El documental se encuentra en la actualidad en uno de sus mejores momentos de aceptación social y de público. Así, en la mayoría de las ciudades europeas hay alguna sala donde se proyectan una película de no ficción, algo inusual tan sólo hace una década. Este hecho se debe a un cambio en la función del emisor. En la actualidad el director-emisor es ante todo un ideólogo que pretende transmitir una opinión o experiencia. El receptor-espectador no valora la objetividad y la imparcialidad sino que busca y espera del director una opinión o mirada sobre el hecho que filma. Se trata, por tanto, de una nueva teoría del documental basada en la subjetividad y la parcialidad.
In today's cinematographic days, the documentary has reached a high level of social and public acceptance. In fact,in the majority of European cities, there is always at least one cinema screen projecting a non fiction film. This is due to the change in the film director's, or broadcaster's, function.At this point in time, the director- broadcaster is an ideologist whose job it is to transmit and convince someone of an opinion or of an experience. The spectator-receiver does not give value to objective and non biased ideas but rather looks for a specific point of view on what is been shown. Therefore, we are seeing a new theory of documentary-making based on subjectivity.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados