¿Alguna vez te ha pasado encontrar una caja o bolsa llena de hilos y lanas que llevaban muchos años arrumbados y reaccionar como si hubieras encontrado un tesoro? A mi sí, eso fue lo que me pasó con los hilos que hay detrás de este chal, y con  más proyectos que ya iré enseñando, son hilos y lanas que tienen más años que Matusalén, pero son de tan buena calidad que están como cuando mi madre los compró o se los regalaron hace ya bastante años.

El chal está tejido con una aguja del número 6, he gastado justo dos ovillos y muy poco de otro, y mide más de dos metros de ancho y 80 cm de largo. Y por si quieres hacer uno igual o similar aquí te dejo el esquema por el que me he guiado para tejerlo, si te fijas el chal del esquema tiene flecos, pero yo le puse las puntas de otro chal, es cuestión de gustos, pero en este caso a mi me gustaba más con unas puntas.

*El esquema lo encontré en Pinterest.

Es un chal muy envolvente, grande, como le gusta a su dueña, que por cierto aún no lo ha visto, se lo daré la semana que viene por su cumpleaños. 

Y esto es todo por hoy, muy pronto te enseñaré más chales, esta vez sí serán para mi, uno lo tengo listo para bloquear, y el otro aún me tendrá entretenida unas semanas más.

No me quiero salir de mi  blog sin desear un ¡Feliz Otoño! a quienes me leéis desde este Hemisferio, y una ¡Feliz Primavera! a quienes me leéis desde el otro.

¿Te gusta leer? ¿Te gustan los libros? A mi sí, desde que era una niña me apasiona leer, aunque llevo un tiempo que tengo abandonada mi afición por la lectura, ahora paso más horas tejiendo que leyendo un buen libro, hasta que vuelva a coger uno entre mis manos y lo devore, yo soy así, como durante la pandemia que, cuando me quedé sin hilo y lana para tejer, leí más que tejí, me faltaban libros para leer ;)

De pequeña me encantaba jugar con mis amig@s, pero a la vez me gustaba tejer, diseñar y coser ropita para mis muñecas, me gustaba dibujar, cantar en el coro, oír música, pero también había días que me pasaba las horas leyendo en casa, me perdía en la lectura y no quería saber nada más, también recuerdo que me gustaba muchísimo pasar las horas en la biblioteca del pueblo, allí se me pasaba el tiempo sin darme cuenta. ¡Qué buenos recuerdos  guardo de la bibliotecaria! 

Una vez de regreso a Granada seguí con la afición de leer, un día mi abuelita me dijo que si quería podía intercambiar novelas en un quiosco del barrio, o si pagaba una pequeña cantidad de dinero, no recuerdo cuánto, me las podía llevar y devolverlas en unos días sin yo dejar ninguna a cambio, no tenía ni idea de que eso se podía hacer, nos os digo más... La de novelas que me pude leer, lo único es que la mayoría eran románticas, jajaaa.

¿Y a qué viene esta retahíla? Pues a que hace unas semanas una personita muy aficionada a lectura me preguntó si yo podría hacerle un estuche para libros a crochet, para proteger sus libros cuando los lleva en el bolso, y me ha dado por soltar ésto. 

Y, como no, aquí esta el estuche que le hice a crochet con los colores que ella eligió, pero que libremente yo combiné.

Como puedes ver en la foto anterior, este estuche está hecho en varias partes, primero tejí la base a punto bajo, luego hice 6 grannies que uní a punto cadeneta en zigzag, después uní la parte de los grannies a la base a punto deslizado, seguí tejiendo el resto del cuerpo del estuche a puntos altos al rededor de los grannies, y finalmente le tejí la parte del cierre.

Esta funda tiene unos colores que me recuerdan muchísimo a las flores del arbusto Fuchsia o "Pendientes de la reina". 

Y por hoy esto es todo, pero antes aquí te dejo esta foto tan bonita de unos "Pendientes de la reina" y su cuidado de Mundo Jardín , me encanta. 

*Besos de colores*

Hola queridas tejedoras! 

Cómo van esos proyectos tejeriles? En mi caso, tenía unos hilos de algodón preparados para empezar a tejer varias prendas durante esta temporada de primavera verano, pero por circunstancias de la vida esos hilos aún siguen esperando a ser transformados, pero bueno, aún tengo el verano por delante para meterles mano, ya sí. 

Si quieres saber un poquito más sobre mis momentos vividos en estos dos últimos meses pincha AQUÍ , te llevará a mi Instagram, donde una tarde me dio por desahogarme un poco. 

Y sin más, hoy venía a enseñaros unos monederos tejidos a crochet, los cuales me han tenido entretenida estos meses, no era mi idea tejer monederos, pero me ha venido bien tejerlos a ratitos. 

El primero que os quiero enseñar es el culpable también de que últimamente me haya dado por tejer más monederos, es un monedero negro tejido a crochet para una amiga de mi hermana a la que hace 12 años le hice uno casi igual.

Hola tejedoras y tejedores! ¿Cómo lleváis estos calores por esta parte del mundo? Y, ¿cómo lleváis esos tejidos más calentitos l@s que me leéis desde el otro hemisferio? Por mi parte, a pesar del calor tan sofocante que estamos teniendo este verano, sigo tejiendo a ratitos, en este último mes he tejido varios tops que ya os enseñaré, pero hoy vengo a enseñaros este vestido playero que he hecho para mi.

Aunque no tengo un patrón exacto de este vestido, sí me fijé en el esquema de un patrón japonés, sobre todo para darle la forma a las sisas y al escote, y para el dibujo de la falda.

Al no tener un patrón he tenido que improvisar mucho, y también he tenido que tirar del hilo muchas veces, cuando llevaba casi 20 centímetros de la falda tuve que deshacer todo lo que había tejido porque me estaba muy ancha, y yo quería que me quedara más pegado a las caderas. 

Me quedé sin hilo justo al comenzar la falda, sabía que me pasaría eso, pero también sabía que tenía un estor a medias, que le había empezado a tejer a mi hermana hace años con este mismo hilo,  y como al final por una cosa u otra no lo iba a terminar, pues tiré del hilo y me puse a ovillar a mano, casi dos horas me tiré para hacer el ovillo que veis, pero mereció la pena, he tenido para hacerme un vestido y aún tengo hilo para hacerme una blusa, pero tendrá que esperar. 

Al hacer la falda con un hilo que llevaba tejido muchos años me encontré con la parte del cuerpo súper blanquita y con la falda un poco amarillenta, pero nada que no se pueda arreglar con un blanqueante de tejidos, de hecho lo blanqueé, lo lavé, lo sequé y aquí lo tenéis en la primera foto, y tal cual me está esperando para ser estrenado. 

Y esto es todo por hoy, en la próxima os enseñaré un crop top de crochet que le he hecho a mi ahijada María.

*Besos de Colores*

Hola tejedoras y tejedores del mundo! Cómo van esos proyectos tejeriles? Yo llevo unas semanas liada con un top muy veraniego, pero hoy no vengo a hablaros de él, aún tendrá que esperar un poquito para que esté listo y os lo pueda enseñar.

Hoy quiero enseñaros este estuche fusión de crochet y costura, que terminé hace ya unas semanas, pero que por unas cosas u otras no os lo había enseñado por aquí. Las que me seguís por Instagram ya lo habéis visto, pero siempre una puede explayarse más por aquí, Instagram es más limitado para las que nos gusta enrollarnos, ¿a que sí? 

Para hacer la parte de fuera he usado hilo de algodón Love you 9 de Drops, y lo he tejido en una sola pieza, el punto que he utilizado para la cara frontal del estuche es un punto en relieve, y para la parte posterior solo los puntos básicos, altos y bajos sin el relieve. 

Para hacer los bolsillos de crochet he usado también hilo blanco de algodón Love you 9 de Drops, fieltro, y tela de algodón, y para decorar los bolsillos he usado cinta al bies blanca y de flores,  esta  última la tuve que hacer yo, y ni tan mal para ser la primera vez que coso tanto  a máquina. Los bolsillos de fieltro los he cosido a mano a punto festón. 

Para guardar los topes de las agujas de tejer, el de las agujas circulares, y más cosillas pequeñas, se me ocurrió hacer un estuche pequeño de tela, el cual he unido, cosiéndolo a mano, a uno de los bolsillos de tela, y en los laterales le he puesto unos enganches de cinta para colgar imperdibles, son muy prácticos, podéis ver los colgantes en la segunda foto, en la que se ve el estuche por dentro. 

Lo que creía que me iba a dar más problemas, al final viendo tutoriales y recordando lo que mi madre me había enseñado hace años, resultó más fácil de lo que me imaginé en un principio, y fue poner la cremallera del estuche.

Como la cremallera era muy larga decidí cortarla y ponerle este adorno a juego con la tela de los bolsillos, ¿qué te parece? 

Y bueno, éste es mi nuevo estuche, del cual estoy muy orgullosa, han sido semanas de mucho entretenimiento, de crochetear, de ajustar la tela, porque la tenía muy justita, me la dio mi madre de la tela que compró para las dichosas mascarillas, cuando no encontrábamos ni una en las farmacias ni en ningún lado, de coser y llevarme mejor con mi máquina, y de diseñar y colocar cada bolsillo donde mejor encajaba, y creo que al final ha quedado tal cual me lo imaginé. 

Espero que os haya gustado la entrada de hoy, y que os sirva de inspiración por si queréis haceros un estuche igual o similar, todo está hecho a ojo, primero hice la parte de fuera, luego la forré con la guata y lo forré con el fieltro fucsia, y finalmente fui cortando y adaptando los bolsillos a la medida del estuche. 

*Besos de Colores*