| 'Dickens' Dream', cuadro inacabado del pintor Robert W. Buss (1804-1875). DICKENS MUSEUM |
150 años sin Dickens:
15 escritores opinan
sobre su legado
e influencia
Javier Marías, Jonathan Coe, Dave Eggers, Salman Rushdie, Margo Glantz, Junot Díaz y Colm Tóibín, entre otros, analizan el influjo del autor inglés, fallecido hace un siglo y medio, en su educación como lectores y su manera de escribir
Alex Vicente
9 de junio de 2020
Javier Marías
“Su realidad jamás es plana, porque no la ofrece en bruto, sino destilada”
Empecé a leer a Dickens en la infancia, tal vez me estrené con Historia de dos ciudades y seguí con Oliver Twist y David Copperfield (Cuento de Navidad siempre me aburrió). Nunca he dejado de frecuentarlo, y, ya adulto, conocí Casa desolada, acaso su mejor novela. Creo que si su obra pervive es por lo que perviven cuantas lo logran, desde Cervantes, Shakespeare y Sterne a Proust y Faulkner: era un extraordinario estilista, y sus textos, bajo su apariencia melodramática o humorística, contienen una profundidad que aún nos hace pensar y nos revela lo que ignorábamos que quizá intuíamos. Parecen entretenimiento y lo son; parecen historias adictivas mientras uno las lee, y lo son; parecen realistas y hasta costumbristas en ocasiones, y lo son, pero en escasa medida, porque la realidad que presentan es una realidad estilizada y rayana en lo inverosímil, como demuestran los propios nombres de sus personajes. Su realidad jamás es plana, porque no la ofrece en bruto, sino destilada.