QUE CUNDA, QUE CUNDA...
El ayuntamiento de Jumilla, Murcia, ha decidido prohibir las manifestaciones religiosas en los polideportivos públicos. No se han atrevido a prohibir lo que les inquieta, que son las fiestas musulmanas, así que han encontrado una solución blanca y generalista. Las prohibimos todas, total, si solo son ellos lo que usan los polideportivos para sus fiestas. Pero me gustaría que cundiera el ejemplo, que otros municipios hicieran prohibiciones de ese estilo. Es más, que fueran más agresivos, que prohibieran las manifestaciones religiosas, las fiestas, en las calles. Frotándome las manos estaría si pasara en Sevilla, menuda Semana Santa más divertida que íbamos a tener...Y digo Sevilla por decir lo más rimbombante, pero no hay rincón de España que no tenga su fiesta, en algún momento, religiosa en la calle.
Por mucho que se vista de seda, el racista, racista se queda...