Las aplicaciones de los ultrasonidos pueden dividirse en aplicaciones de señal o de potencia. Las últimas se utilizan para modificar un proceso o producto con ultrasonidos, mientras que en las aplicaciones de señal el producto es el que modifica la señal, y esta modificación proporciona información sobre el producto. Las aplicaciones de señal en tecnología de alimentos pueden usarse para controlar un proceso (nivel de líquidos, medidores de flujo, ... ) o para determinar la calidad de alimentos. Dado que las técnicas de ultrasonidos son rápidas, no destructivas, fáciles de automatizar y relativamente económicas, el número de aplicaciones está creciendo en este campo. Los ultrasonidos también se pueden utilizar como equipos de laboratorio para determinar propiedades físicas y químicas de alimentos. Los ultrasonidos se han utilizado para determinar la textura, composición y estado físico en alimentos líquidos y sólidos, Los parámetros habitualmente medidos son la velocidad, atenuación y la composición del espectro de frecuencias. La velocidad es el parámetro más utilizado por ser la medida más simple y fiable. Este artículo revisa los principios básicos de los ultrasonidos, las técnicas más adecuadas para cada tipo de aplicación, el equipo necesario para las medidas así como las aplicaciones existentes de mayor interés.
© 2001-2025 Fundación Dialnet · Todos los derechos reservados