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sábado, 26 de octubre de 2024

Pat Martino - Baiyina (The Clear Evidence) (1968)

¿Jazz psicodélico? La psicodèlia en sus años mozos alcanzó ciertos coqueteos con muchos géneros, entre ellos la electrónica, las vanguardias o la música sinfónica, y también entre ellos el jazz. Aunque en realidad el jazz ya era algo que andaba dando vueltas por ahí en el caldo común de cultivo del hipismo: como música predilecta de la generación Beat, como un elemento no tan primordial como el rock para el movimiento pero si en ebullición en la época y por ende siendo parte de las miras de muchos jóvenes rockeros del momento, y como una de las tantas decantaciones hacia donde fluyeron los experimentos e influencias que propició la psicodelia. El término ‘’jazz psicodélico’’ puede ser un slogan más de los tantos existentes dentro de todo este caldo primordial de vanguardias rockeras y experimentos aledaños, pero de alguna manera funciona aceptablemente para poder ilustrar en palabras aquella cosa que fue resultado de músicos de jazz acercándose a la tendencia contracultural, o en todo caso resultado de músicos de rock hippie acercándose al jazz.

Es imposible abarcar en una sola concepción lo que podría entenderse como jazz psicodélico, puesto que muchísimos fueron los experimentos que ocurrieron en este fructífero terreno de amalgamas, fusiones e inventos del cual quedaron un sinfín de grabaciones. Como todo estilo psicodélico, el jazz psicodélico, si es que existió algo como tal, tuvo que beber de la cultura de la generación de la flor para poder entender de qué se trataba esa estirpe multicolor de viajes introspectivos, extensas improvisaciones y acercamiento a culturas milenarias. Muchas veces se dice que el jazz fusión se origina del jazz combinado con el rock, pero generalmente se pasa por alto que cuando comenzó a surgir este fenómeno del fusión, el rock se encontraba en su etapa psicodélica y que por ende la psicodelia jugó un rol importante en dicha evolución del jazz. Aunque este jazz también tenía sus miras, con evoluciones previas desde el free jazz, con el comienzo de jazz espiritual, con la llegada de Ravi Shankar y su influencia y acercamiento a músicos de jazz, etc.

El álbum ‘’Baiyina (The Clear Evidence)’’ publicado en 1968 por Pat Martino se encontró en su aparición discográfica entre medio de todos aquellos fenómenos, y sus sonidos no quedaron atrapados en ningún slogan, sino que en el mismo se experimentó mucho, resaltando especialmente que dos de los cuatro tracks del mismo disco son extensas sesiones de improvisación con secciones internas, sonidos de tanpura (instrumento hindú) de fondo en lo que se refleja la influencia de oriente, y el estirpe psicodélico al cual se intenta y seguramente se logra llegar, con ambientes más que de una instrumentación volátil, áurica, cargada de misterio, búsquedas, misticismo, etc.

Se podría tender un puente entre este disco y su relación con algunos estilos del jazz de vanguardia por venir para la época, tanto con el jazz espiritual y el jazz fusión. Es fácil acceder a la relación de este con sonidos espirituales en jazz posteriores logrados por Alice Coltrane, Phaoroah Sanders o Don Cherry. Por otro lado, las extensas sesiones plagadas de misticismo y experimentos dejan una sensación en el aire como de jazz fusión temprano, el jazz está, y la psicodelia también por lo tanto el rock o al menos la influencia de la cultura de la libre improvisación, el delirio y la búsqueda introspectiva.

El álbum es una suite dividida en cuatro pieza, dos tracks por lado del vinilo original de época de 1968, con Pat Martino en guitarra acompañado por Bobby Rose en la segunda guitarra, Gregory Herbert en alto y flauta, el bajista Richard Davis, el baterista Charlie Persip, Reggie Ferguson en tabla y Balakrishna en tampura. En la portada del disco aparece una inscripción que dice ‘’A psychedelic excursion through the magical mysteries of the Koran’’, con una clara referencia a su acercamiento al Corán, libro sagrado de los musulmanes. 

Las piezas del disco llevan nombres de elementos del Corán, incluyendo instrumentos hindúes que dan una sensación psicodélica muy alta en todo el disco, ya que el tanpura aparece de fondo y a lo largo de todo el sonido del disco, sin embargo esta inclusión del tanpura suena algo anticuada y muchas veces parece descompaginada de los demás instrumentos. Aquí hay drones, instrumentos hindúes, extensas improvisaciones en sesiones de extensión, declaraciones de intereses psicodélicos en un sonido proto fusión que aunque a veces anticuado también por momentos con sensaciones de que se está haciendo algo en buena forma para la época pre fusión y con un carácter bastante personal. Los resultados del disco no fueron abiertamente comerciales, es un trabajo con profundidad y un aparente interés y sentimiento por Martino en atreverse a incluir todos estos elementos en una misma cosa.

Al inicio de su carrera el guitarrista estadounidense Pat Martino trabajó para algunos músicos de jazz como Don Patterson, Jimmy Smith, Jack McDuff o Jimmy McGriff, pero hacia 1966 comenzaría a liderar sus propias sesiones y comenzaría a volcar sus propias visiones en sus lanzamientos solistas. Hacia 1968 aparece también otro disco de Martino de declarada influencia oriental, llamado simplemente ‘’East’’.

Cod: #1780

lunes, 30 de enero de 2023

Heikki Sarmanto - New Hope Jazz Mass (1978)

He aquí una alternativa interesante para lo que es la misa musical, en este caso una misa no católica pero misa al fin, con arreglos corales y banda de jazz en vivo que celebra una misa, una obra gigantesca, ambiciosa y muy bien lograda. Quinta entrega de la serie de discos conceptualizado en misa, en este caso aparece ‘’New Hope Jazz Mass’ compuesta por Heikki Sarmanto:

Esta es una misa jazz, creada en Finlandia, sugerida por un pastor, compuesta por el músico de jazz finlandés Heikki Sarmanto, estimulada por los ''conciertos sagrados'' de Duke Ellington, influenciada por el sentimiento religioso de ‘’A Love Supreme’’ de John Coltrane, e inspirada por una melodía popular finlandesa del siglo XVI, por lo que se tiene en una sola obra aspectos de catolicismo, sentimiento religioso, misa, arreglos corales, jazz espiritual, y melodías tradicionales finlandesas, elementos que aunados ayudan a configurar una de las misas jazz definitivas de todos los tiempos.

La obra está dedicada también a Duke Ellington y John Coltrane, especialmente reflejado este aspecto en la primerísima pista del disco, llamada ‘’Duke And Trane’’, una pieza que reúne arreglos corales con algunos atascos de improvisaciones de viento que amulan a los ejecutantes homenajeados.

Las música es ejecutada en vivo en una iglesia, con el coro Long Island Symphonic Choral Association traido de los Estados Unidos sumado al cuarteto vocal Gregg Smith Vocal Quartet, con la banda de jazz Heikki Sarmanto Ensemble, y otros participantes en coro y dirección, entre los que aparecian Maija Japuoja, una cantante finlandesa. La obra en general es muy compleja, funcionando entre composiciones progresivas jazzeras, con textos inspirados de textos sagrados religiosos, siendo toda la misa ejecutada desde lo musical y sin predicas habladas.

Un periódico de la época anunciaba lo siguiente sobre el estreno de la obra:  “El pastor Ralph Edward Peterson de St. Peter tuvo la idea de la misa hace varios años, cuando se estaban haciendo los planes para la nueva iglesia”, dijo Sarmanto, de 29 años, en Nueva York el otro día. “Acababa de enviar un arquitecto a Finlandia para ver iglesias modernas allí. Estaba aquí estudiando piano con Margareth Chaloff en Boston y tocando con Charlie Mariano, el saxofonista, con quien había tocado en Europa, y Eero Koivistoinen, un saxofonista finlandés que había venido conmigo. Uno de nuestros conciertos fue el jazz vespers en St. Peter's.

La semilla de la dedicación de la misa se plantó cuando hablé con Duke Ellington después de escuchar uno de sus 'conciertos sagrados' en Boston”, dijo el Sr. Sarmanto. “Más tarde, cuando el pastor Peterson sugirió una misa, se encendió una lámpara en mi cabeza. Por supuesto, sería para Duke, que era un hombre muy religioso. Luego, cuando comencé a escribir la misa, basé el tema de apertura en una melodía popular finlandesa del siglo XVI. Tocándolo, de repente escuché como un eco de 'A Love Supreme' de John Coltrane. Podía imaginarme a Coltrane tocándola con un saxofón soprano. Entonces, como 'A Love Supreme' era una expresión de los sentimientos religiosos de Coltrane, lo agregué a la dedicatoria. ’’

Se trata de jazz modal que con el acercamiento a lo religioso y la influencia de Coltrane se podría decir que se trata de jazz espiritual, aunque se diferencia en ese aspecto del jazz espiritual tradiciones que suele ser de vanguardia y estar influenciado por culturas y religiones milenarias entre otras fusiones particulares. En el caso de esta misa la concepción espiritual no viene de la meditación o la fusión con tramas exóticas sino del concepto del ritual de la misa celebrado en vivo, y que sí ciertamente cuenta con un sentir religioso y espiritual muy fuerte, por lo menos desde lo que la ejecución respecta, siendo la grabación en vivo muy intensa, sentida, especialmente por el coro que es el que le agrega ese sentir de góspel, de devoción mística, la banda de jazz le agrega su influencia espiritual también.

Más de los periódicos de la época con iformacion referida al estreno de la obra: ‘’La misa fue encargada para celebrar la inauguración del nuevo recinto de la Iglesia de San Pedro, que desde hace más de una década ha dado al jazz un lugar destacado en sus actividades. Las vísperas de jazz se tocan todos los domingos por la tarde en la iglesia, y el reverendo John Gensel, pastor asociado, tiene un compromiso de tiempo completo con la comunidad de jazz. La misa se realizó por primera vez anoche en la iglesia, y se volverá a ofrecer en septiembre en el Festival de Helsinki en la Iglesia en la Roca, una nueva iglesia que ha sido tallada en piedra. Fue el liderazgo innovador de Finlandia en la arquitectura de iglesias lo que proporcionó un enlace para encargar una misa para San Pedro por parte de un finlandés.’’

El evento fue grabado de un concierto en vivo en la iglesia de Temppeliaukio, Helsinki, el 7 de septiembre de 1978, y mezclado directamente de la cinta por el ingeniero de grabación profesional Juoko Ahera, fue grabada en una sola toma en la primera ejecución publica de la obra en la Finlandia natal. Esta primera grabación fue luego publicada e impresa en grandes cantidades por Finlandia Records en 1979 como un vinilo doble. Aunque recientemente Heikki Sarmanto encontró las cintas originales del segundo día de presentación dela obra en vivo, grabadas el 8 de septiembre de 1979. Las grabaciones del segundo día fueron publicadas por el sello noruego Jazzaggression Records.

Cod: #1716

martes, 13 de septiembre de 2022

Ara Tokatlian & Enrique Villegas (ft. Guillermo Bordarampe) - Inspiración (1975)

En 1975 se publicó este fantástico trabajo de jazz libre creado por un eventual y fugaz dúo integrado por dos emblemas de la música argentina de época, como lo eran Ara Tokatlián, integrante fundador de la banda Arco Iris, en saxo y flauta, y Enrique "Mono" Villegas, pianista icono del jazz argentino. Tokatlián recordaría con estas palabras la experiencia de trabajar con Villegas: ‘’Al Mono le gustaba nuestra música. Y nosotros moríamos por él. Por su lucidez, su locura creativa, su talento musical. Estábamos ligados por algo mágico". El grupo para la grabación se completa con aportaciones estelares, Guillermo Bordarampe en contrabajo y percusiones, y Dana en voz, estos últimos dos también fueron miembros de Arco Iris.

‘’Inspiración’’ resume las experiencias de Tokatlián y demás miembros de de Arco Iris a lo hora de aportar su misticismo y espiritualidad que tanto habían volcado juntos en las composiciones con la banda, en la que ejecutaban una música algo disimilar a lo hecho en ‘’Inspiración’’, Arco Iris era una banda de rock que fusionaban música folklórica y también jazz, por lo que este nuevo emprendimiento, solista de Tokatlián, era una propuesta diferente y un punto de quiebre en la experiencia del y los músicos.

Y por supuesto, no pueden dejar de aparecer los ambientes espirituales que embeben todo el sonido con momentos de música mística, tan típico de los compositores participantes, misticismo que al ser volcado en este jazz libre vuelve al trabajo en una propuesta única en su tipo, por lo menos en la argentina. Jazz libre, con ambientes cercano a la libre ejecución, con ambientes espirituales, solos libres, y vanguardias e invento dentro del jazz, pocos momentos dentro del jazz argentino de la época se acercan a lo logrado en este disco en cuanto a su estilo, estirpe, misticismo y espiritualidad volcada al jazz.

El rol de Villegas en piano es vital para el sonido del disco, con aportaciones libres entre armonías y acompañamientos de amplitud que se conjugan a la perfección con los solos y melodías de los vientos de Tokatlián y los demás aportaciones. Las armónicas afectan el desempeño del grupo y completan con sensibilidad y hasta dulzura muchos de los momentos del disco, aportando una base que ha captado muy bien el misticismo de la propuesta y la réplica con creces para que los solos de saxo tengan lugar en tiempo y forma y se expresen entre melodías y solos libres.

Aunque no en todas las pistas aparece el piano, algunos tracks consisten solo en un juego de vientos y creaciones afines, como en ‘’Sombra de los dorados budas’’, donde al comienzo de la pieza hay un juego con tres vientos sonando a la vez en un ambiente libre, y por supuesto profundamente empapados por el misticismo de la propuesta, algún agregado vocal e instrumental extra sutil se le suma al track, jazz espiritual. ‘’Logré mi ser’’ es otra pieza en la que solo se aprecian un juego de vientos como principal armonía, sin aparecer el piano y apareciendo otros agregados como percusiones.

Estas palabras provienen de la histórica Revista Pelo, revista argentina emblemática de rock y aledaños, en una tirada de 1975 aparecieron esta palabras reseñando el disco que había sido seleccionado como destacado del año por ellos: ‘’Este álbum se convierte en algo realmente atractivo en los pasajes en que Enrique Villegas, pianistas de sensibilidad poco común, sostiene las tendencias armónicas del integrante de Arco Iris Ara Tokatlian. Es curioso como dos típicos representantes de generaciones bien diferenciadas en el tiempo y preferencias puedan llegar a sentarse juntos en un estudio de grabación. Esa confluencia, y su formidable resultado, es lo destacable de este álbum, algo empeñado cuando Villegas no participa. Los vientos de Tokatlian consiguen una dimensión mucho más amplia de lo que hasta ahora habían dado, la inspiración también es Villegas para él, y probablemente el pianista se haya sentido también atraído por la experiencia.’’

Cod: #1687

viernes, 8 de octubre de 2021

Brother Ah - Sound Awareness (1972)

Robert Northern, conocido artísticamente como Brother Ahh, era compositor, flautista y trompetista e hizo su carrera en el mundo del jazz de vanguardia participando como músico de sesión para muchos iconos del jazz estadounidense, participando especialmente y más activamente de la Sun Ra Arkestra en algún momento entre 1964 y 1975, habiendo grabado extensamente con dicho grupo liderado por el mismo Sun Ra. 

Pero también, mientras tocaba en sus conciertos con Sun Ra, Brother Ah se estaba interesando cada vez más por los estilos culturales no occidentales y finalmente visitó y estudió en África durante los años 70. Además de contribuir a una gran cantidad de álbumes de otros artistas, incluido "Africa / Brass" de John Coltrane en 1961, "Tender Moments" de McCoy Tyner y "Orchestra In Town Hall" de Thelonious Monk.

En 1972 Norton comenzó a lanzar material bajo su propio seudónimo Brother Ah. Su primera grabación en solitario, ‘’Sound Awareness’’, fue lanzada en el sello ‘’Strata East’’ ese mismo año. De este lanzamiento participa tanto Brother Ah, como el percusionista Max Roach, además de la orquesta M'Boom, un ensamble creado por el mismo Max Roach y liderado, en esta ocasión, por Ahh, ensamble que estaba integrado por músicos de jazz y por un extenso coro de noventa miembros. 

M'Boom era un ensable creado por Roach, e integrado entre otros por nombres como Roy Brooks, Warren Smith, Joe Chambers, Omar Clay, Ray Mantilla y Freddie Waits, siendo un emprendimiento creado casi exclusivamente en base a instrumentos de percusión, era el apoyo perfecto para Brother Ah y sus sonidos experimentales.

El trabajo se divide en dos extensas piezas de alrededor de veinte minutos cada una, ocupando cada una de ellas un lado completo del vinilo original de época. La primera de ellas es ‘’Beyond Yourself (The Midnight Confession)’’, un track de música libre de jazz con aires espirituales y con un estirpe que lo aleja de las convenciones del jazz, siendo una pieza dividida en seis partes demarcadas por un silencio, siendo todo el sonido un viaje por los rincones de un vanguardismo con aires espaciales, y hasta psicodélicos debido a la aplicación de reverberaciones y efectos a los sonidos de los instrumentos, lo que le dota a la pieza de un aire místico, toda una experiencia por tierras de vanguardia.

La segunda pieza del disco, ‘’Love Piece’’, esta vez de dieciséis minutos de duración, ya salida del aire psicodélico y de los afectos agregados, pero permaneciendo de todas formas en la vanguardia, con instrumentaciones ya próximas a los vanguardismos de la Sun Ra Arkestra, en ambientes también libres donde todo el grupo se suelta en una ejecución sin ataduras ni preconceptos. Es una exploracion por terrenos de vanguardia, comenzando por momentos calmos que se suceden a un dialogo de Brother Ah recitando e interactuando con el coro del grupo.

El sonido de la segunda pieza es la que más emparentada está al sonido de la Sun Ra Arkestra, con ritmos afro y participaciones instrumentales y vocales del estilo, aunque, a pesar de las similitudes en el enfoque, la música no es una copía de la Sun Ra Arkestra, y en general no se parece a nada en su época, circulando siempre dentro del mundo de jazz afro, espiritual, ritual y vanguardista. También aparece el aire filosofico con Brother Ah recitando algunas palabras mientras le pide al coro que griten por ‘’love!’’.

En esta concepción del sonido prácticamente no hay armonías, o por lo menos no aparecen tal cual las conocemos del jazz más estándar. Surgiendo libres ejecuciones sobre terrenos de exploración sonora, donde cada participante toma un rol de significación para la construcción del sonido, aportando su improvisación en una construcción progresiva de este estilo de jazz libre espiritual. El mundo de lo ritual también está muy presente, surgido del misticismo afro, de las visiones filosóficas y culturales por acercamientos con culturas y religiones exóticas de raíces africanas. 

A Brother Ahh no le faltaba la influencia y la experiencia dentro de ese terreno y por supuesto en este primer disco no deja de manifestarlo a las claras con una música de jazz que es un experimento espiritual que trasciende mucho de lo conocido en su época y se ubica como un experimento de un estirpe artístico propio.

Quizás Robert Northern fue más conocido como músico de sesión, trabajando extensamente en las décadas de 1950 y 1960 con músicos como Donald Byrd, John Coltrane, Gil Evans, Sun Ra, McCoy Tyner, Roland Kirk, y la Jazz Composers Orchestra, también trabajó con Don Cherry, Thelonious Monk, Freddie Hubbard, Miles Davis, Dizzy Gillespie, Eric Dolphy, Charlie Haden y John Lewis, entre otros. Vivió en la ciudad de Nueva York de 1963 a 1971, y después de un período de creciente interés por la música no occidental, visitó y estudió en África (Ghana , Kenia y Tanzania ) durante siete veranos consecutivos entre 1972 y 1977.

Cod: #1609

domingo, 3 de octubre de 2021

Horacio ''Chivo'' Borraro - Blues Para Un Cosmonauta (1975)

Este emprendimiento presenta algunas facetas de innovación dentro de terrenos de un jazz con un carácter propio y que se parece a poco en su época, incluyendo instrumentaciones atípicas para el jazz de la época como aplicaciones acústicas del guitarrista brasileño Stenio Mendes, aplicaciones electrónicas de sintetizador Moog, y otros inventos atípicos y bastante experimentales; todos inventos que configuran un álbum único para la escena de jazz argentino de la época y lo ubican como un elemento muy interesante para tener presente dentro de la colección de jazz local.

Se trata de jazz, pero aparece la influencia de los vanguardismos tipo Pharoah Sanders o de estilos espirituales tipo John Coltrane, por lo que los desarrollos del jazz no se llevan a cabo en los típicos atascos instrumentales del género, y aunque sí estos se hacen presentes, también aparecen algunos aditivos entre introducciones, desarrollos progresivos de las composiciones, agregados y otros inventos que hace del sonido un cosa muy particular. En general es una experiencia muy disfrutable (para quien esté interesado en los inventos y las vanguardias), presentando una faceta de jazz muy fresca y llena de inventivas.

Hay varios inventos aquí, tal vez el que más se destaque sea ‘’La Invasión de los Monjes’’, siendo una pieza sin nombre especifico que comienza con algunas aplicaciones acústicas que se van diversificando a lo largo de una extensa introducción acústica a la que se le suman la batería y otras aplicaciones, a lo que le sigue una sesión de jazz modal, para terminar con algunos motivos finales también acústicos, como volviendo a las tramas del principio. El tema es original de Stenio Mendes y una version del mismo aparece en su disco solista ''Stenio Mendes'' de 1980.

En total son cinco las piezas que componen el trabajo, desde el spacy jazz de "Blues Para Un Cosmonauta" con sintetizadores psicodélicos de Moog, "Cancion De Cuna Para Un Bebe Del Año 2000" con humor suave y atractivo, "La Invasion De Los Monjes" combinando jazz modal con aplicaciones acústicas, "Mi Amigo Tarzán” que es un incursión con acercamiento al jazz rock más dinámico, y la pieza introductorio del disco ‘’Líneas torcidas’’ con más inventos entre jazz y aplicaciones acústicas. De la grabación del álbum participaron Horacio "Chivo" Borraro en saxo tenor, teclados, flauta y percusión, Fernando Gelbard en piano eléctrico y sintetizador Moog, Stenio Mendes en Craviola (instrumento acústico de cuerda), Jorge Gonzales en contrabajo, Nestor Astarita en percusion, y Miguel "Chino" Rossi en percusion y efectos especiales.


Las siguientes son unas palabras pronunciadas por el mismo Chivo Borraro y que se encuentran en la contraportada del vinilo original de época:

‘’Este disco es el producto de la colaboración, la capacidad y por sobre todo, el talento de todos lo que me ayudaron a realizaron. Creo que es la primera vez que en grabaciones de nuestro medio, especialmente de jazz, se utiliza una cinta multicanal para lograr varias sobreimpresiones de un mismo tema con el fin de mezclarlas luego en una sola pista.

Deseo agradecer especialmente a Stenio Mendes -excepcional ser humano y músico- su confianza en mí, al aceptar grabar conmigo dos de sus temas -de notable belleza- a pesar de no expresarse ni ellos ni él en el idioma del jazz. No fue tarea fácil amalgamarlos con el quinteto para darles un clima jazzístico sin alterar su esencia. Creo no haberlo defraudado. Los dos temas de Stenio, ‘’Lineas Torcidas’’ y ‘’La invasión de los monjes’’, son los únicos que no llevan sobreimpresiones. 

En ‘’Mi amigo tarzan’’, la música africana que se escucha al principio y al final (que me perdonen las tribus de Kenya y Tanzania) fue hecha por mí con sobreimpresiones repetidas de xilofón, percusión y flauta dulce. El solo de piano acústico de Fernando también está sobreimpreso sobre el resto de la sección rítmica. 

En ‘’Canción de cuna’’, Fernando y Miguel grabaron la base de piano eléctrico y percusión. Sobre eso, Miguel agrego otra línea rítmica y Fernando un solo con sintetizador. Yo agregué luego el solo de tenor y unos compases de órgano en la introducción y el final. Los efectos de guerra del principio fueron hechos pro Miguel y yo con un bombo, artefactos metálicos pasados sobre las cuerdas del piano y sonidos de ametralladora. 

En ‘’Blues para un cosmonauta’’ se grabaron primero la base rítmica y armónica. Luego se agregó otra línea percusiva y Fernando un solo de piano eléctrico. A todo esto se superpuso otro solo de Fernando en sintetizador y finalmente yo agregué más voces al tema del principio y del final con el sintetizador, el piano eléctrico y el órgano.

Sin duda alguna, el avance de la técnica en todos los campos, nos permite expresar y realizar cosas, aun dentro del campo del arte, que resultarían imposibles de hacer de no contar con su concurso. ¿Por qué no aprovecharlas? Y a propósito de esto, quiero hacer aquí una mención especial de Hugo Manzini, que desde la consola resolvió con infinita paciencia y sapiencia todos los problemas técnicos que le planteé. Asimismo vaya aquí mi reconocimiento a mi amigo Polo Sagasti, cuya inapreciable colaboración facilitó la grabación de los temas de Stenio.’’

Cod: #1608

miércoles, 29 de septiembre de 2021

Turiya Alice Coltrane & Devadip Carlos Santana - Illuminations (1974)

Este es un encuentro estelar que a menudo no es tan recordado y no cuenta con el favor de sus seguidores, tanto como a Alice como a Santana se los recuerda por otros de sus trabajos y no tanto por esta colaboración en particular. Este es el encuentro de dos grandes de la música fusión que hicieron sus migas y congeniaron aparentemente por sus confesos gustos por el mundo de la música espiritual y por la espiritualidad en general: Alice siendo una artillera principal del genero de jazz espiritual y Santana que también había evidenciado su gusto por el misticismo y la espiritualidad en muchos de sus discos publicado con su banda Santana; era una formula conocida para los dos y en este encuentro no hacen más que acrecentarse mutuamente.

Santana siempre a lo largo de su carrera ha manifestado ser un músico de acercamiento al mundo espiritual, desde sus orígenes solistas en Santana, con todo el sabor ‘’latino’’ y todo el misticismo afro que cargaba desde sus orígenes en México y sumado su encuentro con la cultura hippie norteamericana, pasando por toda su carrera en la que también manifestó su confeso gusto por lo espiritual. Mientras que Alice Coltrane fue una devota del mundo de la espiritualidad y meditación, desde sus orígenes junto a John, sus primeros trabajos solistas, su transformación hacia los trabajos espirituales vanguardista más espirituales aun suscitados seguramente por la muerte de su marido, y estando en contacto directo con la cultura milenaria de la India y con gurúes provenidos de ese ambiente. Por lo que el encuentro de ambos en ‘’Illumination’’ no podía ser menos que un trabajo de profundas implicaciones espirituales manifestadas tanto desde lo musical como desde sus quehaceres personales.

En este encuentro se aúnan los esfuerzos de ambos en una música común, encontrándose todo el mundo imaginario espiritual de Alice en lo que es un despliegue sinfónico con arreglos de cuerdas y pasajes de ensueño orquestales (a los cuales ya había manifestado por ejemplo en su álbum solista ‘’World Galaxy’’ de 1972), desplegando mundos oníricos donde se desenvuelve el trabajo, y donde aparece más de sus aplicaciones, ya ejecutando el harpa como acompañante o el órgano como improvisadora solista. 

Y, por su parte, el rol de Santana es el de guitarrista solista, por lo que se ciñe a eso mismo, las aplicaciones, entre solos, arreglos y melodías, que pueda ir dejando sobre todo este mundo imaginario tendido desde los cimientos, aplicando esa cuota de ‘’rock’’ al sonido, con su guitarra eléctrica distorsionada, dándole un sabor muy particular a la música de Alice que en general no se había encontrado con el rock o por lo menos las guitarras eléctricas desde ese lado.

La participación de Santana le ofrece a Alice esa cuota de jazz-rock, dándole a su música un aire que hasta entonces no había conocido en su discografía y que seguramente no haya vuelto a conocer; y por otro lado el mundo artístico y espiritual de Alice Coltrane le ofreció a Santana la oportunidad de acrecentarse en el mundo de la espiritualidad y de seguir sumergido en el mundo de la fusión con jazz de vanguardia, tendencia espiritual que marcó al Santana de la época. Por aquel entonces, Santana se dejaba conocer como ‘’Devadip Carlos Santana’’. "Devadip" era un nombre espiritual que le había dado el gurú Sri Chinmoy, quien juntamente quien abre el disco con un recitado y al que dedican la obra; "Devadip" singnifica "ojo, lámpara o luz de Dios".

Estas son incursiones por mundos etéreos donde la música transita por lugares poco esperados de antemano y que solo puede ser algo conocida por los seguidores de la música y el estilo de la Alice Coltrane de aquellos años. Un mundo de orquestación se funden entre las colinas del eterno presente, a donde llegan sabores de la India, entre especias e instrumentaciones exóticas, tomando de ese mundo todo el misticismo para elevarse a una conjunción que ofrece las más emotivas y oníricas sensaciones, con instrumentaciones típicas, visiones del vanguardismo espiritual y por supuesto improvisaciones en extensas sesiones que, además, transitan por distintos estados internos en un desenvolvimiento progresivo de la composición, con una sofisticación acrecentada por la aparición de la orquestación sinfónica.

"Iluminations" se mantiene dentro de un espectro donde se encuentran el vanguardismo, el jazz espiritual con sus típicas incursiones de instrumentos provenidos de la cultura hindú, apareciendo el jazz rock con la participación de la guitarra de Santana y las bases percusivas que también mantienen muchos pasajes de las sesiones en ritmos de rock, fusionándose todo con el mundo de ensueño de Alice, con sus visiones originadas en el free jazz, por lo que sus aplicaciones y solo ronda en esa aura de libertad, siendo además una compositoras y arreglista que contribuyó también su capacidad en la aparición de arreglos de orquesta, todo un combo de elemento que se unen en una música espiritual fusión.

Santana ya había incursionado en mundos del fusión con aires espirituales, anteriormente habiendo publicado "Love. Devotion. Surrender" en 1973 junto a otro gran guitarrista como lo es John McLaughlin. Mientras que Alice era una devota del género, siendo una artillera esencial del mundo de los vanguardismos espirituales desde el origen de su carrera, aunque de alguna manera "Iluminations" marca el fin discográfico de su encuentro con el jazz espiritual más radical, abandonando el estilo para abocarse a su vida personal y espiritual, continuando con más lanzamientos discográficos pero ya dentro de fusiones mucho más espirituales que se alejaban del jazz.

Cod: #1606

miércoles, 15 de septiembre de 2021

Alice Coltrane Sextet - Live At The Berkeley Community Theater (1972)

Especias de todo el mundo se encuentran en esta celebración musical que es toda una declaración de intereses donde convergen elementos de música hindú, vanguardismo y libre improvisación estilo free jazz, retorciendo el propio jazz hasta llegar a niveles pocas veces visto y de un carácter distintivo de la autora y creadora del mismo, Alice Coltrane, la representante de un legado al que supo honrar pero de manera creativa, continuando por una senda de desarrollo que la encontró plasmando en música sus propias visiones espirituales del jazz, extrayendo de la música del mundo sus más exóticos sabores y creando con esto una música de jazz espiritual única.

Este sonido pertenece al periodo más cósmico de Alice, por lo menos en lo que a su arte respecta, ya habiendo dejado atrás sus primeras publicaciones de vanguardia y permaneciendo en medio de una mutación de su estilo que la ubicaba no solo experimentado e improvisando a la vanguardista sino además sumando a su repertorio la música tradicional hindú, sin dejar de lado por supuesto toda la espiritualidad que esta conlleva, con los trances, lo ritual, lo místico, los viajes por el cosmos y los encuentros con otras realidades etéricas, y se puede apreciar como la misma Alice se encuentra en un estado alterado, su suave voz al presentar el concierto lo refleja, como poseída por un aura proveniente de otra esfera, siendo esta música un reflejo de su estado y otro trance que intensifica su ya transe interno, viajando por el cosmos montada en su aura de vanguardia del mundo, rumbo a lo desconocido e infinito.

Este disco está compuesto por cuatro extensas piezas de un jazz ultra vanguardista desplegado en lo extenso del tiempo y el espacio. Las cuatro pistas presentadas rondan entre los quince y veinte minutos cada una, siendo exploraciones en las que cada piezas es única e irrepetible, transitando por diversas partes, sub partes y motivos internos, alternando entre momento de estilo hindú con sarod, momentos de contrabajo, momentos de vanguardismo con órgano y hasta aparece un arpa, Alice era tan buena con la teclas del órgano que como con las cuerdas de su arpa.

Esto es más que una fusión, es un encuentro por aproximación, es una búsqueda que trasciende lo musical aprovechándose del mismo sonido como forma de transporte y veneración de lo sagrado, de la conciencia universal, de aquello que es innombrable pero que cuando surge es capaz de destruir el campo de lo conocido hasta vaciar a la mente de sus vicio más pestilentes, siendo la muerte la esencia de la vida y la nada la esencia del todo.

La percusión de la batería y los ritmos que alcanza se vuelven interesantes, no es una libre ejecución al azar como en el free jazz más clásico, en esta oportunidad la batería, además de sumarse al dinamismo de la música aportando un percusión libre y exacta que encaja a la medida de los demás instrumentos, también ofrece ritmos en general movidos y dinámicos, aunque libres pero permanentes, por lo que las sesiones improvisadas aunque libres adquieren un ritmo dinámico que funciona con cierto parentesco de estilos más convencionales, es una buena combinación y un buen detalle el de la batería en ese rol tan particular.

La calidad del sonido no es excelente pero es lo suficientemente buena para poder aprovechar la música con fines recreativos y creativos. La calidad relativa de la grabación contribuye al misticismo sonoro, dotándole a la cualidad de la música de un término de mayor rusticidad, intensificando el caldo de cultivo donde todo ocurre. Este es en realidad un disco  pirata no autorizado, consiste en una grabación en vivo, se trata en realidad de una grabación de un concierto dado por Alice en el Berkeley Community Theatre, en Berkeley, California, en 1972, y que fue rescatado y publicado recien en 2019, en una tirada en vinilo doble.

Quienes la vieron tocar en vivo recuerdan que ella, en los conciertos, parecía estar como en un especie de transe místico, como ubicándose en un limbo de donde obtenía la fuerza vital, la fuerza creativa, el empuje necesario, la energía que la poseía a ella y a la que transmitía con su música, que era un medio por el que comunicaba y por el que transitaba esa energía, enviándola hacia los oyentes. Es sabido que ella había emprendido un camino de vida de introspección, estudio espiritual, encuentro con maestros, meditación y ascetismo general, y su música no dejó de ser un reflejo de esto.

Alice conoce a John Coltrane en 1963, año en que se enamoran y comienzan una relación que terminaría en un matrimonio. Tuvieron tres hijos entre 1964 y 1967. Al principio, la maternidad interrumpió la carrera musical de Alice. Mientras John estaba arriba, en su casa en Fort Dix, Nueva Jersey, meditando y rezando cinco días seguidos mientras componía ‘’A Love Supreme’’, ella cuidaba a los niños y lo apoyaba. En julio de 1967, solo cuatro años después de conocer a Alice en Birdland, John Coltrane murió de cáncer de hígado. Cuando su esposo murió Alice continuó trabajando con miembros de su último grupo, incluido el saxofonista Pharoah Sanders y el baterista Rashied Ali. Ella comenzó a tocar el arpa, utilizando sitar y tablas en el conjunto, y recurriendo completamente a las culturas orientales en busca de inspiración.

Cod: #1594

jueves, 9 de septiembre de 2021

Don Cherry - Organic Music Society (1973)

Convertido en uno de los principales representante de la vanguardia jazzística, el trompetista Don Cherry se encuentra entre la elite de músicos más destacados del mundo del jazz del siglo XX. Con su estilo algo excéntrico y místico ha creado trabajos emblemáticos dentro del jazz de vanguardia. Miembro fundador del innovador cuarteto de Ornette Coleman de finales de los años 50, Cherry continuó ampliando su vocabulario musical hasta su muerte en 1995. Siempre con un espíritu inquieto, Cherry aportó su creciente conocimiento de las músicas tradicionales de todo el mundo para influir en el proyecto de Coleman, dotándole de un aire absolutamente original a la audaz nueva música que estaban proponiendo. 

En 1960, grabó ‘’The Avant-Garde’’ con John Coltrane. Después de dejar la banda de Coleman, Cherry tocó con Steve Lacy, Sonny Rollins, Archie Shepp y Albert Ayler. En 1963-1964, Cherry co-dirigió los New York Contemporary Five con Shepp y John Tchicai. Con Gato Barbieri, Cherry dirigió una banda en Europa desde 1964 hasta 1966, grabando dos de sus álbumes más respetados, ‘’Complete Communion’’ y ‘’Symphony for Improvisers’’. Además de actuar y grabar con sus propias bandas, Cherry trabajó con músicos de jazz de primer nivel como Steve Lacy, Sonny Rollins, Archie Shepp, Albert Ayler, John Coltrane y Gato Barbieri. 

Hacia principio de los 70s Don Cherry había experimentado y fusionado tanto su música de jazz que esta había quedado casi irreconocible como jazz en sí mismo, presentando un sonido tan experimental que prácticamente su estilo se volvió irreconocible bajo parámetros preestablecidos o conocidos, un estilo inclasificable en el que el autor viajó y se dejó deslizar por sus llamados internos a tal punto que su producción sonora de esa época se volvió un trance por tierras místicas propiamente dichas, transes rituales, ceremonias, misterios sin nombre y sonidos que, creados a partir de fusiones con sabores de todo el mundo, representaban un quehacer exótico y mostraban que el autor estaba manifestando una cosmovisión también muy particular.

‘’Organic Music Society’’ es otro de sus tantos experimentos étnicos y uno de sus más destacados trabajos dentro de un estilo creado por él mismo, ya con la presencia del brasilero Nana Vasconcelos que es un artista de fusión perfecta para esta etapa de Cherry, siendo un músico de auras místicas por excelencia que encaja perfectamente en este estilo tan espiritual, aplicando el sonido libre ritual de su Berimbau y aportando esa cuota étnica y afro proveniente de sus orígenes en la música originaria brasilera. Este encuentro acrecienta aún más el aura mística y el caldo de cultivo étnico que caracteriza al estilo de Cherry de por aquel entonces, cuando su música era un vergel donde convergían tanto sonidos de la India, como de Latinoamérica, África, y demás.

Las sesiones de grabación del disco son de muy variada índole y reflejan el quehacer del artista a lo largo y ancho de muchos escenarios, ya que sólo dos pistas del disco se grabaron en un estudio, el resto se grabó de distintos conciertos en vivo, en circunstancias tremendamente divergentes. Algunas pistas son largas y conducen al oyente a un viaje ritual por las profundidades de las culturas ritualistas del mundo, como la pieza que abre el disco ‘’North Brazilian Ceremonial Hymn’’, mientras que otras piezas son cortas, apareciendo un sinfín de tramas y trazas y diversos instrumentos y ejecutantes, aunque lo que une a todo el sonido en una misma cosa es que todo parece haber salido de un ritual místico realizado en las profundidades de algún templo tibetano, en las entrañas de alguna selva o en lo más íntimo de alguna milenaria cultura aborigen, todos esos elementos están allí en el disco, sonando muchas veces en una misma cosa en la que convergen sabores muy diversos pero siempre exóticos.

Este sonido nace en las intersecciones de la improvisación libre, el ritualismo y la música folclórica del mundo, estilo en el que el jazz por supuesto no se encuentra en su estilo más clásico sino que se halla expandido y ramificado en un crisol de experiencias sonoras que contienen las fibras de culturas de muchas partes del mundo. Acompañan a Cherry en esta aventura algunos músicos suecos de primer nivel, Bengt Berger, Christer Bothén, Tommy Koverhult, además del percusionista turco Okay Temiz, y el ya nombrado Naná Vasconcelo, el brasilero especialista por excelencia del berimbau. El propio Cherry toca en corneta de bolsillo, pero también en voz, armonio, flauta, caracola y piano. 

Este sonido está lejos de ‘’Complete Communion’’ o ‘’Symphony for Improvisers’’, está lejos del jazz propiamente dicho, este sonido es el reflejo de un explorador por excelencia de las culturas del mundo, de lo que parecía más preocupado que del mismo jazz, reflejando un espíritu de hermandad hacia y entre los diversos músicos que lo acompañan en esta travesía musical. Es un estilo libre, sumergido en las culturas exóticas del mundo, ejecutado sin ningún parámetro limitador más que el de realizar música por la música misma, por la experiencia misma, siendo un disco doble con un sinfín de muchos sonidos por experimentar.

A finales de la década de los 60s Cherry se encontraba viviendo en Suecia, con su esposa Moki Karlsson, tocando con musicos suecos, adquiriendo experiencias, enriqueciéndose de diferentes miradas, y viviendo en comunas en un estilo muy hippie. Fue en este entorno, en los veranos de 1971 y 1972, donde Cherry grabó las pistas de su legendario disco doble ‘’Organic Music Society’’, publicado finalmente en 1973. ‘’Organic Music Society’’ se encuentra entre una colección de trabajos de similar calibre en la que el autor experimenta hasta el extremo con la fusión con sonidos del mundo, de similar calibre a otros de sus trabajos como ‘’Actions ‘’ de 1971, ‘’ Orient ‘’ de 1973, ‘’Relativity Suite’’ de 1973, ‘’Eternal Now’’ también de 1973, ‘’Brown Rice’’ de 1975, entre otros.

Cod: #1591

viernes, 26 de junio de 2020

Alice Coltrane With Strings - World Galaxy (1972)

Alice Coltrane supo ubicarse en su época como una de las mayores personalidades de la música jazz espiritual de vanguardia, y aunque fue decisiva la influencia sobre ella de su difunto esposo John, al cual continuó honrando fuertemente en vida con su música, aun así ella supo despegarse de los viejos mitos y evolucionó su propio estilo hasta niveles insospechados, llegando a incluir en su música todo un repertorio de elementos variados, influencias y etnias, convirtiendo a su música en un rico vergel de arte espiritual. 

Quienes la vieron tocar en vivo recuerdan que ella, en los conciertos, parecía estar como en un especie de transe místico, como ubicándose en un limbo de donde obtenía la fuerza vital, la fuerza creativa, el empuje necesario, la energía que la poseía a ella y a la que transmitía con su música, que era un medio por el que comunicaba y por el que transitaba esa energía, enviándola hacia los oyentes. Es sabido que ella había emprendido un camino de vida de introspección, estudio espiritual, meditación y ascetismo general, y su música no dejó de ser un reflejo de esto.

Alice conoce a John Coltrane en 1963, año en que se enamoran y comienzan una relación que terminaría en un matrimonio. Tuvieron tres hijos entre 1964 y 1967. Al principio, la maternidad interrumpió la carrera musical de Alice. Mientras John estaba arriba, en su casa en Fort Dix, Nueva Jersey, meditando y rezando cinco días seguidos mientras componía ‘’A Love Supreme’’, ella cuidaba a los niños y lo apoyaba. En julio de 1967, solo cuatro años después de conocer a Alice en Birdland, John Coltrane murió de cáncer de hígado. Cuando su esposo murió Alice continuó trabajando con miembros de su último grupo, incluido el saxofonista Pharoah Sanders y el baterista Rashied Ali. Ella comenzó a tocar el arpa , utilizando sitar y tablas en el conjunto, y recurriendo completamente a las culturas orientales en busca de inspiración.

Alice supo salirse de la musica rasa de jazz libre para encaminarse en un emprendimiento creativo que la llevó a crear todo un estilo propio, ramificado en una serie de discos fundamentales para el género espiritual. Tras la muerte de John, Alice publicaría sus primeros tres discos como solista. En 1971 aparecería ‘’Universal Consciousness’’ que representaría un punto de transición en su vida y en su carrera, simbolizando el ‘’despertar’’ espiritual de Alice tras su periodo de oscuridad. Y continuando esta línea tan particular en su búsqueda espiritual y musical, ese mismo año grabaría ‘’World Galaxy’’, disco que publicaría al año siguiente, en 1972.


En la portada del álbum figura la inscripción ‘’Alice Coltrane With Strings’’, porque el sonido se fundamenta exactamente en ese encuentro, entre la música vanguardista espiritual de Alice y una serie de arreglos orquestales de cuerda que se desparraman durante todo el disco, arreglos que también fueron compuesto por la mismísima Alice, que era compositora y arreglista. ‘’World Galaxy’’ es una obra maestra que se afirma como uno de los trabajos más destacados de Alice, alcanzando un punto culmine en la relación con los sonidos orquestales, que ya habían tenido lugar en algún momento en sus discos de hasta entonces pero que no habían alcanzado un lugar tan preponderante como en esta ocasión.


Este experimento vanguardista se realza desde la espiritualidad de Alice, estilo que caracteriza prácticamente a toda la música publicada por ella. Un sonido impregnado por un aura mística que se presenta en una serie de piezas que evocan epopeyas celestiales, alimentadas por una serie de arreglos de cuerda de carácter celestial y épico. La combinación de esta exuberante belleza sinfónica, con la experimentación instrumental expresada en improvisaciones libres, y a esto sumándole a algunos efectos de sonidos agregados a la mezcla, entonces como resultado tenemos un sonido poderoso, una epopeya vanguardista orquestal.

Desde el comienzo el disco despega con una considerable intensidad y se posa sobre un lugar que funciona cual limbo musical, es desde ahí donde provienen todas las ocurrencias orquestales que podemos escuchar, el sutil sonido del arpa brotando tímidamente desde las armonías de las cuerdas, las improvisaciones en órgano o saxo, y algunos estados intermedios que alcanza el sonido cuando se sale eventualmente de la orquestación y se vuelca hacia algún estado vanguardista, siempre espiritual, pero que funciona momentáneamente sin ese coro de cuerdas tan potente que se presenta casi en toda la obra.

Este LP fue grabado a fines de 1971 y es el sexto álbum en solitario de Alice Coltrane. También es considerado como uno de los discos más importantes y fuertes de toda su carrera musical y citado con justicia como "uno de los mejores momentos en el jazz de principios de los 70". Las composiciones son originales de Alice, salvo "My Favourite Things" y "A Love Supreme" que son piezas de John Coltrane. Otro detalle es que participa en el álbum el maestro religioso hindú Sri Swami Satchidananda Saraswati, quien aporta una hipnótica y celestial recitación al comienzo de "A Love Supreme", la última pieza del disco.

Cod: #1463

jueves, 25 de junio de 2020

Don Cherry & The Jazz Composer's Orchestra ‎- Relativity Suite (1973)

Don Cherry estaba experimentado, por esos años, por un tránsito total desde el vanguardismo hacia la experimentación más orgánica, lo que lo llevó a convertirse prácticamente en uno de los mayores exponentes del jazz espiritual. Sus fusiones se acentuaban, se profundizaban, los diversos elementos étnicos, rituales y religiosos comenzaban a aparecer cada vez más en su música, la cual se había convertido en un crisol de condimentos exóticos y místicos.

Entre 1973 y 1974 publicaría varios discos, todos ellos fundamentales en su discografía, o por lo menos fundamentales para comprender la mutación que su música estaba sufriendo. Uno de esos trabajo es ‘’Relativity Suite’’, publicado en 1973, un trabajo que publica en conjunto con la emblemática The Jazz Composer's Orchestra, lo que le asegura la presencia en su sonido de orquestación de big band especializada en jazz libre y experimental.

Después de haber participado de los dos primeros discos de la Jazz Composer's Orchestra por Michael Mantler y Carla Bley, Cherry recibió el encargo de escribir el tercero en 1970. Utilizó a muchos de los mismos músicos que contribuyeron a los dos primeros discos y moldearon en una suite una serie de piezas. Cherry había estado componiendo y actuando en los años anteriores. Al estudiar con Pandit Pran Nath , Cherry usaba cada vez más el canto karnático hindú en sus grabaciones y conciertos.

La presencia orquestal de The Jazz Composer's Orchestra sumada a su estilo espiritual crean un sonido que se asemeja considerablemente a los experimentos vanguardistas de otro de los grandes representantes de la música jazz espiritual, Alice Coltrane, quien por ese entonces experimentaba también con fusiones entre free jazz, libre improvisaciones, música étnica, espiritual, elementos hindúes y arreglos orquestales.


Tal es el estilo espiritual de Cherry que este disco, ‘’Relativity Suite’’, comienza prácticamente como si estuviera en medio de un templo budista, con cantos típicos rituales en medio de una conmovedora calma ambiental y con algunos sonidos de percusiones también de instrumentos típicos de esas culturas, lo que termina derivándose en un atasco de piano y batería sobre el que la orquesta dibuja algunos bellos motivos en cuerdas.

En la bella pieza ‘’The Queen Of Tung-Ting Lake’’ se incursiona en la música típica japonesa, con una sutil fusión con el jazz. Algo similar ocurre en la pieza ‘’Trans-Love Airways’’, que comienza con instrumentación típica de raga, de música hindú, para fusionarse también con el jazz. O en la pieza llamada ‘’Mali Doussn'gouni’’ nos podemos encontrar algunos cantos tipo africanos fusionados en medio de ritmos repetitivos en batería, junto a la improvisación de Cherry en saxo. 

Para finalizar tenemos dos piezas en las que también se continua con el desfile de diversos estirpes: ‘’Infinite Gentleness’’ que comienza con un piano que pareciera provenir del jazz vanguardista más clásico y estricto, sobre el que desfila florituras en cuerda de la orquesta. Y para la última pieza del disco aparecen insólitamente patrones de música de marcha con ritmos en batería de Ed Blackwell. 

Vanguardismo, elementos rituales budistas, música hindú, cantos tipo africanos, música típica japonesa, sin duda en este disco hay todo un encuentro de etnias y culturas de todo el mundo. Si bien este disco no es tan impresionante o cohesivo como alguno de sus otros trabajos, aún sigue siendo sorprendente la cantidad de estilos presentes.

Cod: #1462

viernes, 8 de mayo de 2020

Gonda Sextet - Sámánének (1976)

János Gonda es un pianista de jazz húngaro. Nacido en Budapest , estudió en la Academia de Música Franz Liszt y obtuvo su diploma primero en el departamento de musicología y luego en el departamento de piano. Sus actividades incluyen composición, presentaciones de conciertos, enseñanza e investigación musicológica.

Formó su primera banda en 1962, y con ellos realizó el primer LP de la serie húngara "Modern Jazz". Desde entonces, ha dirigido varias bandas que se pueden escuchar en los registros en forma de antología en esa misma serie. A finales de la década de 1960 co-dirigió el Cuarteto Gonda-Krusa con el musico polaco Richard Kruza.

También grabó con su Gonda Sextet, un sexteto que formó en 1972 y con el que alcanzó a lanzar un solo disco, ‘’Sámánének’’, considerado a menudo como uno de los mejores lanzamientos de jazz espiritual de Europa del este. Grabado por el sexteto (piano, bajo, voz / guitarra, congas, saxofón y batería) y dirigido por János Gonda, con tres artistas adicionales, en congas, trombón y trompeta.

El sonido de este disco está embebido en el misticismo y la espiritualidad que brotan de los aires folklóricos típicos húngaros, además de esas mismas reminiscencias a esa cultura natal, estas características de espiritualidad y etnicidad funcionan juntas y se revitalizan entre sí mientras el sonido transita por ambientes de vanguardia ritualistica.

‘’Sámánének‘’ en húngaro significa ‘’chamán que canta’’, esto se refleja en el disco en el canto llevado a cabo que evoca el canto típico de la región. El chamanismo era una característica de los antiguos pueblos húngaros, como una forma de concepción religiosa. 


La base de esta creencia es que ciertas personas elegidas (chamanes, curanderos), en un estado de éxtasis provocado por el efecto de varios estimulantes y tambores mágicos, pueden contactar con fuerzas sobrenaturales y, a través de ellas, con los espíritus de los muertos y aquellos que nacerán en el futuro.

El estilo es plenamente vanguardista y como todo buen disco del género propone formas y mixturas nuevas y variadas, entre sus propuestas aparecen piezas de distintas manufactura que desparraman con una buena dosis de versatilidad un espectáculo sonoro vanguardista, una travesía por tierras jazzeras étnicas.

‘’Afro-Cuban’’ es una de las grandes piezas del trabajo, se trata de exactamente eso, jazz de estilo afrocubano, enriquecido por instrumentación típica y con un condimento muy particular, se puede escuchar a una voz cantando pero en húngaro, se trata de un entrecruce de distintas culturas y etnias que se aúnan en una misma música, un encuentro único. 

El álbum está inspirado en el estilo de canto de la música folclórica húngara, la atonalidad del jazz europeo de vanguardia y, a veces, el radiante estilo bebop. En sus venas corren las frases características del jazz tradicional, la música moderna compuesta, el blues, el swing y la música libre, como parte de la profundidad de la interpretación.

Es un disco de jazz espiritual que intenta expandir un poco la paleta y lo hace con una puesta en escena amplia, los resultados son moderados pero enriquecidos y místicos hasta más no poder, bebiendo de varias fuentes y explayándose como un sonido que brota desde la base misma del chamanismo húngaro.

Cod: #1440

martes, 28 de enero de 2020

Alice Coltrane - Universal Consciousness (1971)

Alice McLeod, mejor conocida como Alice Coltrane, fue una música de jazz y compositora estadounidense, una de las pocas arpistas en la historia del jazz. Creció en un hogar musical, su madre, Anna McLeod, era miembro del coro de su iglesia, y su medio hermano, Ernest Farrow, se convirtió en bajista de jazz. Con el aliento de su padre, Alice comenzó a actuar en varios clubes de Detroit, hasta que se mudó a París a fines de la década de 1950. Estudió música clásica y también jazz con Bud Powell en París, donde trabajó como pianista intermedio en el Blue Note Jazz Club en 1960. 

En 1960 se casó con Kenny "Pancho" Hagood, un famoso cantante de bebop once años mayor que ella, y tuvo una hija con él. El matrimonio terminó poco después, debido al desarrollo de la adicción a la heroína de Hagood, y Alice se vio obligada a regresar a Detroit con su hija. Ella continuó tocando jazz como profesional en Detroit, con su propio trío y como dúo con el vibrafonista Terry Pollard . 

Después de que Alice fue contratada para tocar en una banda dirigida por el vibrafonista Terry Gibbs, el grupo abrió para el cuarteto de John Coltrane durante un compromiso prolongado en Birdland, en Nueva York, en el verano de 1963. Allí es donde John Coltrane y Alice se conocieron y se enamoraron. Parte de la atracción entre ambos era sin duda que estaban predispuestos a estar en el mismo tipo de búsqueda musical y espiritual, y que podían compartir ese camino juntos. Pronto Alice dejaría la banda de Gibbs, por pedido de John, ambos viajarían a Suecia juntos, antes de casarse los Coltrane viajaron por el mundo absorbiendo culturas.

Tuvieron tres hijos entre 1964 y 1967. Al principio, la maternidad interrumpió la carrera musical de Alice. Mientras John estaba arriba, en su casa en Fort Dix, Nueva Jersey, meditando y rezando cinco días seguidos mientras componía ‘’A Love Supreme’’, ella cuidaba a los niños y lo apoyaba. En julio de 1967, solo cuatro años después de conocer a Alice en Birdland, John Coltrane murió de cáncer de hígado.

Seis semanas antes de cumplir 30 años, Alice era viuda y tenía cuatro hijos, despojada de su alma gemela, su familia y su principal fuente de su propia carrera musical. Alice Coltrane se estaba derrumbando. Entre 1968 y 1970 pasó por una etapa muy difícil en su vida, incapaz de dormir o comer adecuadamente, su peso cayó de 118 a 95 libras. Tenía alucinaciones. Su familia estaba preocupada por su salud, y más de una vez la enviaron al hospital debido a heridas autoinfligidas, incluida una quemadura de tercer grado. Esto represento un periodo vital de prueba, tribulación y transición en su vida. Ella explica esta etapa como una época de austeridad incansable, diseñada para limpiar y mejorar su espíritu.


Tras la muerte de John, Alice publicaría sus primeros tres discos como solista, hasta que en 1971 aparecería ‘’Universal Consciousness’’ que representaría un punto de transición en su vida y en su carrera, simbolizando el ‘’despertar’’ espiritual de Alice tras su periodo de oscuridad. Lanzado originalmente por el cello Impulse! en 1971, este disco significa un punto álgido en su carrera. Mientras que sus álbumes anteriores empujaron los límites del jazz libre espiritual, Universal Consciousnes expande la paleta compositiva de la arpista y pianista.

Este sonido presenta una fusión y una experimentación mucho más sofisticada y profunda de lo que se puede esperar del free jazz raso, en este caso Alice viajó mucho más adelante en su búsqueda y, siempre con tintes místicos y dentro del jazz espiritual, se adentró en una música vanguardista que guarda, en su sutil desenfreno y en sus finos arreglos, un misterio sonoro que se deja ver recelosamente y que representa el concepto espiritual que refleja el disco.

Ornamentado con finos arreglos de cuerda, escritos por la misma Alice, combinados con improvisaciones libres en órgano y con el fino sonido del harpa, ambos ejecutados por Alice; esta amalgama y fusión de elementos dota al sonido de un aura mística y purificadora, una experiencia musical que yace sobre un peldaño donde pareciera que los mismos músicos estuvieran también, desde donde obtienen un misterio y misticismo profundo, un limbo espiritual que los purifica, une y sincroniza, dotando a sus ejecuciones con un carácter muy particular.

El sonido general es muy suave, placentero, fácil de sobrellevar y perfecto para dejarse conducir hacia una experiencia musical mística que sobrepasa los meros conceptos del mismo free jazz, con una instrumentación atípica para el género y un aura espiritual profundamente arraigada. Hasta 1973, lanzó música con Impulse! Records, el sello de jazz para el cual su esposo grabó casi todos sus álbumes posteriores. De 1973 a 1978, lanzó principalmente en Warner Bros. Records, hasta que se alejó del ojo público.

La mudanza de Alice a la costa oeste y la inmersión en la religión alejaron su atención de las grabaciones comerciales. En 1972, se mudó a California, donde estableció el Centro Vedantico en 1975. A fines de la década de 1970 cambió su nombre a Turiyasangitananda. Ella era la directora espiritual, o swamini, del Ashram Shanti Anantam (más tarde renombrado Sai Anantam Ashram en Chumash Pradesh) que el Centro Vedantico estableció en 1983 cerca de Malibu, California. Sus siguientes lanzamientos discográficos, más o menos constantes hasta principio de la década de los 90s, se volvieron cada vez más espirituales y reflejaron la inmersión en la vida espiritual que estaba llevando.

Cod: #1413

viernes, 17 de enero de 2020

Roy Brooks And The Artistic Truth - Ethnic Expressions (1973)

En su larga y distinguida carrera, el legendario baterista nacido en Detroit, Roy Brooks, tocó con todos, desde Yusef Lateef, Pharoah Sanders, Max Roach, Charles Mingus. De joven estudiante, le ofrecieron una beca para el Instituto de Tecnología de Detroit, asistió a la escuela durante tres semestres y luego se retiró para hacer una gira con Yusef Lateef. Después de un tiempo con Lateef y Barry Harris, tocó con Beans Bowles y con los ‘’Four Tops’’ en Las Vegas. De 1959 a 1964 estuvo en el Horace Silver Quintet tocando en álbumes clásicos de Blue Note como ‘’Song For My Father’’. 

Después de esto, trabajó como freelance en la ciudad de Nueva York durante la década de 1960 y principios de 1970, jugando nuevamente con Lateef (1967–70), Sonny Stitt , Lee Morgan , Dexter Gordon , Chet Baker , Junior Cook , Blue Mitchell , Charles McPherson ,Pharoah Sanders (1970), Wes Montgomery , Dollar Brand , Jackie McLean , James Moody (1970–72), Charles Mingus (1972–73) y Milt Jackson. Más tarde, en 1970, se unió al conjunto de Max Roach, ‘’M'Boom’’.

En 1972, Brooks formó su banda ‘’The Artistic Truth’’, grupo que lideraría como músico y compositor. Con estos lanzaría un primer álbum llamado ‘’Ethnic Expressions’’, que se grabó en vivo en el Small's Paradise de Nueva York, en 1973, exhibiendo un poderoso mensaje de conciencia negra y libertad espiritual, mezclando en un alto nivel el misticismo africano y el jazz de vanguardia, de esto surge una experiencia muy significativa y rica en representaciones e implicancias etnias. Como un símbolo de sus raíces africanas, la música de Brooks es una expresión que refleja sus idiosincrasias políticas y sus incumbencias espirituales, envuelto particularmente en un aire étnico afrocéntrico, donde aparecen elementos de funk, soul y vanguardia.

Este trabajo es un contenido vívido que condensa el verdadero sabor del jazz espiritual negro. Cuenta son una base rítmica sólida, muy agradable es el amalgama que forman entre los ritmos funk, las melodías soul, las percusiones afros y las improvisaciones de jazz, naciendo un sonido muy vívido y risueño, enriquecido, por el gran nivel de los ejecutantes y por la riqueza cultural que intentan transmitir, y sí que lo hacen.


El disco comienza con "M'Jumbe", una pieza de 16 minutos de duración que es realmente sofisticada, jazz progresivo para una composición letal y muy atinada, con mucho sabor y una sofisticación punzante que hace que la misma esté cambiando de tempos y ritmos y estilos todo el tiempo. Desde su comienzo hasta el final, la pieza no baja su gran nivel compositivo y su enorme gracia.

Luego aparecen algunas piezas más cortas, pero que no bajan de los cinco minutos cada una. ‘’The Last Prophet’’ que sigue con sus ritmos jazz funk y ese estilo atinado con mucho sabor y groove. Ya, en las últimas tres piezas, aparecen voces para darle canto y letra a las composiciones: ‘’The Smart Set’’ y ‘’Eboness’’, dos piezas que tienen una estructura similar, con canto en lso extremos e improvisaciones internas, donde participa Eddie Jefferson, y ‘’Eboness (Kwanza)’’, de 13 minutos, otra de las piezas extensas del disco, donde, esta vez, participa miss Black Rose con una formidable y muy expresiva performance vocal que se fusiona a un sinfín de solo de viento.

La banda es bastante amplia, está compuesta por: Sonny Fortune en saxo alto y flauta, Hamiet Bluiett en saxo barítono y clarinete, Reggie Workman en bajo, Roy Brooks en percusión y batería, Hilton Ruiz en Fender Rhodes, Lawrence Williams y Richard Landrum en percusiones africanas, Joseph Bonner en piano, John Stubblefield en saxo tenor, flauta, y clarinete, Cecil Bridgewater e trompeta y fliscorno, Olu Dara en trompeta, y Eddie Jefferson y Black Rose en voces. 

Esta pequeña gran orquesta le brinda grandes posibilidades al sonido general: arreglos de viento, percusiones diversas y grandes improvisaciones. El sonido no deja de está enriquecido de principio a fin, y la banda, envuelta por un espíritu místico, se desarrolla amalgamada a sí misma, creando un sonido sublimado en expresiones étnicas que realzan el espíritu negro.

Cod: #1408

domingo, 12 de enero de 2020

Don Cherry - Eternal Rhythm (1968)

Convertido en uno de los principales representante de la vanguardia jazzística, el trompetista Don Cherry se encuentra entre la elite de músicos más destacados del mundo del jazz del siglo XX. Con su estilo algo excéntrico y místico ha creado trabajos emblemáticos dentro del jazz de vanguardia. Miembro fundador del innovador cuarteto de Ornette Coleman de finales de los años 50, Cherry continuó ampliando su vocabulario musical hasta su muerte en 1995. Además de actuar y grabar con sus propias bandas, Cherry trabajó con músicos de jazz de primer nivel como Steve Lacy , Sonny Rollins , Archie Shepp , Albert Ayler , John Coltrane y Gato Barbieri .

En 1960, grabó The Avant-Garde con John Coltrane. Después de dejar la banda de Coleman, Cherry tocó con Steve Lacy, Sonny Rollins, Archie Shepp y Albert Ayler. En 1963-1964, Cherry co-dirigió los New York Contemporary Five con Shepp y John Tchicai. Con Gato Barbieri, Cherry dirigió una banda en Europa desde 1964 hasta 1966, grabando dos de sus álbumes más respetados, Complete Communion y Symphony for Improvisers.

En 1968 publicó su álbum ‘’Eternal Rhythm’’, grabado en vivo en el Festival de Jazz de Berlín. Este trabajo representa un hito y un clásico en la carrera de Cherry, (este ya era un música experimentado y consumado por aquellos años) y hace escuela con una amalgama sonora vanguardista única. Se trata de un jazz de vanguardia sutilmente sofisticado y enriquecido, propio de la experimentación que se está llevando a cabo, una obra conceptual en la que se entrecruzan pinceladas de post-bop, free jazz, blues, libre improvisación y ritmos orientales.


Mirando los créditos de Eternal Rhythm se notará que su musicalidad no tenía límites geográficos. Hay un entorno típico de jazz: trompeta, saxo tenor, trombón, batería y piano. Pero se complementa con una gran cantidad de instrumentos poco comunes. Junto a los clásicos hay un vibráfono, saron, flauta, múltiples gongs y una gran cantidad de instrumentos gamelan / orientales. Cherry no dudó en aventurarse fuera de la instrumentación tradicional, pero no pareció hacerlo solo para ser diferente, se las arregló para hacer de su música una mezcla orgánica y vanguardista.


El disco es esencialmente una sesión masiva dividida en dos partes. La parte I utiliza instrumentos más diversos para crear una amalgama entre el caos y las líneas compositivas por las que van transitando. Esta parte es sutilmente libre pero no esencialmente caótica, tiene sus reglas, sus motivos, su aire conceptual espiritual, dibujando surcos sobre los que los músicos convergen por momentos, volviendo a salirse para adentrarse de a ratos en, sí, el caos sonoro investigativo. Muestra diversos cambios y diversas facetas anímicas, demostrando una profunda e íntima fusión con aires orientales y étnicos que se entremezclan finamente con el jazz de vanguardia.

Ya, la parte II, es más amplia y concisa, sin dudas que ofrece una amalgama y una fusión con la anterior sesión, pero en este caso la profundidad y fusión étnica es dejada de lado para dar paso a la vanguardia más cruda y un poco más armónica, con pasajes melódicos más conocidos para el oído, sin dejar de ser, por supuesto, una pieza también cambiante que converge con diversos pasajes y motivos, entre líneas compositivas y el caos, entre los que divergen constantemente.

Cod: #1407

miércoles, 26 de diciembre de 2018

Sonny Sharrock - Black Woman (1969)

Sonny Sharrock fue un guitarrista eléctrico estadounidense que hizo su nombre en los discos de jazz de Herbie Mann y Pharoah Sanders. Trabajó en los círculos más importantes del mundo del jazz desde finales de los años 60 hasta su muerte en 1994, tocando con Dave Burrell, Norris Jones (también conocido como Sirone), Milford Graves (todos los cuales aparecen en este disco), y Peter Brtzman, Ronald Shannon Jackson, John Zorn, Miles Davis (tiene una aparición sin acreditar en A Tribute to Jack Johnson), Byard Lancaster, Cecil Taylor, Pharoah Sanders y Herbie Mann. Dado que los músicos de jazz a menudo son juzgados más por quién tocaron que por lo que tocaron, esas credenciales solo son probablemente suficientes para solidificar su lugar en el canon de fuera del jazz.

Black Woman es el álbum debut del guitarrista de jazz estadounidense Sonny Sharrock, que se grabó en 1969 y se lanzó con el sello Vortex. Este disco tiene una belleza particular, fuera del free jazz tradicional, aun le alcanza para mantenerse dentro de la vanguardia y la experimentación dentro del género, con la guitarra de Sonny Sharrok como líder y la voz de, su esposa, Linda Sharrok participando de la mayoría de las piezas en las que aparece con sus gemidos y evocaciones vocales explosivas e intensas, que le dotan al sonido de una emotividad que va más allá del común.

Sonny Sharrok no es un virtuoso pero se las arregla para ser lo suficientemente versátil a la hora de la ejecución, no es común un guitarrista líder en una sesión de free jazz y él lo lleva con firmeza, como la oportunidad lo demanda, aplicando sus yeites y borbotones sobre la fina capa que se crea en el entrecruce con la voz de su mujer. Aún más impresionante es su uso de efectos: no hay ninguno. A diferencia de muchos de los guitarristas de fusión de la época que necesitaban su gran distorsión o wah-wahs o cualquier otro efecto, Sharrock se contenta con dejar que su guitarra y su amplificador hablen.


En el disco reina un clima creado especialmente por el uso de las voces y lo que estas puedan aportar a una construcción melódica, simpática, una dosis de urbanismos afro, de canto que hay que apreciar a su debido tiempo para saber interpretar qué rol cumple y como funciona. El sonido en esencia son atascos con voces orgásmicas, guitarra chirriantes y baterías que saben de todo menos de ritmos convencionales, una combinación que de aúna en un sonido que hay que saber escuchar y apreciar.

Este álbum marca su primera vez como un líder de banda. Herbie Mann, el empleador de Sharrock en ese momento, alentó a sus varios sidemen a grabar sus propios discos para dejar salir cualquier creatividad que no haya encontrado una salida en su propia música. Como resultado, este álbum fue grabado y producido por Mann y publicado originalmente por el sello Vortex de Herbie Mann.

Después del lanzamiento de su tercer disco, Sharrock estuvo semi retirado durante gran parte de la década de 1970, se divorció de su esposa y colaboró ocasionalmente con Linda en 1978. Su carrera comenzó de nuevo a principios de los años 80 cuando conoció a Bill Laswell, quien lo contrató para formar el cuarteto Last Exit (con Ronald Shannon Jackson y Peter Brötzmann) entre 1986 y 1990. Sharrock ha lanzado grabaciones en solitario (el aclamado "Ask the Ages" en Axiom Records de Bill Laswell, con Pharoah Sanders de nuevo) y tocó como invitado en muchos otros discos (con Material, Ginger Baker, Nicky Skopelitis, F. Robert Lloyd, etc.). Fallecido el 25 de mayo de 1994 en Ossining, Nueva York.

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