Estación Quilmes: Bertolt Brecht
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  Bertolt Brecht

11 de octubre de 2012















Loa de la dialéctica


Con paso firme se pasea hoy la injusticia
Los opresores se disponen a dominar otros diez mil años más.
La violencia garantiza: "Todo seguirá igual".
No se oye otra voz que la de los dominadores,
y en el mercado grita la explotación: "Ahora es cuando empiezo".
Y entre los oprimidos, muchos dicen ahora:
"Jamás se logrará lo que queremos".
Quien aún esté vivo no diga "jamás".
Lo firme no es firme.
Todo no seguirá igual.
Cuando hayan hablado los que dominan,
hablarán los dominados.
¿Quién puede atreverse a decir "jamás"?
¿De quién depende que siga la opresión? De nosotros.
¿De quién que se acabe? De nosotros también.
¡Que se levante aquel que está abatido!
¡Aquel que está perdido, que combata!
¿Quién podrá contener al que conoce su condición?
Pues los vencidos de hoy son los vencedores de mañana
y el jamás se convierte en hoy mismo.




Bertolt Brecht
Alemania (1898 – 1956)

En: Poemas y canciones
Ed. Alianza – 2010
Trad. Vicente Romano



Obra: Drinnen und draussen – George Grosz (Alemania)

  Bertolt Brecht

7 de septiembre de 2011




Tebas, la de las Siete Puertas, ¿quién la construyó?
En los libros figuran los nombres de los reyes.
¿Arrastraron los reyes los grandes bloques de piedra?
Y Babilonia, destruida tantas veces,
¿quién la volvió a construir otras tantas?¿En qué casas
de la dorada Lima vivían los obreros que la construyeron?
La noche en que fue terminada la Muralla china,
¿adónde fueron los albañiles? Roma la Grande
está llena de arcos de triunfo. ¿Quién los erigió?
¿Sobre quiénes triunfaron los Césares? Bizancio, tan cantada,
¿tenía sólo palacios para sus habitantes? Hasta en la fabulosa Atlántida,
la noche en que el mar se la tragaba, los habitantes clamaban
pidiendo ayuda a sus esclavos.
El joven Alejandro conquistó la India.
¿El sólo?
César venció a los galos.
¿No llevaba consigo ni siquiera un cocinero?
Felipe II lloró al hundirse
su flota. ¿No lloró nadie más?
Federico II ganó la Guerra de los Siete Años.
¿Quién la ganó, además?
Una victoria en cada página.
¿Quién cocinaba los banquetes de la victoria?
Un gran hombre cada diez años.
¿Quién paga sus gastos?

Una pregunta para cada historia.



Bertolt Brecht

  Bertolt Brecht

30 de abril de 2011




Meditaciones sobre la duración del exilio

1

No pongas ningún clavo en la pared,
tira sobre una silla tu chaqueta.
¿Vale la pena preocuparse para cuatro días?
Mañana volverás.

No te molestes en regar el arbolito.
¿Para qué vas a plantar otro árbol?
Antes de que llegue a la altura de un escalón
alegre partirás de aquí.

Cálate el gorro si te cruzas con gente.
¿Para qué hojear una gramática extranjera?
La noticia que te llame a tu casa
vendrá escrita en idioma conocido.

Del mismo modo que la cal cae de las vigas
(no te esfuerces por impedirlo),
caerá también a alambrada de la violencia
erigida en la frontera
contra la justicia.


2

Mira ese clavo que pusiste en la pared.
¿Cuándo crees que volverás?
¿Tú quieres saber lo que crees tú en el fondo?
Día a día
trabajas por la liberación,
escribes sentado en tu cuarto.
¿Quieres saber lo que piensas de tu trabajo?
Mira el pequeño castaño en el rincón del patio
al que un día llevaste una jarra de agua.




Bertolt Brecht
Alemania (1898 – 1956)

Trad. José Fernández de Lizana

Amante de la música y la literatura, desde muy niño comenzó a escribir, principalmente poesía y canciones. En 1918 acude a combatir en la Primera Guerra Mundial.
De ideología marxista, tuvo que exiliarse ante el ascenso de los nazis, residiendo en Dinamarca, Finlandia y Rusia hasta que se instaló en los Estados Unidos.
Intentó trabajar como guionista en Hollywood, pero sus revolucionarias ideas no encontraron eco entre los dirigentes de los estudios cinematográficos.
Además de su frustración como artista, fue investigado por sus actividades antiamericanas, lo que le determinó a abandonar el país norteamericano para irse a residir en Suiza. En 1947 volvió a Alemania y dos años después creó su propia compañía teatral, llamada Berliner Ensemble.
Sus títulos más populares, en su mayoría con fuerte acento político y social, son "Tambores En La Noche (Trommeln in der nacht) " (1922), "La Ópera De Cuatro Cuartos (Die Dreigroschenoper)" (1928), musicada por Kurt Weill, "Galileo (Leben des Galilei)" (1938-1939), "Madre Coraje (Mutter Courage und ihre kinder)" (1941), "La Buena Persona De Sezuan (Der gute mench von Sezuan)" (1940) o "La Inevitable Ascension De Arturo Ui (Der aufhaltsame aufsteig des Arturo Ui)" (1942).
Falleció el 14 de agosto de 1956 en la zona comunista de Berlín a causa de una trombosis. Tenía 58 años.