domingo, 27 de julio de 2008

Des-hacerme de vos

(No dirijo a nadie mi plegaria)

Yo no quiero, no puedo, seguirme con vos. Todo es pesado, y se vuelve oscuro. Quiero soltarte como a un globo, a cielo abierto…

Dejar caer las agalmas…con las que te adorné. Y cada minuto volver a nacer. Porque (se) (me) anula el alma, caen diluvios de sal…Y mi vida se hace pura piedra. Habito turbación y desasosiego. Sin luna merodeo (mis) (las) noches … (mil)

Y quiero soltarte como una amarra y que mi barco surque orillas verdes. Que la lógica me sirva para desenmascararte. Que mi galope sea liviano, ágil, mientras te desando en cada paso. Recobrar todos los sentidos de (en) mi piel…

Hundirme en mañanas amanecidas sin nostalgia. Aligerar mis pies descalzos y danzar mis días. Apropiarme de mi propia libertad- hoy soy extranjera de mí. Tan no conocida para mí misma… que la Nada me pertenece. Cometí la peor herejía, la más cruel… Mi cuenta cuenta números rojos… Sin embargo, no me debés nada, (Yo sí adeudo mi dignidad) Voy a desafiar a mi Ananké. No quiero saber de soledades, ni de encierros. Abrir la tranquera y hacer una gran fiesta, sin cobardes. Voy a construirme un ancho sendero. Que la música penetre directo a mi sangre, necesito. Enchastrarme con el óleo de mis juegos. Emborracharme de risas. "Necesito reavivar ciertos fuegos"

Y si te culpo a vos, me condeno.

Fotos: André Britó.

Nicola Ranaldi.