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jueves, enero 04, 2024

Patrizia Cavalli / De "Sempre aperto teatro", 4




Cambiando de posición frente a la mesita,
otro gobierno tendrá mi razonamiento;
será más lenta la transición al sofá
donde siempre ante cada obstáculo dormía,
sentada, de repente sumergía
entre esos grandes almohadones mi pensamiento,
en sí mismo soñando suelto pastoreaba
entre tantas hierbitas fáciles, aquí y allá.

.

Desde la ventana horizontal de los años setenta
se elevaban discretos los fuegos artificiales:
escasos o densos, siempre reconocibles
los puntos de partida. No como
ese humo democrático de Nápoles
mezclado en el  revuelo sin ninguna
distinción de clase ni de origen.
Por fin un año nuevo sin escrúpulos.

.

Llegados a cierta edad muy adulta
no nos podemos mostrar desesperados,
son realmente muchas las razones.
Se corre el riesgo del naturalismo.

Patrizia Cavalli (Todi, Italia, 1947 - Roma, 2022), Sempre aperto teatro, Einaudi, Turín, 2012
Versiones de Jorge Aulicino

Patrizia Cavalli en Otra Iglesia Es Imposible 




Cambiando posizione al tavolino,
altro governo avrà al mio ragionare;
sarà píù lento il passaggio al divano
dove sempre a ogni ostacolo dormivo,
Seduta, d'improvviso mi tuffavo
tra quei cuscini grandi il mio pensiero,
di sé sognando sciolto pascolava
fra tante erbette facili, qua e là.


Dalla finestra orizzontale anni settanta
si alzavano discreti i fuochi d'artificio:
sparuti o densi, sempre riconoscibili
i punti di partenza. Non come
quel fumo democratico di Napoli
mischiato nel rumore senza più alcuna
distinzioni di classe né di origine.
Finalmente un capodanno senza scrupoli.


Giunti a una certa molto adulta età
non ci può mostrare disperati,
sono davvero troppe le ragioni.
Si corre il rischio del naturalismo.

lunes, octubre 17, 2022

Patrizia Cavalli / De "Vita meravigliosa"




Ah si hubiese sabido
que bastaba un beso para abrirme los caminos del universo:
estrellas y planetas que se cruzan
hablando, constelaciones enteras
que se entrelazan.
Y yo entre ellos mirándolos
urdimbre textil ardiente
que llevo y no interrogo.

*

Pero valía la pena soñar
ese sueño tan humilde y obsequioso,
firme al servicio de todos mis miedos,
copia rancia de los sueños de la infancia,
fraude y figura desvaída de mi maldad
que ya en la oscuridad empezaba a expiar,
¿culpa de indiferencia y de inconstancia?

*

Confiada del aire, abro la ventana
y entran extrañas inesperadas
intimidades. ¡Primera traición
de la mañana, grosera respuesta
del patio, comunión brutal!
Cierto, no siempre conviene levantarse.

Patrizia Cavalli (Todi, Italia, 1947-Roma, 2022), Vita meravigliosa, Einaudi, Turín, 2020
Versiones de Jorge Aulicino


Foto: Patrizia Cavalli, Auditorium Roma, 2011 Wolfgang Achtner/YouTube


Ah l'avessi saputo
che bastava un bacio per aprirmi le vie dell'universo:
stelle e pianeti che si incrociano
parlando, constellazioni intere
che si intessono.
E io in mezzo a loro che le guardo
tessile ordito ardente
che reggo, e non domando.

*

Ma valeva la pena di sognare
quel sogno cosí umile e ossequioso,
fermo al servizio di ogni mia paura,
copia stantia dei sogni dell'infanzia,
truffa e figura scialba del mio male
che già nel buio cominciabo a espiare,
colpa d'indifferenza e d'incostanza?

*
Fiduciosa dell'aria apro la finestra
e entrano inaspettate estranee
intimità. Questo primo tradimento
del mattino, questa sgarbata risposta
del cortile, feroce comunione!
Certo non sempre conviene stare in alto.

viernes, junio 24, 2022

Patrizia Cavalli / De "Sempre aperto teatro", 3



"Sí, como el tango, ardiente y controlada,
así te quiero, nunca debés mostrar
tu necesidad. Estoy espantada,
pero si te quedás quieta puedo exagerar".

Pero it takes two to tango, ¿no lo sabías?

*

El amor ciertamente no es un sentimiento.
sino es ese razonamiento obsesivo
sobre el misterio de nuestro aprendizaje.
Aprendo tu cara y la mantengo,
pero luego la pierdo y la recobro en un instante,
quito y agrego, noto
cada cambio, funámbulo pensamiento
siempre a punto de caer
- el amor no sostiene.

*

Inmóvil en en el centro de las cosas
sin jerarquía en la materia
toda materia dulce en varias formas
cada una fuerte noble y absoluta
dócilmente me parezco a la natura,
yo sin propiedad, de nuevo suya

*

Hermosos pensamientos nacen sobre los puentes
y siempre nos detenemos sobre los puentes
para contener ese átomo de gracia
suspendido en equilibrio
entre la gravedad de las orillas y el ciego curso del agua.
Te daré cita en un puente,
en esta tierra media de nadie.

Patrizia Cavalli (Todi, Italia, 1947-Roma, 2022), Sempre aperto teatro, Einaudi, Turín, 2012
Versiones de Jorge Aulicino, in memoriam




"Sí, come il tango, ardente e controllata,
cosí ti voglio, e mai devi mostrare
il tuo bisogno. Io sono spaventata,
ma se stai ferma posso esagerare".

Ma it takes two to tango, no lo sai?

*
L'amore non è certo un sentimento
ma è quell'ossessivo ragionare
sul mistero del nostro apprendimento.
Apprendo la tua faccia e la mantengo
ma poi la perdo in un istante e la riprendo,
aggiungo e tolgo, mi accorgo
di ogni cambiamento, funambolo pensiero
sempre sul punto di cadere
- amore non sostiene.

*
Immobile nel centro delle cose
senza gerarchia nella materia
tutta materia dolce in varie forme
ognuna forte nobile e assoluta
cedevolmente appaio alla natura,
io senza propriertà, di nuovo sua 

*
Nascono i bei pensieri sopra i ponti
e sempre ci si ferma sopra i ponti
per contenere quell'atomo di grazia
sospesa in equilibrio
tra gravità di sponde e cieca corsa d'acqua.
Ti darò appuntamento sopra un ponte,
in questa mezza terra di nessuno.

miércoles, abril 22, 2015

Patrizia Cavalli / No tengo simiente que esparcir en el mundo













No tengo simiente que esparcir en el mundo,
no puedo inundar los meaderos
ni los colchones. Mi avara simiente de mujer
es demasiado poco para un agravio. ¿Qué puedo
dejar en las calles, en las casas,
en los vientres infecundos? Palabras,
esas sí, a montones,
pero han dejado ya de parecerse a mí,
han olvidado la furia
y la maldición, se han vuelto señoritas,
tal vez de baja laya
pero señoritas al fin.

Patrizia Cavalli (Todi, Italia, 1947), "Mis poemas no cambiarán al mundo", 1974, Yo casi siempre duermo. (Antología poética), Selección, traducción y prólogo de Fabio Morábito, UNAM, Ciudad de México, 2008


Non ho seme da spargere per il mondo
non posso inondare i pisciatoi né
i materassi. Il mio avaro seme di donna
è troppo poco per offendere. Cosa posso
lasciare nelle strade nelle case
nei ventri infecondati? Le parole
quelle moltissime
ma già non mi assomigliano piú
hanno dimenticato la furia
e la maledizione, sono diventate signorine
un po’ malfamate forse
ma sempre signorine.

viernes, abril 17, 2015

Patrizia Cavalli / De "Sempre aperto teatro", 2













La estación me invita. ¿Qué estación
es esta que me invita? Me extravié
en la plaza cerrada del mercado.
El mercado centellea cada mañana
temprano, pero luego la fruta se opaca,
fruta tardía, yo me abro camino,
con paso de primavera cansado,
entre toda esa mercancía que me invita,
saludo, luego saludo y luego saludo,
abro el corazón y la boca y luego los cierro.
el corazón se abre mucho, es más: sube,
ah demasiado sube y heme aquí perdida
dentro de una lejanísima mañana.
sin embargo tan cercana, mi hermana
de otro tiempo, gemela, pero siempre
atenta, mies que curva su maleable
espalda, que hacia mí se alarga,
yo no la tomo, pero ella se obstina
en caminarme al lado. Es una mañana
de rendida luz, casi vencida:
cuando no se la ve, se la adivina.
Estaba en esa mañana y me esparcía,
la mirada no mentirosa o verdadera,
y veía juntas felicidad y ruina.

Patrizia Cavalli (Todi, Italia, 1947), Sempre aperto teatro, Einaudi, Turín, 1999
Versión de Jorge Aulicino


La stagione mi invita. Che stagione
è questa che mi invita? Ero sparita
nella piazza conclusa del mercato.
Il mercato scintilla ogni mattina
presto, ma poi la frutta si fa opaca,
frutta tardiva, io mi faccio strada,
il passo primavera stanco,
fra tutta quella merce che mi invita,
saluto e poi saluto e poi saluto
apro il cuore e la bocca e poi li chiudo,
il cuore si apre molto, anzi sale,
ah troppo sale e eccomi smarrita
dentro una lontanissima mattina,
pure cosí vicina, mia sorella
d’altri tempi gemella, eppure sempre
attenta, messe che curva cedevole
il suo dorso, che verso me si tende,
io non la colgo, e invece lei si ostina
a camminarmi accanto. E’ una mattina
di arrendevole luce, quasi vinta,
che quando non si vede s’indovina.
Ero in questa mattina e mi spargevo,
lo sguardo non bugiardo o veritiero
vedevo insieme felicità e rovina.

lunes, mayo 21, 2012

Patrizia Cavalli / De "Sempre aperto teatro"




Un gato que duerme la siesta...

Un gato que duerme la siesta
en el amplísimo lecho de su dueño,
en un punto cualquiera, pero cómodo,
que se despierta a una hora cualquiera
porque alguien pasa y lo acaricia,
no se despierta del todo ni se pregunta
quién lo acaricia, sino que se asoma
del sueño sólo un poco
y se estira en su flexible largura
para que dure más aquella caricia.
Tal vez así podría ser el amor.


Terapia

Ah denme un cuarto en un hotel
un cuartito un cuartito en un hotel
sí, un cuarto un cuarto en un hotel
un cuartito un cuartito en un hotel...

(... y así continuamente
sin detenerse nunca,
hasta que aburrido o exhausto
se cae aturdido
sobre cualquier lecho
mugriento y deshecho).

Patrizia Cavalli (Todi, 1947), Sempre aperto teatro, Einaudi, Turín, 1999


Un gatto che dorme il pomeriggio
nel larghissimo letto padronale
in un punto qualunque, però comodo,
che si sveglia in un'ora qualunque
perché qualcuno passa e lo carezza,
non si sveglia del tutto né si chiede
chi è che lo carezza, ma si sporge
del sonno solo un po'
per stirarsi in arrendevole lunghezza
perché duri di più quella carezza.
Forse cosí potrebbe essere l'amore.


Terapia

Ah, datemi una stanza in un albergo
una stanzetta una stanzetta in un albergo
sí, una stanza una stanza in un albergo
una stanzetta una stanzetta in un albergo...

(... e via cosí di seguito
senza fermarsi mai,
finché annoiati o esausti
si cade tramortiti
sopra un qualunque letto
anche se sfatto e lercio).

---
Ilustración: Sleeping Girl, 1964, Roy Lichtenstein

miércoles, febrero 23, 2011

Patrizia Cavalli / Poemas, 2




Aun cuando parece que el día
ha pasado como un ala de golondrina,
como un puñado de polvo
arrojado y que ya no es posible
recoger y la descripción
el relato no encuentran necesidad
ni escucha, hay siempre una palabra
una palabrita que decir
aunque sea para decir
que no hay nada que decir.

*

En el cesto de la ropa blanca sucia
reconozco el verano
los pantalones livianos las camisetas.

*

Tengo mucho apuro por partir
para poder pararme a limpiar
las huellas de la escapada.

*

Dulcísimo es quedarse
y mirar en la inmovilidad
soberana la belleza de una pared
donde el hilo de la luz y la lámpara
existen desde siempre
para garantizar su permanencia.

*

Montaña de luz abanico
¡paisajes paisajes! cómo podré
desatar mis pies, cómo
descender -reina de las rocas
y de los abismos- al paso involuntario,
a la mano que abre una puerta, a la voz
que pregunta dónde iré a comer.

Patrizia Cavalli (Todi, 1947), Poesie, Einaudi, Florencia, 1999
Versiones de J. Aulicino


Anche quando sembra che la giornata / sia passata come un'ala di rondine, / come una manciata di polvere / gettata e che non è possibile / raccogliere e la descrizione / il racconto non trovano necessità / né ascolto, c'è sempre una parola / una paroletta da dire / magari per dire / che non c'è niente da dire.


Nel cesto della biancheria sporca / riconosco l'estate, / i pantaloni leggeri le magliette.

Avevo troppa fretta d partire / per potermi fermare a ripulire / le tracce della corsa.


Dolcissimo è rimanere / e guardare nella immobilità / sovrana la bellezza di una parete / dove il filo della luce e la lampada / esistono da sempre / a garantire la loro permanenza.

Montagna di luce ventaglio,/ paesaggi paesaggi! come potrò / sciogliere i miei piedi, come / discendere - regina delle rupi / e degli abissi - al passo involontario, / alla mano che apre una porta, alla voce / che chiede dove andrò a mangiare.

---
Foto: Patrizia Cavalli Facebook

jueves, mayo 27, 2010

Patrizia Cavalli / Poemas, 1




Cuántas tentaciones atravieso
en el recorrido entre la pieza
y la cocina, entre la cocina
y el baño. Una mancha
en el pared, un pedazo de papel
caído en el piso, un vaso de agua,
un mirar por la ventana,
hola a la vecina,
una caricia a la gatita.
Así olvido siempre
la idea principal, me pierdo
por el camino, me desarmo
día a día, y en vano.


Ser testimonio de sí mismos
siempre en propia compañía
pero dejados solos en liviandad
tener que escucharse siempre
en cada acontecimiento físico químico
mental, es la gran prueba
la expiación, y este es el mal.


Yo sola, dueña de la casa
he cerrado la puerta
he bajado las cortinas.
Y afuera cuatro canarios
enjaulados parecían cuatro forestas
y las cuatro mil voces de los despertares
confusos en el retorno de la luz.
Pero más allá de la puerta
en los pasillos oscuros, en los cuartos
casi vacíos que capturan
los sonidos más lejanos
los pasos miserables de lánguidos regresos
a casa, se encendían nacimientos
y peligros, se consumaban
muertes sospechosas e indiferentes.


¿Y creías que yo no te había visto
morir en un rincón
con el vaso que se te caía de las manos
el cuello rojo e hinchado
avergonzándote un poco
por haber sido sorprendida
una vez más
después de tanto tiempo
en la misma posición en la misma condición
pálida temblorosa llena de excusas?

Patrizia Cavalli (Todi, 1947), Poesie, Einaudi, Florencia, 1999
Versiones de J. Aulicino


Quante tentazioni attraverso / nel percorso tra la camera / e la cucina, tra la cucina / e il cesso. Una macchia / sul muro, un pezzo di carta / caduto in terra, un bicchiere d'acqua, / un guardar dalla finestra, / ciao alla vicina, / una carezza alla gattina. / Così dimentico sempre / l'idea principale, mi perdo / per strada, mi scompongo / giorno per giorno ed è vano

Esseri testimoni di se stessi / sempre in propria compagnia / mai lasciati soli in leggerezza / doversi ascoltare sempre / in ogni avvenimento fisico chimico / mentale, è questa la grande prova / l'espiazione, è questo il male.

Io sola padrona della casa / ho chiuso la porta / ho tirato le tende. / E fuori i quattro canarini / ingabbiati sembravano quattro foreste / e le quattromila voci dei risvegli / confuse dal ritorno della luce. / Ma al di là della porta / nei corridoi bui, nelle stanze / quasi vuote che catturano / i suoni più lontani / i passi miserabili di languidi ritorni / a casa, si accendevano nascite / e pericoli, si consumavano / morti losche e indifferenti.

E cosa credi che io non t'abbia visto / morire dietro un angolo / con il bicchiere che ti cadeva dalle mani / il collo rosso e gonfio / vergognandoti un poco / per essere stata sorpresa / ancora una volta / dopo tanto tempo / nella stessa posizione nella stessa condizione / pallida tremante piena di scuse?

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Foto: Cavalli mentelalupula