Fin de año en Salamanca

Estos días de fin de año los hemos pasado en Salamanca en familia y he podido disfrutar de algunos ratos como:

- Pasear por la zona centro (C/ Toro, Zamora, Pza Mayor, Catedrales, Casa de las conchas..). Es una ciudad preciosa para pasear y quedarse con la boca abierta ante sus edificios con historia.
- Comer un pincho super rico en El Corrillo
- Comprar dos pijamas molones en Women Secret
- Ir a visitar a mis abuelos al pueblo
- Jugar a juegos de cartas (Smash Up, Sushi go)
- Curar el catarro con el que comencé el 2016
- Comer cochinillo y fiambres con huevo hilado
- Ir al centro comercial El Tormes y Capuchinos. 
- Ver con asombro como Zen se pasa todo el viaje dormido.
- Comer pan rico rico (con mucha miga)

Resumiendo... en imágenes

1. Va de selfies
2. Mi pequeño amor
3. Nueva cazadora
4. Modo lectura ON
5. Queso de tronchón, regalo de un cliente
6. Dulces típicos de Salamanca jejeje
7. Pret a porter berenjena
8. Pasteles de domingo en casa de Carmela
9. Me :)

PD: Ayer por la mañana estuvimos en Puerto Venecia y aproveché para comprar en Decathlon ropa para hacer elíptica en este tiempo que viene. 
Hoy con mi nueva equipación he hecho 33 min (3,3km, here we go!!)

Resumiendo... en imágenes

1. Look sweet to work
2. #melacomo #Roma
3. Zen en su siesta
4. Selfie ascensoril
5. Look working girl
6. Primer plano
7. Pan de Salamanca, increíble!!
8. Me lo leo en dos días, relatos cortos.
9. Palmera super rica y enormee en Salamanca

Apuntes de Salamanca...

 

Ermita del Cristo de Hornillos

LA llave

Plaza Mayor de Salamanca

Mmmmm :)

Rosas-verdes-azules

Saquito de farinato

Casa de las Conchas

Momento tapeo

 

Nuevo vestido

Estos días de Semana Santa hemos estado como ya os comenté por Salamanca y os dejo en esta entrada algunas cosas que hemos hecho...

- Ir a Arabayona a ver a mis abuelos paternos
- Visitar al Cristo de Hornillos
- Comprarme unas deportivas flúor
- Cenar chocolate con churros
- Ir a tapear al centro de Salamanca (alguna tapa de autor jeje) y a degustar una tabla de raciones en Rufo's.
- Admirar la plaza Mayor
- Volver como siempre a la Casa de las Conchas
- Comprarme un vestido skater negro
- Comer en el Burger King
- Ver fútbol, viernes noche
- Ayudar a una asociación benéfica de animales
- Visitar Shogun, el CC El Tormes y el Vialia
- Fichar prendas para la nueva temporada
- Tomar unos cafés y helados ricos, mi primer helado de la temporada (fresas con trocitos)
- Ratos con la familia

Resumiendo... mis días en Salamanca!

- Parada en Arabayona para ver a mis abuelos y visita a la ermita del Cristo de Hornillos.

- Lluvia, lluvia y nieve; sólo puede salir una procesión en todos los días pero estoy segura que si la Semana Santa fuera en agosto también llovería. Además hace falta la lluvia no? Pues quizás debería ser motivo para alegrarse!

- Compramos chorizo ibérico de Guijuelo, madre mía que cosa más ricaaaaa.

- Pizzas en familia frente al Zaragoza-Barça. No me gusta el fútbol pero sí las pizzas!

- Café+pincho=1,80€, si alguien encuentra algún sitio en Zaragoza con esos precios que me avise; muy bueno y realmente barato.

- Nos quejamos del diesel en Zaragoza (1,36€/litro), lo hemos llegado a ver a 1,43€/litro en Castilla León :S

- Me compro la Cuore Stilo, ideas de ropa asequibles a nuestro bolsillo!

- Rissoto de setas y empanada con dátiles y bacon entre otras cosas ricas que cocinaron los hombres un día ;)

- Lasaña de carne y crepes de jamón y queso otro día! Acompañado por un pan muy rico que no he visto por Zaragoza y se llama colón (con mucha miga), hay otro que se llama libreta y también está muy bueno!

- Pasamos por Mercadona y aprovecho para comprar una mascarilla para el pelo y un pintauñas azul cielo para el verano!

- Comida japonesa hecha por una amiga de mis cuñados nacida en Osaka (verduras en tempura, ensalada de pepino y algas, arroz tradicional japonés, pollo tempura con una salsa japonesa...)

- "No more monkeys jumping in the bed", "I'm Bringing Home a Baby Bumble Bee", canciones infantiles en inglés que Yuriko pedía que le cantásemos!

*Fotos tomadas en Arabayona de Mógica (Salamanca). Abril 2012.

Mi semana...

A principios de semana tuve ronda de médicos y pruebas:

- Lunes: análisis de sangre en el hospital general (merecido desayuno con Óscar, me como una herradura de cabello de ángel rica rica)

- Martes: De nuevo al hospital para un scaner tras el cual me fui a comer con mi madre (había que ir en ayunas) y después por la tarde a comprar ropa (Mango y Zara).

- Miércoles: Oncólogo, me dió los resultados: todo sigue bien!!!! Otros 6 meses de tranquilidad, hasta octubre no me vuelve a ver :) :) :)  con noticias como esta no necesito nada más, ese "poder respirar" al salir de la consulta no se paga con nada, el que pase por situaciones así podrá entenderme.

A la salida del oncólogo pusimos rumbo a Salamanca, donde hemos estado estos días de Semana Santa con la familia (lluvia y nieve incorporada jeje) y hoy ya hemos vuelto. Os contaré en sucesivas entradas más sobre nuestro viaje.
Ahora permitidme que siga disfrutando mis "burbujas de felicidad".

Qué recuerdos (Veranos)

Esta canción me trae recuerdos de Arabayona (Salamanca), donde veraneaba muchos "agostos" cuando era más pequeña.
Me trae recuerdos de las peñas, de nuestra peña, a la que había que acceder bajando como 20 escalones de adobe y que debido a mi condición de "pato" más de una vez acabé tropezando y en el suelo.
Me recuerda a paredes forradas de saco de patata (rural rural jeje) ya que había mucha humedad. Esas paredes donde irían más tarde nuestras firmas y donde muchos se declaraban su "amor eterno".
Esos veranos de ropa de batalla y cintas de cassette.
De llamadas en cabinas de teléfono en la plaza del pueblo y gorros de paja.
De intercambio de direcciones y de risas.
De visitas a otros pueblos y al monte a comer asado.
De Malibú y Estopa.
Si quereis saber más de mis geniales veranos y aquellos recuerdos podeis leer la entrada que hice hace tiempo pinchando AQUÍ.

Esta entrada va para todos los que pasaron esos días, tardes y noches conmigo, los que hicieron que tenga ese recuerdo siempre presente cuando pienso en el pueblo.

Desde Salamanca...

El jueves me llegó un paquetito desde Salamanca como bien dice el título.
Mis suegros me han mandado un libro que sabían tenía ganas de leer, "El secreto", ¿lo habeis leído?
Junto al libro iba un conjunto de pendientes y colgante con ágatas azul cielo traídos de un viaje que hicieron este verano.
Y por último también venía un calendario 2011 del Cristo de Cabrera al que le tengo mucha devoción y siempre que vamos a Salamanca nos acercamos al pueblo de Cabrera a verle; este último detalle no sale en la foto.

Gracias de nuevo a Marisa y Agustín, que sé que alguna vez se pasan por aquí a leerme :)

Recordando aquellos veranos

Esos veranos en los que mi felicidad se basaba en estar con mis amigos en la peña escuchando una y otra vez el primer cd de Estopa, cantando todas sus canciones, y hablando de qué chicos nos gustaban o de qué ropa nos pondriamos para el baile, y esas cosas de juventud temprana.
Esos veranos en los que sólo aparecías en casa para comer y cenar ya que el resto del tiempo lo pasabas en la peña con los amigos a los que veías una vez al año y con los que compartías tantas cosas, tantas risas, tantos bailes...
Esos veranos de ropa de batalla para diario y ropa de boda para la misa de domingo.
Esos veranos de subir al sobrao o azotea de la casa a buscar tebeos y pasar horas leyendolos (antes de tener peña) junto a la ropa tendida.
Esos veranos de ver agujeros redondos en muchas puertas de las casas por donde entraban los gatos.
Esos veranos en los que bailabas en la plaza del pueblo todas las canciones que tocaba la orquesta de turno con sombreros de paja.
Esos veranos de calor intenso reuniendonos a la misma hora en el "montículo" (lugar de quedada) para hablar de cosas banales.
Esos veranos en los que no existían los móviles y aún se veían personas en la cabina de teléfono de la plaza del pueblo.
Esos veranos en las peñas con las paredes forradas de sacos de patatas, tan típicas del pueblo y las magníficas fiestas de agosto llamadas "fiestas de la patata", donde se degustaban toda serie de platos preparados con este tubérculo.
Esos veranos donde se acercaba al pueblo gente de fuera como yo (nos llamaban los forasteros) y gente de los pueblos de alrededor y no cabía un alma más en la plaza.
Esos veranos de vermut de domingo con las mejores galas que estabas deseando quitarte al llegar a casa.
Esos veranos en las escaleras de la iglesia jugando a beso, verdad o atrevimiento.
Esos veranos que ibas con la familia al monte a comer tortilla de patata y embutidos y te maravillabas con la cantidad de árboles "enormes" que había, mientras recogías piñas y musgo y respirabas "aire puro".
Esos veranos con mi hermana subidas en la carretilla del abuelo mientras nuestro padre nos llevaba (menuda atracción!!), subir al tractor era toda una experiencia jeje.
Esos veranos que aprendí a jugar a juegos de cartas y ahora no recuerdo ninguno.
Esos veranos con esas despedidas prometiendo escribir cartas que luego llenaban el buzón con la consiguiente alegría (escribía una media de 3-4 cartas a la semana).
Esos veranos con camisetas de Sensación de vivir 90210, vaqueros o mallas y sandalias de esparto (creo que menos de lo de Sensación de vivir, todas las modas vuelven por horribles que estas sean jeje)
Esos veranos viendo pasar a tractores cada minuto, rebaños de ovejas, campos de trigo y girasoles, patatas y remolacha y perros tumbados por las calles.
Esos veranos que ibas a la panadería del pueblo y olía taaaan bien que no sabías que coger, mis preferidas eran las raquetas, un dulce con crema pastelera.
Esos veranos que pasé en mi juventud en Arabayona de Mógica, un pueblo de Salamanca...
Siempre me gustó veranear en el pueblo...

Hornazo salmantino

Desde el siglo XVII, viene celebrándose de forma continua la tradición propia de Salamanca de “El Lunes de Aguas”.
La festividad recuerda el retorno de las prostitutas que abandonaban la ciudad en Cuaresma y se refugiaban en el arrabal.
Es una de las tradiciones más participativas de la ciudad.
Los orígenes de esta fiesta se remontan al reinado de Felipe II, cuando el rey dicta unas ordenanzas según las cuales las mujeres públicas que habitaban en la Casa de Mancebía de Salamanca debían ser trasladadas, durante la Cuaresma, fuera de la ciudad.
A partir del Miércoles de Ceniza, las prostitutas abandonaban su residencia habitual y eran trasladadas al otro lado del río Tormes.
Hay muchas leyendas en torno a esta fiesta. El Padre Putas, era el cura encargado de vigilar, cuidar y atender a las prostitutas. Este personaje, después convertido en el Padre Lucas, el cabezudo más famoso en los días de fiesta salmantinos, acompañaba a los estudiantes a recoger a estas mujeres, el lunes siguiente al de Pascua (Lunes de Aguas).
Podemos imaginar la alegría y la fiesta que preparaban los estudiantes que no reparaban en comida, bebida y bailes para celebrar la llegada en barcas de las alegres mujeres.
Hoy, no van a buscar a aquellas mujeres al río (aunque algunos años se ha representado esta escena en el Tormes), pero siguen preparando el rico hornazo y saliendo al campo para celebrar la terminación de la Cuaresma y recordar la alegría de los pícaros estudiantes junto al río.
Los salmantinos viven cada Lunes de Aguas en familia y con los amigos, degustan el hornazo y disfrutan de la naturaleza.
Según los estudiosos, esta fiesta atravesó por mejores y peores momentos, pero nunca desapareció.
El hornazo es la comida que se lleva al campo para merendar, es una especie de empanada rellena de carne de cerdo (chorizo, jamón,lomo), significa el fin de la cuaresma y de la prohibición de la carne durante esa época.
El hornazo, tradicionalmente, se hacía en las casas, donde las mujeres compraban la masa y la rellenaban de chorizo, salchichón, jamón y lomo casero, curados en las despensas de cada casa (después de haber hecho la típica matanza).
Aún existen algunos puntos de la provincia de Salamanca donde se reúnen las mujeres para hacerlos a mano y luego llevarlos al horno del pueblo para que se cuezan.

El hornazo lo he comido estos días en Salamanca, está buenísimo y aunque es típico de estas fechas se puede encontrar en panaderías y pastelerías el resto del año.
En la cocina tengo otro esperando a ser abierto.. mmmmm, ¿lo habéis probado?

Promesa cumplida: Cristo de Cabrera

Hoy domingo hemos vuelto de Salamanca, ha sido un viaje express ya que mi marido estando yo estas navidades ingresada en el hospital hizo una promesa de recorrer a pie el camino desde Salamanca capital a la ermita del Cristo de Cabrera (cerca de 30 km) si yo me recuperaba de la parálisis que me dejó varios días sin movilidad ni sensibilidad, entre otras cosas.
Como poco a poco mi recuperación está siendo muy buena, aprovechamos para ir estos 3 días y él pudo realizar la promesa y por supuesto dar gracias, como yo también hice.
Por supuesto él hizo el camino a pie y a mí me llevaron en coche hasta la ermita donde le estuve esperando hasta que llegó.
Tengo especial devoción por este Cristo así como por la Virgen del Pilar (patrona de mi ciudad) y desde la primera vez que visité esta ermita hace unos años, acudimos cada vez que vamos a Salamanca allí.
Esta ermita tiene un encanto increíble ya que está rodeada del campo charro y se pueden observar a los toros y vacas pastando, caballos, a los cerdos comiendo bellotas de los que sale el jamón ibérico de bellota más exquisito, a las ovejas con el pastor y los perros, gallinas detrás de los andares portentosos de los gallos y un sinfín de animales así como de vegetación, predominando en el paisaje las típicas encinas grandes y robustas.
Él hace tantas cosas por mí, esta promesa la ha cumplido con horas a sus espaldas y a sus pies.... le tengo que querer...

Detalles de Salamanca

Esta es la pulsera que me compré este verano en Salamanca, con el típico botón charro (ó filigrana charra) adornandola en toda su extensión. Los pendientes a juego me los trajeron mis padres un mes más tarde cuando volvieron de pasar unos días por Salamanca. Los llevo muy a menudo, puesto que me gustan para diario y me traen recuerdos de esta fantástica tierra.
En la foto, la Plaza Mayor de noche.
¿Conocéis Salamanca?

Mis compras en Salamanca

Hoy la entrada va de compras. Aquí pongo algunas de las cosas que me compré estos días en Salamanca: un espejo en forma de tableta de chocolate, una cartera blanca, unas sandalias rosas, una camiseta con un perro y un bolso tipo saco fucsia (en la foto parece más claro pero es fucsia intenso). Las sandalias romanas las puse en una entrada anterior y el resto de cosas ya las comenté. Seguimos con un calor intenso y abrasador en el Valle del Ebro.
Esta es mi primera entrada con firma, me gusta mucho como queda esta aplicación en el blog, así que irá apareciendo en todas mis entradas :)