La discapacidad sobrevenida irrumpe de forma súbita y agresiva en la vida de las personas.Las consecuencias de esa discapacidad engloba cambios profundos en diferentes ámbitos tanto para la persona como en su familia y entorno. El sistema sanitario ha mejorado y mejora su función de salvar vidas, pero también es cierto que aún no logra cubrir todas las necesidades de atención que tienen las personas con discapacidad sobrevenida dada la complejidad de sus secuelas.La ausencia de un adecuado diseño y articulación del espacio socio sanitario, y la falta de reconocimiento del protagonismo que el tercer sector social de la discapacidad debe jugar en este ámbito supone un reto para el movimiento asociativo. En la búsqueda de nuevas formas de apoyar y facilitar la autonomía de las personas con discapacidad, un nuevo modelo se articula en torno a la utilización de las nuevas tecnologías de la informática y lascomunicaciones (TIC). El empleo de tecnologías no sólo mejora la estimulación cognitiva y motora, también son útiles para obtener información que permita potenciar la investigación yconstruir nuevas aplicaciones que ayuden a que cada intervención sea más eficaz, ajustándose a las necesidades particulares de cada persona con discapacidad, empoderándole y haciéndole más libre en sus decisiones y proyecto de vida.Las nuevas tecnologías representan ya nuevas alternativas para la promoción de la autonomía de las personas con discapacidad; incrementando su motivación a través de la incorporación de nuevos sistemas y objetivos.
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