Malole´s tiene por delante el diseño y la elaboración de 150 bolsitas, monísimas y diferentes todas, para la boda de Sonia, que se casa en julio. Mª Dolores, es una mujer especial, trabajadora y con un ánimo siempre positivo a pesar de sus dificultades.
Recuerdo a su abuela Marina, con su moño plateado todo bien recogido con su horquillas, en el patio de su casa rodeada de macetas, con una sonrisa siempre en los labios y una mirada serena y pícara a la vez... Cuando recibía correspondencia siempre entraba en casa, hasta el patio, diciendo en voz alta "Marina, carta de la Argentina". Y ya salía Marina, limpiándose las manos, de sus cuitas con las macetas, con su delantal...a recibir la carta.
Marina, cayó enferma, ahora se encuentra postrada en una cama, sin movilidad alguna, a sus 96 años sus ojos vivarachos siguen los movimientos de su nieta y cuidadora por el cuarto. Mª Dolores tiene un blog Las cosas de Malole´s con el subtitulo de "Mientras dormías", donde expone sus creaciones y trabajos en su pequeño taller de costura. Es una muy buena diseñadora, costurera y profesora. Y muy buena persona.
El otro día recibió una carta certificada del "Armario de Lulú", un sobre grande color paja, cuando entré a su taller a recoger la rúbrica, vi que tenia la mesa llena de cintas de colores, rasos, y no me pude resistir. Tomé la cámara y le tiré fotos, ella que estaba tan cómoda con su rebeca "vieja" de lana, quiso poner un poquito de orden sobre la mesa. Pero no la dejé. Me encanta el desorden bien entendido, rasos de colores, trocitos de tela, el metro de costurera, alfileres, tijeras, apuntes de colores afines... Aquella mesa camilla, tenía tantas cosas interesantes, que el resultado de este proyecto es realmente bonito: las primeras bolsitas ya estaban listas, con sus lazitos y etiquetas.
Cuando Marina recibía cartas, se las entraba hasta el patio, porque con el tiempo nos hicimos amigas... ya que me daba esa confianza, que hoy me da su nieta, y también amiga, Mª Dolores. Cuando recibe correspondencia se la entro hasta el corazón de su taller de costura...y a veces charlamos un ratito e incluso nos tomamos un café, antes de continuar nuestras tareas.