Mostrando entradas con la etiqueta 4. Paisajes. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta 4. Paisajes. Mostrar todas las entradas

domingo, 20 de noviembre de 2016

La costa de las grutas y las calas en el Algarve portugués

 
Ponta da Piedade
Las rocas blandas, areniscas y calizas, y el agua siempre han sido malos compañeros de viaje. Sobretodo para la roca, que ve cómo el líquido elemento va disolviéndola y cambiando su fisonomía permanentemente. El resultado de esta erosiva unión es, sin embargo, todo un halago para los ojos. Un compendio de grutas y formas imposibles que parecen concentrarse en un pequeño tramo de la costa del Algarve (Portugal), al abrigo de poniente. Lo he bautizado como “la costa de las grutas y las calas”. Si, ya se que no es muy original, pero describe el paisaje costero que Lagos ofrece al visitante en este rincón del occidente del Algarve tan ligado a la historia marinera del país. Un tramo de costa absolutamente espectacular que puede ser recorrido por una cómoda senda “colgada sobre los acantilados” y que en verano alguna empresa local ofrece la oportunidad de contemplar desde el mar (embarcando en el puerto deportivo de Lagos o en el pequeño muelle de Ponta da Piedade).





La senda arranca en Lagos y se dirige por la línea litoral hacia el sur en un continuo sube y baja (sencillo) por los acantilados para ir “de playa en playa”. Praia do Pinhao, Praia da Dona Ana (probablemente la más bella) y las calas del Cabo Ponta da Piedade. Senda bien acondicionada para bajar a las principales playas con escalones en la piedra o escaleras de madera. Existen también grutas, cavidades y formaciones naturales como Ponta da Piedade, que se ven mejor desde el mar. Algo más de 2 km. ida hasta el faro, que se prolonga algo más con las bajadas y subidas a las playas y calas. Más que contaros cómo es el recorrido lo mejor es apreciarlo en estas imágenes ya que es muy visual… 



domingo, 18 de septiembre de 2016

Paisajes de agua y montaña en el valle de Siscaró


Cuando ya se palpan las primeras nevadas otoñales, y antes de que el blanco cubra hasta el año que viene la alta montaña de Andorra quiero proponeros otro de esos lugares únicos con mezclas naturales de las que enganchan. Una vez más agua y montaña. En este caso en el valle vecino a Juclar, y sobre todo, un paisaje de praderas alpinas y agua en muy diversas manifestaciones: torrentes, balsas de agua remansada, regatos, cascadas, estanys… todo forma parte del riu del Siscaró… y del espectáculo natural de este precioso valle andorrano. Valle que ha cobrado fuerza también como lugar óptimo para observar marmotas gracias al asentamiento de esta especie en las alturas rocosas.




El acceso es el mismo que en el caso del valle de Juclar, incluso comparten los primeros pasos del recorrido (15 minutos) entre un agradable bosque por la orilla izquierda orográfica del río, hasta el lugar en el que un cartel de madera nos da a escoger entre seguir a la izquierda hacia las alturas de juglar o seguir a la derecha hacia Siscaró. En ese punto, además del cartel hay un banco que invita irremediablemente a sentarse. El lugar no puede ser mejor. Por cierto a lo largo y ancho de este mundo parecen prodigarse esos bancos de madera o forja, colocados en lugares estratégicos, dónde si no, y a los que algún día dedicaré quizá una sección propia. Esas vistas y esos lugares en los que están bien lo merecen.




Volviendo al Siscaró, el valle se remonta por un sendero sin pérdida hasta la pradera donde las aguas se remansan. Son las aigüestortes, paraíso herpetológico. Arriba se puede continuar por detrás del refugio del Siscaró hacia las Basses del Siscaró o bien a la derecha (seguir el GRP) hasta los estanys -del Siscaró y de les Canals Rogers. Todas, láminas de agua de gran belleza enmarcadas en un escenario de montaña agreste pero suave…. Difícil contradicción y complicado de explicar; mejor verlo. Maravilla de lugar.

sábado, 28 de mayo de 2016

Picos de Europa, paisajes montañosos de ensueño

Lago de la Ercina, Picos de Europa.

Con la primavera avanzada, casi tocando con la punta de los dedos los primeros días de verano, los prados huelen más a hierba fresca que nunca. Un aroma agradable, ya muy familiar, que va acompañado de los relajantes paisajes circundantes y del tintineo de los cencerros de la enorme cabaña ganadera que pasta por estos paisajes altomontanos de Picos de Europa. Me encanta, me relaja. El cuerpo y la mente me piden estas sensaciones cada pocos meses. No hay mejor terapia antiestrés que esta escena que se repite una y otra vez cada ocasión que vengo a Picos para saborear cualquiera de las rutas que jalonan este pedacito de tierra astur verde y gris. Rutas que unas veces me llevan hasta alguna de sus emblemáticas montañas, otras hasta alguno de los miradores (mirador de la Reina, del Rey, del Príncipe, de Ordiales…), otras recorriendo bosques y gargantas… Casi siempre atravesando majadas con cabañas de pastores que se levantan entre praderas de flores en ubicaciones que uno ya las quisiera para sí a efectos de empadronarse... si Hans Christian Andersen hubiera conocido estos parajes sin duda se hubiera mudado desde su Dinamarca natal hasta estas montañas asturianas. No hay mejor inspiración para el maestro de los cuentos infantiles.  
Senderistas bordeando el Lago Enol

Cabaña de pastores en la Vega de Enol

Y es que en Picos de Europa se conjugan como en pocos lugares los valores naturales y los usos tradicionales (pastoreo estacional, majadas, quesos, etc.). Una Reserva de la Biosfera de manual, con unas vastas dimensiones que abarcan tres provincias (Asturias, Cantabria y León) y que se caracterizan por aglutinar naturaleza de la buena en un gran macizo montañoso calcáreo (formado en realidad por tres macizos separados por los ríos Deva, Duje, Cares y Sella) que se eleva por encima de los 2.600 metros de altitud casi al borde del mar. Grandes representaciones de bosque atlántico y sobresalientes praderías de alta montaña caliza ponen el toque vegetal a este terreno donde viven lobos, osos, rebecos, ciervos, corzos, quebrantahuesos, águilas reales, urogallos, nutrias, y un largo etcétera de emblemáticos animales. Valores geológicos, geomorfológicos, botánicos, ecológicos, zoológicos, culturales y paisajísticos aglutinados en las 67.455 hectáreas del Parque Nacional Picos de Europa, que incluye el macizo occidental (Montaña de Covadonga), semilla de la actual red de parques nacionales de España (primer parque declarado, en 1918). 
Pico Urriello, la cima más emblemática de la Reserva de la Biosfera

Vega de Enol y las cumbres del macizo occidental de Picos de Europa

En 2002 Picos de Europa pasó a formar parte de la red de Reservas de la Biosfera del Principado de Asturias. Está declarado LIC y ZEPA y cuenta con cuatro  Monumentos Naturales en su parte asturiana, todos subterráneos: Red de Toneyu, Sistema del Trave, Ssitema del Jitu y Torca del Urriellu. Sobre el quebrantahuesos, los rebecos, las majadas y demás sobre el parque nacional podéis seguir leyendo en mi post.
Majada de Fana

Lago de la Ercina


Os animo sin duda a recorrer este rincón montañoso del norte de la Península Ibérica, diseñado para ser caminado a través de una bien tejida tela de araña de rutas y senderos. Una vez aquí, al primer minuto probablemente ya se os hayan acabado los calificativos…

lunes, 29 de junio de 2015

Ruta panorámica por la geología de las Subbéticas

Cañón río Bailón

El mapa que tengo ante mis ojos tiene como superficie un claro protagonista: la roca. Caliza para más señas. El mapa de las Sierras Subbéticas es casi un mapa del tesoro, pues además de ofrecer una muestra sobresaliente de karst y sus principales elementos: cuevas, poljes, sumideros, dolinas, manantiales, cortados, lapiaces, etc. guarda información de enorme valor, la de este verdadero museo al aire libre sobre los últimos 250 millones de años de la historia geológica del planeta.
Las Sierras Subbéticas son uno de los yacimientos de Ammonites más importantes del mundo. El de la imagen está en Fuente del Río. Cabra.

El Parque natural Sierras Subbéticas fue declarado en 1988 para proteger los importantes recursos naturales y en el año 2006 se incorporó a la lista de geoparques por su incuestionable valor geológico.
 
Zuheros
Recorrer estas montañas calizas es leer, casi en cada piedra, la historia viva (y sobre todo fósil) de la geología de la Tierra. Desde hace 250 millones de años, cuando toda la zona se encontraba bajo la influencia de las aguas del mar de Tethys, bien en su parte sumergida, donde nadaban cefalópodos como ammonites y belemnites, o bien formando parte de las orillas, en las que aparecían lagunas y ríos sobre suelos de limo, arcilla y arenas. Es el Triásico, inicio del periodo de dinosaurios.
Nava de Cabra 

En el Jurásico, los dinosaurios dominan la zona con más especies y animales de mayor tamaño. El agua marina llega hasta las faldas de Sierra Morena. La Subbética se encuentra bajo el agua y los ammonites son los reyes submarinos nadando sobre un lecho que originará las rocas calizas. Las Sierras Subbéticas son uno de los yacimientos de ammonites más importantes del mundo. Hace 180 millones de años el fondo marino sufre movimientos tectónicos que originan depresiones y elevaciones. En las elevaciones se depositan arenas blancas (oolitos) sobre la base caliza. En los millones de años siguientes el nivel del mar sube y baja en diferentes ocasiones y varios movimientos tectónicos originan plegamientos del terreno que explican el origen del paisaje actual, con montañas calizas que los agentes de erosión externa (karst) han terminado de modelar disolviendo lentamente la roca caliza. De hecho lo siguen haciendo a diario.
 
Villa de Priego

Para recorrer en profundidad el geoparque lo idóneo es combinar el recorrido en vehículo aprovechando sus carreteras, que muestran de cerca los principales paisajes, con las rutas a pie que permiten ver los diferentes elementos y estructuras geológicas. Desde la villa situada en Zagrilla, donde os recomiendo alojaros, lo mejor es ir hacia Priego para tomar la carretera a Luque (pasando junto a la Nava de Luque) y de allí ir circunvalando el geoparque hacia el oeste, hacia Cabra. En este tramo entre Luque y Cabra destaca sobremanera el cañón fluvial labrado por el río Bailón en Zuheros y la cercana Cueva de los Murciélagos, también en el precioso pueblo de Zuheros. La Cueva, llamada así por albergar una interesante población de murciélagos, es uno de los yacimientos neolíticos más importantes de Andalucía. En la carretera de 4 kilómetros que conduce a través de lapiaces desde Zuheros hasta la Cueva se puede contemplar el Cañón del Bailón desde una serie de privilegiados miradores.
Centro de Interpretación de la Cueva de los Murciélagos

La sierra de Cabra es la que mejor muestra el paleokarst, esas montañas calizas con superficie de arenas blancas (oolitos). Os recomiendo sin duda subir hasta la ermita de Nuestra Señora de la Sierra, donde hablando de privilegiados miradores se encuentra ni más ni menos que el conocido como Balcón de Andalucía. Podéis imaginar que la panorámica circular que se disfruta desde sus 1.217 metros es impresionante, llegando la vista hasta Sierra Nevada.

Durante la subida desde la carretera A339 (carretera que parte en dos mitades al geoparque) se atraviesa el enorme lapiaz de Los Lanchares, se goza de una vista privilegiada del polje o Nava de Cabra. Muy cerca de donde empieza la subida pasa la senda que lleva hasta Fuente de Jarcas, una interesante cantera romana. Gran parte del agua infiltrada en el lapiaz aparece en la localidad de Cabra (en el paraje Fuente del Río), tras un recorrido subterráneo de 5 kilómetros. Estos nacientes o manantiales kársticos son una constante en la zona. El lapiaz se caracteriza por una serie de acanaladuras, algunas muy afiladas, que se forman por la acción erosiva del agua enriquecida con CO2 y ácidos húmicos, que disuelve la roca caliza desnuda. La roca caliza de Cabra es llamada nodulosa rojiza y conocida popularmente como el “mármol rojo de Cabra”. Se explotó en zonas como Los Lanchares y El Cortaero, además de Fuente de Jarcas.
Cantera romana Fuente de Jarcas
Paisajes entre Carcabuey y Rute


De regreso a la A339 continuad hasta Carcabuey, muy cerca del punto donde inicié el relato del recorrido. Desde esta localidad se cruza otra parte de las sierras por carreteras locales hasta Rute, en el extremo suroeste del geoparque. Los paisajes de olivos y bosque mediterráneo de las sierras de Rute y Horconera, en el que sobresalen las máximas alturas de este espacio natural (La Tiñosa, con 1570 m. altitud, que es además el techo de Córdoba), siempre sorprenden. Finalmente os recomiendo llegar hasta Iznájar, dominando el mayor embalse andaluz, y completar la ruta circular que lleva a Priego. Una ruta de “ecotouring geológico” imprescindible.

miércoles, 29 de octubre de 2014

Las Cataratas más espectaculares del mundo

Salto de la Herradura, en las cataratas del Niágara

Al menos de mi mundo... Es este un ranking personal, es decir, que seguro las hay más espectaculares pero como siempre en este blog, hago referencia a los lugares que conozco. Aún así los tres primeros puestos parece que no ofrecen duda…

Salto Angel, Venezuela.
Salto Angel (Venezuela).
Sin duda el más espectacular salto de agua de cuantos he visitado. Lo de “salto”  le viene al pelo a la catarata “descubierta” por Jimmy Angel pues el agua que discurre por la cima plana del Auyán Tepui, en la Gran Sabana venezolana, se precipita al vacío en una vertiginosa de casi 1 kilómetro de caída. 979 metros es lo que mide esta cascada, la más alta del mundo. Llegué hasta el Salto Angel remontando el río Churún en 2002. Acceder luego a pie hasta isla Ratón y ver el salto desde abajo es algo que no olvidaré jamás, como el viaje en su conjunto en el que realicé el trekking hasta la cima del Auyán Tepui. Desde Canaima (en la laguna hay también bellas cascadas) se organizan vuelos panorámicos. Inolvidable. Más info.

Cataratas de Iguazú desde los miradores brasileños.
Iguazú (Argentina-Brasil).
No es la más alta, ni la más grande pero si la que mayor número de saltos posee. En total 275 cascadas de diferente tamaño que conforman las imponentes cataratas de Iguazú. El entorno selvático se encarga de envolver con el mejor papel de regalo este presente para los sentidos. He estado un par de veces, pero volvería las que hicieran falta. Os recomiendo visitar ambos lados de las cataratas, el de las pasarelas argentinas y el lado brasileño, cada uno aporta lo suyo. Más info.

Cataratas Victoria, entre Zambia y Zimbabwe
Cataratas Victoria (Zambia-Zimbabwe).
Por muchos motivos es una de mis preferidas. Estas si son las mayores cataratas del mundo, pues se trata de un solo salto de casi 2 kilómetros de ancho. Su altura, sobre 100 metros, no es excesiva pero si el volumen de agua. No existe en el planeta otra cascada que mueva 500 millones de litros de agua por segundo, produciendo una columna de vapor de agua que se puede ver a kilómetros de distancia (Mosi oa tunya, es como se llama en la lengua local y que podría traducirse como “la humareda que ruge”). He tenido la fortuna de verla en diferentes épocas del año, con más agua, con menos agua… Siempre magnífica. Más info.

Niágara desde el lado canadiense.
Cataratas del Niágara (Canadá-EEUU)
Confieso que me ha costado incluir las Cataratas del Niágara en esta lista. Sólo haciendo un ejercicio de abstracción urbanístico que han convertido a este impresionante enclave natural a caballo entre Canadá y Estados Unidos en un parque temático del agua, puedo incluirlas en mi ranking. Sus méritos naturales están sobrados para ser una de las más espectaculares del planeta. Especialmente la cascada de la Herradura. Más info.

Cascada Velo de Novia, en el estado mexicano de Chiapas
Velo de Novia (México).
Llegué hasta esta deliciosa cascada sin saber lo que me iba a encontrar. Desconocía su existencia hasta que el guía me invitó a hacer una parada en aquel viaje por Chiapas. Rápidamente me enamoró. No se si por el nombre que recibe debido a su forma cuando se desploma por la pared desde 70 metros de altura. Forma parte de las cascadas del Chiflón y es la más alta de las cascadas del río San Vicente (el Suspiro, Quinceañera, etc.). Una grata sorpresa en tierras mexicanas que me conquistó por su conjunto. Más info

Cascada grande de Plitvice, paraíso natural croata
Plitvice (Croacia).
Al igual que en el caso anterior, la cascada grande de Plitvice, sin ser espectacular en si misma (78 metros), es la mayor de entre todas las que se encuentran en el parque nacional de los lagos de Plitvice. El entorno, encajonada en este cañón, y sobre todo los espectaculares lagos que la rodean hacen que la experiencia de visitarla bien merezca estar en el ranking de las más espectaculares del mundo. Más info

Valle de Huanglong, en China
Huanglong (China).
Cuando uno llega al valle de Huanglong, en el corazón de las montañas de Sichuan, y lo recorre a pie, va descubriendo pequeñas cascadas y saltos de agua. Recuerdan a la de Pamukkale en Turquía, por ejemplo. En el caso chino, las cascadas por separado quizá no dicen nada, pero en realidad forman parte de la que es la mayor cascada travertina del planeta. Una cascada que en suave desnivel se va “desparramando” a lo largo de ¡7 kilómetros! Formando el fondo del valle de Huanglong. Un sendero permite ir recorriéndola. Más info

Cascada de Skögafoss, en el extremo sur de Islandia

Skögafoss (Islandia)
No es la mayor cascada de Islandia pero personalmente me pareció espectacular por la belleza del rincón que ocupa. Tiene una altura de casi 70 metros y quiero incluirla en la lista como representante del país de las cascadas: Islandia, uno de mis destinos favoritos. Allí se encuentran otras cascadas como Gullfoss, de mucha mayor envergadura, Godafoss o Dettifoss, la cascada más caudalosa de Europa. Sorprendentes son también Svartifoss y sus columnas basálticas, y Seljalandfoss, que se puede recorrer por su interior. Más info




Completarían esta lista otros saltos de agua que encuentro fascinantes, por diversos motivos, a falta despacio en el post al menos quiero mencionarlos. Desde la más alta de Europa, la cascada de Gavarnie (Francia) hasta la que probablemente es la más ancha del mundo, los saltos del Moconá (Argentina) pasando por otros pequeños rincones acuáticos del planeta como la cascada Thomson (Kenia), Murchinson (Uganda), las del valle de Ordesa (España), el Salto del Limón (República Dominicana), la cascada de Chamarel (Isla Mauricio), las cascadas del Valle de Rutor (Italia) y un larguísimo etcétera.

martes, 29 de julio de 2014

Las mejores playas de la Costa Brava


Misión siempre complicada y casi siempre injusta esto de hacer un ranking, la cosa se complica aún más cuando se trata de elegir las mejores playas en un enclave como el litoral de Girona, donde las playas y las calas de suma belleza proliferan. En mi caso la selección no atiende a criterios técnicos sino puramente estéticos y en base a ello he querido compartir con los lectores del blog las que considero son las Mejores Playas de la Costa Brava. Las más bonitas y naturales. Algunas de muy sencillo acceso, otras de más costosa accesibilidad pero buscando siempre que representen la belleza de litoral agreste, escarpado y rabiosamente bello. He puesto 6 playas igual que podría haber incluido 60 (ó 600) pero a través de estas 6, absolutamente distintas entre si, quiero mostrar la diversidad de paisajes costeros diferentes de la Costa Brava. Mi único objetivo: que os gusten y viajéis por unos momentos a este tramo de la costa de la península Ibérica.

Sant Feliu de Guìxols.

Sant Feliu de Guíxols
Entre la playa de San Pol y el puerto de Sant Feliu de Guíxols se esconde un corto pero espectacular tramo litoral que probablemente sea el que mejor defina el topónimo “Costa Brava”. Un sendero de ronda permite ir enlazando cómodamente las calas a través de los acantilados. A mi gusto, el mejor tramo de costa de Girona.

Illa Roja.


Illa Roja
Esta playa de Begur lo tiene todo para entrar en el ranking. Además de un acceso sencillo caminando desde la playa Sa Riera o mejor aún El Racó y la playa de Pals, presenta un buen tramo de arena, un bello islote rodeado de aguas cristalinas y unas buenas vistas sobre las islas Medas. Representante en este ranking de las playas nudistas, tan célebres en esta porción del noreste peninsular.


Playa de Aiguablava.

Aiguablava
Considerado desde siempre uno de los rincones más representativos de la Costa Brava, no es una cala solitaria sino que está al pie del Parador de Turismo y entre la proliferación de chalets, aún así no podía faltar la playa de Aiguablava por su binomio de aguas cristalinas rodeada de pinos y con sus tradicionales embarcaciones fondeadas.


Paraje de Tudela, Cabo Creus.

Cabo Creus
Lejos de ser una playa o cala tradicional de baño, sino que he querido elegir la playa del Paraje de Tudela por el singular paisaje rocoso y mineral modelado por la Tramuntana, probable máximo exponente de la extraordinaria geología del parque natural del Cabo Creus. Se accede por la carretera que lleva al faro del Cabo Creus.

El Port de la Selva.

El Port de la Selva
No se trata de una playa apartada y solitaria lo se, pero la playa de El Port de la Selva me gusta por su disposición al fondo de la ensenada y por su ubicación en el parque natural del Cabo Creus. La incluyo también en representación de otras bellas playas urbanas como Tamariu, Calella de Palafrugell, El Castell de Palamós, El Codolar en Tossa de Mar, etc.


Cala Calella, en L'Estartit.

Cala Calella

Entre L’Escala y L’Estartit, esta pequeña playa de difícil acceso (aunque se puede llegar caminando por el GR 92, resulta mucho más sencillo por mar), se encuentra enmarcada entre los espectaculares acantilados que separan estas dos localidades a caballo entre el Alto y el Bajo Ampurdán. Además la presencia cercana de las Islas Medas siempre le confiere un plus. Está en la lista como representante de la tranquilidad acantilada, de complejo acceso y rodeada de pinos. Cerca queda también otras calas espectaculares como Ferriola y Montgó.

jueves, 12 de junio de 2014

Glaciarismo en el parque nacional Aigüestortes y Estany de Sant Maurici

El glaciarismo: Lagos, valles y montañas.

Estany Gran d' Amitges

Hace millones de años todo el Pirineo se encontraba bajo el mar. Las pizarras y granitos que hoy forman el paisaje rocoso del parque nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici (Lleida) emergieron del fondo marino hace unos 200 millones de años y comenzaron una erosión marcada fundamentalmente por los sucesivos periodos glaciares del Cuaternario; periodos en los que se alternó la presencia de hielo con los periodos de deshielo. La acción del hielo y la nieve, con sus depósitos y retiradas, a lo largo de estos periodos, marcaron la fisonomía de un paisaje de montaña que hoy es un auténtico museo al aire libre de glaciarismo: circos glaciares, valles en “U” –colgados o escalonados- y la mayor concentración de lagos de origen glaciar del Pirineo (estanys), y muy probablemente del continente europeo.

Estany de Sant Maurici y Els Encantats.

Sierra de Crabes, junto al Portarró d'Espot

A estos grandes elementos del paisaje glaciar acompañan otros como las cubetas glaciares, las morrenas, neveros, lagunas estacionales y un sinfín de muestras geológicas del mejor glaciarismo pirenaico.

El resultado son unos paisajes de montaña de gran belleza jalonados a lo largo de los dos valles principales del parque: Sant Nicolau en la vertiente meridional y orientado al oeste, y del l’Escrita, orientado al este y situado en la vertiente norte del Portarró d’Espot (2.423 m. de altitud), el collado que sirve de divisoria a la cabecera de ambos valles.

En el parque proliferan los saltos de agua.

Para conocer un buen ejemplo de glaciarismo, y muy fotogénico, os recomiendo la ruta de Amitges. El recorrido pasa junto a los principales atractivos del valle de l’Escrita: el lago San Mauricio (estany de Sant Maurici) al pie de los míticos dos picos de Els Encantats, símbolo montañero del parque, y pasa por diferentes estanys y cascadas (Ratera) hasta llegar las cubetas glaciares de Amitges. Amitges se encuentra a unos 2.400 metros de altitud, por encima de los pinos negros que marcan el límite superior del bosque. Es terreno agreste, rocoso pero absolutamente encantador, con diferentes estanys (el mayor de ellos alcanza los 25 m. de profundidad) y el telón de fondo de las agujas  (Agullas d’Amitges) y los enormes picos de Saboredo y Bassiero. La idílica ubicación del refugio de Amitges invita sin duda al descanso. 

Amitges, uno de los mejores recorridos del parque.

Es una buena opción de ruta para realizar en familia pues existe un servicio de taxis 4x4 que pueden ahorrar buena parte de la subida, desde el pueblo de Espot hasta el estany Sant Mauricio, o incluso llegar hasta el refugio de Amitges.



Durante buena parte del año, las altas cumbres permanecen nevadas. Valle de Boí.

Caminando entre roca granítica en el embalse de Cavallers.

Junto a la roca, el agua es otro de los elementos característicos del parque. Hoy la encontramos fluyendo rápidamente mientras se despeña en estruendosas cascadas o bien avanzando mansa, tan lentamente que la falta de desnivel en algunas zonas ha terminado por formar meandros y grandes zonas encharcadas conocidas localmente como aigüestortes. Éstas se localizan fundamentalmente entre los estanys Llong y Llebreta, en el valle de Sant Nicolau y se llega a ellas por el valle de Boi (Patrimonio de la Humanidad). También disponible servicio taxis 4x4.

Estany Llebreta.

La Ruta de la Nutria es un precioso sendero que enlaza el estany de Llebreta con la zona de aigüestortes. Es apto para todo el mundo y es necesario emplear unas 2 horas para salvar los 430 metros de desnivel de subida remontando el río Sant Nicolau. El itinerario es una recompensa visual permanente, con tramos de bosque, cascadas como la de Sant Esperit y amplias vistas del valle. En determinadas épocas del año, las nutrias penetran en el parque remontando este río.
Zona de Aigüestortes.


Podéis aprender mucho sobre nutrias y otras especies autóctonas en el Centre Piscícola Ribagorçana, en El Pont de Suert. Bien vale la pena guardar media jornada para visitarlo.
Nutria.