Me encantan. Los apliques de pared actuales inspirados en diseños industriales con un regusto por lo vintage, son unas piezas que realmente me encantan. En realidad son perfectos en sí mismos. Son prácticos porque llevan la luz ahí donde se la necesita sin ocupar espacio. Son decorativos porque en un mínimo tamaño aportan una estética que ofrecerá ahí donde se instale, la tendencia que quieras recrear y aumentará la personalidad de ese rincón ↩
Son necesarios para incrementar el valor de una pieza a la que quieras aportar protagonismo con su luz directa. Y por si esto fuera poco, son un valor en alza, ya que a pesar de su simplicidad, si eliges una pieza especialmente buscada de un icónico diseñador interiorista, con el tiempo se revalorizará indefectiblemente ⇪
Algunos de estos apliques son ya maravillosos iconos convertidos en auténticos objetos de deseo. Otros en su afán por la imitación y la tendencia por recuperar diseños antiguos actualizándolos y así poder integrarlos en ambientes más modernos, han conseguido convertirse en piezas muy buscadas las que, por su simplicidad de montaje, se mimetizan sin estridencias con el entorno, convirtiéndose en lámparas retro donde en ocasiones una bombilla de filamentos y un casquillo son suficientes para decorar tu rincón favorito.... ❤