Shintaro Fujiwara y Yoshio Muro han terminado recientemente esa Casa, en Osaka, para FujiwaraMura Architects.
Se ubica, al igual que muchos hogares japoneses, en un barrio residencial de alta densidad. Los arquitectos conciben así la pendiente como solución para el difícil proyecto.
Se crea así un espacio ambiguo e indefinido
que se utiliza no sólo como un medio de transporte, sino también como
un espacio en la galería, un espacio para jugar o
simplemente un lugar para sentarse.
Utilizan paramentos blancos, lisos, puros, para destacar el suelo y los elementos estructurales de madera. Se abren grandes vanos en los cerramientos que hacen que el espacio sea diáfano y limpio. El escaso mobiliario y la verticalidad que aporta la rampa hacen de esta casa un sitio relajado, casi un templo.
La espiral que sube crea la gran corriente de circulación. Un espacio continuo que perpetua cada habitación y a la vez cambia ligeramente según la estancia. Me impresiona la sensación de vacío. Me gusta el estilo sutil y llamativo a la vez de la arquitectura japonesa.