámame como quieras
mas no estés en silencio,
llámame.

Llámame a gritos,
llama cantando,
y me llamen tus lágrimas
con hondo sentimiento.

Llámame amor.
Amor..., amor...

Llámame, amor.

Que no decaiga.

Idella ESteve
un 13 del 13, en diciembre.


martes, 13 de agosto de 2013

A mis hijos



El tiempo va pasando
y yo aquí todavía
que no encuentro el camino,
que me hallo perdida,
que soy mujer madura
aunque me siento niña
pletórica de sueños
que se sueñan de día
-porque llenan mis noches
lágrimas doloridas,
enclaustrada en la ostra
de mis noches vacías-.

Y porque sigo viva
le voy plantando cara,
de frente o a hurtadillas,
a los duros reveses
que me otorgó la vida:
porque tengo a mis hijos,
porque tengo a mis hijas
y en ellos la esperanza
y en ellos la alegría.

Idella Esteve
(13-8-13, hoy 7 meses)



martes, 2 de julio de 2013

Tristeza de amor


Qué triste es el amor cuando te falta,
qué vacío se siente no sé donde
hasta ahogar el silencio en un suspiro
que al respirar naufraga;

qué triste es el amor cuando se ausenta,
cómo se cubre el cielo de presagios
que ocluyen la razón sin desearlo
donde el dolor se alberga.

Lo busco en los rincones del quejido
para calmar la sed de tanto anhelo
por una voz que amando olvida y calla
su corazón dormido.

Mas, sé que volverá con sus “te amo”
y trinará de nuevo el gorrión
bailando en mi ventana, pero triste
y un poco más lejano.
(Carlos Serra)

Qué triste es el amor que se ha dormido.
No quiere despertar, dulce reposa
escondido detrás de fría losa,
calladamente, junto al ser querido.

Y en el hueco del pecho dolorido
queda una rebeldía silenciosa
que se vierte en la esencia de la rosa
hablando sin palabra y sin gemido.

Queda también un algo incoherente
de aferrarse a las horas del presente
sin pensar en futuro ni en pasado.

Se siente que el amar solo es quimera.
No se quiere pensar, nada se espera
en asuntos de amor: Finiquitado.

Idella Eteve

viernes, 17 de mayo de 2013

Imposibles

 

Imposible volar mientras que anclados
los pies están, hundidos en la tierra.
Imposibles los nuevos horizontes
si la visión no alcanza
a traspasar los muros y barreras.
 
Lejos quedan los mares,
los cielos quedan lejos.
Sólo quimeras que envolvió la piedra. *
 
(17-05-13)
Idella Esteve
 
 
 
 
 
*(En la versión anterior "sumidos en los sueños y quimeras". Lo he cambiado para evitar la consonancia con "barreras")
 
 


miércoles, 10 de abril de 2013

Me busco en el silencio...


Me busco en el silencio que habita mi silencio.
Allí estoy escondida
aguardando al insomnio para salir apenas
y mirarme en las sombras
por si me reconozco en este nuevo estado.

¡Cómo duele la luna!
Traspasa la ventana y me llena de miedos
el frío de la almohada
que se ha ido colando en el alma y la mente
por todos los resquicios
que ha dejado el vacío de mis horas felices.

Y cuando llega el día
sigue la ingratitud con el ruido y el tráfago
para abocarme luego
a otra noche de dudas, gélida, inabarcable.

Idella Esteve
(10-04-13)

viernes, 1 de marzo de 2013

Desolación



Otro día que gris ha amanecido
distinto y tan igual últimamente,
es color que se asienta en mi presente
diciendo que no estás, que te me has ido.

Y busco la razón, busco el sentido
con la fuerza del alma y de la mente
a este aferrarse a ti incoherente
mi corazón a tu recuerdo unido.

Tu foto está delante en mi escritorio,
y es ausencia mortal el dormitorio...
No sé cuándo vendrá la aceptación.

Pensamos que aún quedaba tanta vida...
Qué pronto fue el dolor de tu partida,
qué insoportable mi desolación.

Idella Esteve
(1-3-13)

miércoles, 27 de febrero de 2013

Ofrenda



Tengo una soledad de blancas margaritas
que te ofrendo,
atada en cinta roja,
al pie de tu morada.
Para que esté contigo
y te haga compañía
a todas horas
en las que lloro en casa.

Idella Esteve

domingo, 24 de febrero de 2013

Retazos



Cuántos trozos de mí se están pudriendo
en el cajón de sastre de la impotencia;
toda ilusión perdí, toda inocencia:
se me fueron las ganas de andar viviendo
entre tanta injusticia e incompetencia.

*
Albergarme por siempre en mi ribera
lejos del mar profundo y tempestades,
hacerme del invierno primavera
por volver las tinieblas claridades.

*
Mi voz es un lamento contenido
mezclado de pasión y de añoranza,
amalgama de duelo y esperanza
que pretende acallar el alarido.

Idella Esteve

viernes, 15 de febrero de 2013

Tristeza II

Sombras de otoño

En sombra me he convertido,
soy sombra de lo que era,
en mi ya no hay primavera
el tiempo la  ha consumido.

En el otoño me encuentro,
veo sombras por doquier,
tan nublo es mi atardecer
que se me llueve por dentro.

Brotes hubo en el camino
que se fueron amustiando,
espectros el alma ajando
y ensombreciendo el destino.

Sólo la sombra me alumbra;
no hay deidad, lucero o sol
ni un mortecino farol
que libere mi penumbra.
*
A mi espejo

Espejo, me intimidas.
Dime por qué me acosas,
por qué ya no reflejas
de mi cara las rosas.

Di por qué te empecinas
en mostrar mis despojos,
lo ajado de mi piel,
las líneas de mis ojos,

el rictus de quebranto
por tantas frustraciones,
por heridas abiertas,
por cerradas pasiones.

Espejo, ponte un velo
si no quieres mentirme,
no quiero las verdades
con que sueles herirme.

Contigo disfrutaba
cuando mi primavera;
hoy, llegado mi otoño,
ya no soy la que era.

Refléjame por dentro
obviando mi envoltura,
proyecta en tu cristal
mi oculta galanura.
*
Muerte

Muerte, tú, mi compañera
que al nacer naces conmigo
no te extrañes si te digo
que se hace larga la espera

de que vengas a buscarme.
Con tu guadaña piadosa
me cortarás acuciosa
lo que hayas de cercenarme:

El cordón umbilical
que me une con el mundo,
este penar tan profundo,
este regusto bilial.

Este estar a toda ultranza
al frente de la batalla,
este corazón que estalla
porque nunca encontró holganza.

Este cansancio infinito,
este ahogo, esta opresión,
esta fatal desazón.
Escucha, Muerte, mi grito.

Idella Esteve      


miércoles, 23 de enero de 2013

Tristeza


Hay un dolor en el aire,
hay un grito en las pestañas
y un horizonte cercano
de nubes y lluvias negras
con susurro en el oido
de cataratas de sal
que anegan el corazón
ahogando las esperanzas.

¡Qué tristes pasan las horas!
¡Qué triste se muere el día
en este mar de las dudas
del país de mi tristeza!

***

Convertida en escombro de derribo,
asomándome al sol de la mañana
le veo caminar hacia el cenit
destellando dorados en los mares,
y me paro a pensar
qué colores me esperan en la tarde
que disipen el negro de mis lágrimas.

Idella Esteve

viernes, 2 de noviembre de 2012

Flor de almendro




(Flor de Almendro. Pastel sobre papel. Isabel Esteve)


Tántas veces floreces
sin que acabe el invierno,
cuando el frío no arrecia,
cuando el sol en el cielo
propicia un aire tibio,
precursor abrileño
que ha llegado temprano
a final de febrero.

Como tú blanca flor,
con su rosado centro
de pastel encendido,
haciendo frente al viento,
resistiendo a la helada
en la noche al acecho.

Como tú que en la rama
resistes aguaceros,
o soportas sequías
que te vienen del suelo
y floreces sutil
en los campos alberos.

Como tú quiero ser,
fuerte sin parecerlo.

Asemejarme a ti
mi dulce flor de almendro.

Idella Esteve
(02-11-12)

lunes, 29 de octubre de 2012

Romance de la gitana (Reposición)




Ese fuego de amor brujo,
que por tus ojos destellas
con su color azufroso,
compite con las hogueras
alrededor de las cuales,
pies desnudos en la arena,
bajo los rayos de luna,
bailas y revoloteas.

La noche lanza un gemido,
un ulular de ave negra,
premonición de aquelarre
en la noche sanjuanera,
y un aura te cubre toda
la gracia de tu melena
endrina, negro de toros
que pastan en las dehesas
para morir en las plazas
poniendo un broche en las fiestas.

Un clavel de rojo sangre
llevas detrás de la oreja
contrastando con tu cara;
y un cimbreo de caderas,
que con gracia se estremece
al son de la pandereta,
marca un baile de gitana,
gitana de pura cepa;
y tus manos en el aire
roban al aire una queja
que a poco la van dejando
al borde de la cenefa
de los vuelos de tu falda
hasta que toque la tierra.

Gitana de piel cetrina,
descendiente de agarenas,
es así como te veo,
no la gitana cestera
de cortijos y mimbrales;
ya no trabajas la anea
ni vas leyendo las manos
ni vas pidiendo a las puertas.

Envuélvenos con tu duende
que de eso algo te queda.

Idella Esteve
(5-9-07)

sábado, 20 de octubre de 2012

Llueve



Ya emigraron los pájaros,
y en el aire
el aroma dulzón del crisantemo
nos anuncia
que se acerca noviembre.

Llueve en la noche negra,
y en mi silencio almático,
muy dentro,
también llueve.

Se ha desbordado el cauce de mi río,
como siempre en otoño,
y vuelven los recuerdos
a posarse en sus aguas
inundando la mente;
detenido en su fondo
hay un poso de limo.

El día
ha amanecido oscuro.
Continúa lloviendo.
Y también en mi alma
llueve y llueve.

Idella Esteve
(20-10-12)

domingo, 14 de octubre de 2012

Oye ...



Oye mi ruego Tú, Dios que  no existes...
(Miguel de Unamuno)

Oye mi ruego Tú, Dios que no existes
y para que me escuches te reinvento.
De este momento de mis horas tristes,
de mi desolación, oye el lamento.

Óyeme Tú, que estoy desasistida,
no distingo mentira de verdad
y le temo a la muerte y a la vida
en compañía de mi soledad.

Aclárame si puedes, te lo pido,
no comprendo por qué vine a nacer
en este mundo injusto, sin sentido,
si nadie preguntó mi parecer.

Te acuso de mi vida y de mi muerte
y de que permanezcas siempre inerte.

 
Idella Esteve

jueves, 11 de octubre de 2012

Sueño en rojo (De Colores)



Soñé que me perdía en un mar de amapolas
y pude confundirme con su roja extensión,
escondiendo en su manto mi color de pasión,
y me dejé mecer por sus bermejas olas.

Imaginario mar. Un son de caracolas
semejaba el latido de un tierno corazón
derramando su savia de tono bermellón
para poder remar cantando barcarolas.

Océano fantástico cubriendo la campiña,
creciente exuberancia de belleza salvaje.
Y me sentía libre, como cuando era niña.

Soñé que era raptada -Sparrow al abordaje-.
Y regando las flores con rojos de la viña,
navegaba en su barco superando el estiaje.

Idella Esteve
(24-2-08)

martes, 9 de octubre de 2012

Poesía en los ojos de un niño


Dónde estás, dime,
dónde te escondes.

Mis horas de desvelo
no me son suficientes
para encontrarte,
ni me ayudan la lluvia ni la música,
y tampoco te muestras
en los brazos del viento.

Tal vez estás
en los ojos del niño
que lo ha perdido todo
-o no ha perdido nada,
porque grande fue siempre su carencia,
y nunca tuvo algo
que lo pueda medir nuestro rasero:
nada pierde quien nada ha tenido.
Ese es el drama
que no se capta en la fotografía.

Quizás sea eso,
que tengo que buscarte
en las cosas que duelen
y no parecen bellas,
en la crudeza de la fealdad.

Pero...
¿sabes?
existe la belleza en esos ojos,
si quitas el dolor y las mil moscas,
que esconden la ilusión desesperada.
Quizá también,
muy hondo,
la esperanza perdida
que quiere ser hallada.

 
Idella Esteve

viernes, 28 de septiembre de 2012

Por qué...



Por qué me empeño en escribir poesía.
Qué queda ya de mí, qué me sustenta.
Por qué este vano sueño en agonía              
si  yo no soy capaz, ya me doy cuenta.

Por qué se me voló la primavera.
Por qué mi otoño estático persiste.
Por qué me tienta abandonar la espera
si abandonando me sentiré triste.

Por qué me mata el transcurrir del día
y así me esfuerzo en escribir de noche.
Por qué es difícil escribir poesía,
por qué todo mi esfuerzo es un derroche.

Por qué, si se me nublan ya los ojos
cuando la luz del sol tengo presente.
Por qué se multiplican mis enojos.

Por qué de estos porqués aquí en mi mente.

Idella Esteve
 (17-6-05)

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Pasión


Eres jardín, yo soy selva;
eres cauce, yo el torrente;
tú, apacible cielo azul,
yo, contraste inusitado,
al mediodía soy cirros,
en la tarde, pincelada
que se torna carmesí;
y luna negra en la noche,
hechicera de tu embrujo
en orgía de aquelarre;
y fuego soy de la hoguera.

Eres un lago tranquilo
de serena superficie;
yo, provocador estruendo
elevando grandes olas,
soy embravecido mar,
zozobra donde te abates.

Eres amor sosegado
del color de la azucena,
yo, la pasión que consume,
luz que arde, rosa roja
a lomos de sus espinas.

Idella Esteve
   (16-6-06)

martes, 18 de septiembre de 2012

Se acerca la Navidad



Y transcurre la vida,
golpe a golpe,
daño a daño.
Hay ilusiones de felicidad
de vez en vez.
El espejo
refleja sin pensar
la inconsistencia
de nuestros exteriores,
y nos devuelve un halo
de indulgencia falaz
que nos exhibe buenos.
¡Valiente hipocresía
de mostrarnos tocados
por penurias lejanas,
más allá de los mares!

(Al lado de la casa, alguien sufre las suyas,
el hambre, la indigencia...)

Y la vida transcurre
golpe a daño,
daño a golpes...

Con la desilusión.

Con la impotencia.


Idella Esteve

martes, 11 de septiembre de 2012

De sueños y realidades



Yo sueño que estoy aquí
destas prisiones cargado
(Calderón de la Barca. "La vida es sueño")

Yo sueño que estoy aquí
paupérrima y angustiada
por el paro, y condenada
a no comerme un maní.

Nunca soñé que otro estado
más placentero tuviera,
y heme aquí en esta quimera
de soñar lo nunca hallado.

He soñado con amores
y en que había honestidad
pero la cruda verdad
ha aumentado mis temores.

Que falta amor en la vida,
que sobran los deshonestos,
y apenas quedan arrestos
tras la rabia contenida.

Que el soñar sólo es soñar,
salida del desencanto,
cerrazón a cal y canto
a tanto duro avatar.

Mas sigo en la ensoñación
que vendrán tiempos mejores
acabando timadores
que nos clavan su aguijón.

Idella Esteve

(de "Los tiempos que corren")