Hoy este blog - que es el vuestro - cumple siete años. Son muchos y en este tiempo han pasado muchas cosas. Desde la euforia del inicio y la de los tiempos expansivos de la blogosfera a la madurez de ahora con un cierto cansancio general en el universo de las bitácoras.
Particularmente puede que este año haya sido el más difícil en la trayectoria de La Canción de Tristan por mi incapacidad de encontrar el tiempo suficiente para dedicarme a postear. Pero creo que afortunadamente la famosa crisis de los 7 años se ha superado y creo que, al menos el primer trimestre del 2015, podré dar forma a las ideas que tengo en mente.
Por lo tanto sigan atentos a sus pantallas que lo mejor está por llegar... espero.
Salut!