Estación Quilmes: Julián Axat
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  Julián Axat

24 de marzo de 2014



XXX


Te espero:

Padre

los ruidos causados por la derrota
no alcanzan a quebrarnos
aunque sea por un instante
esa increíble luz de tus ojos
esperanza o fulgor de a cada instante ser grito

Sueño:
estamos en algún lugar

vos papá y yo

me contás que ayer te cantaron
me decís que seguro te están por venir a buscar
te ruego la huida
vamos lejos
bien lejos te digo
pero me contestás que...
la sangre de los compañeros no se negocia
y no hay caso

Padre
no te convenzo

y la escena que se repite muchas noches
a veces llegamos a discusiones acaloradas
y parece que no hay caso

Padre
no puedo salvarte ni en los sueños


Julián Axat
Argentino – 1976
De “Peso formidable” - Ed. Zama – 2003



Pintura: Carlos Alonso – Argentino


  Julián Axat

31 de diciembre de 2013



El derecho a las estrellas para 2014


Hace pocos días visité un centro de encierro de adolescentes de la provincia de Buenos Aires, una de las actividades fue escribir en secreto, en un papel que les di, algún deseo para 2014. Antes de irme me los entregaron y los leí en voz alta, pero sin identificar a sus autores. La mayoría pidió un 2014 en libertad, otros, cosas más simples o sencillas, como “me gustaría sentir la lluvia en el cuerpo” o “poder mirar la noche estrellada más seguido”. Estos últimos deseos me llevaron a escribir lo que sigue.

No hay ningún artículo de ninguna constitución, convención, tratado o ley que establezca el derecho a contemplar el cielo estrellado dentro de las cárceles del planeta. Nuestra civilización viaja lentamente hacia la matriz de Guantánamo, confinamiento en jaulas bajo techo donde la diferencia entre noche y día se pierde. Donde el infierno se impone sobre el cielo.

Ni a Juan Bautista Alberdi ni a ningún constitucionalista de los nuestros se les hubiera pasado por la cabeza la idea de un derecho al cielo en los lugares de encierro. Es cierto que existiendo en la Argentina actual déficit de alimentación, higiene, salud, como altos niveles de violencia dentro de las cárceles, pensar el derecho a contemplar el cielo estrellado o a sentir la lluvia sobre el cuerpo puede sonar inocente, extravagante, romántico o hasta canallesco. Pero no, decimos que nada es incompatible en el contexto carcelario que sea, y para toda persona presa (aun en el dantesco infierno de todos los círculos y las crueldades), el derecho a contemplar la bóveda celeste es una necesidad humana de los encerrados, como lo es el deseo de absoluto y el rezo en la celda. Y ya no como parte del derecho a tener una abertura en la celda para proyectar la mirada, sino como parte del esparcimiento. En el cielo, la proyección de la libertad de quien está solo y espera, estar con alguien.

La eternidad a través de los astros es el libro que escribió en 1871 Louis-Auguste Blanqui, encerrado en una celda como consecuencia de su actuación en la Comuna de París. “Me refugio en los astros donde uno puede pasearse sin límites... y sentir que todo ser humano es eterno en cada uno de los segundos de su existencia. Esto que escribo en este momento en una celda del fuerte de Taureau, lo he escrito y lo escribiré durante la eternidad, sobre una mesa, con una pluma, con vestimentas, en circunstancias semejantes.” El amparo estelar de Blanqui es el derecho o la forma de comunicarse con lo absoluto que tienen todos los confinados. Blanqui es el padre del derecho a las estrellas.

La Convención Internacional de los Derechos del Niño de 1989, en el artículo 40, refiere al derecho al esparcimiento y a la dignidad que tiene la infancia encerrada por motivos penales. El derecho a la recreación en lugares abiertos choca de plano con los lugares con barrotes y muros que cada vez caracteriza más a los centros de encierro juvenil de la provincia de Buenos Aires. Sin embargo, hace poco conocí la experiencia de un conjunto de egresados de la Facultad de Astronomía de La Plata, seguramente ellos incentivaron a deseos de estrellas que yo luego recogí en mi visita. El proyecto se llama: “Derecho al cielo nocturno” y está a cargo de los docentes Mara Inés Fasciolo, María Cecilia Scalia, Federico García, Ignacio Gargiulo. Los talleres se dictaron en horario nocturno durante 2013. Una evaluación final sostiene: “...en general, las actividades realizadas durante estos siete encuentros consistieron tanto en observación del cielo nocturno a simple vista, utilizando también binoculares y telescopios, como en talleres áulicos con los que abordamos contenidos como el reconocimiento de los puntos cardinales, movimiento diurno, fases de la Luna y planetas, el origen de los meteoritos, etc. En todos los encuentros, llevamos cartas celestes que repartimos entre los jóvenes, las cuales fueron recibidas con mucho entusiasmo. Pudimos observar a los chicos muy entusiasmados en la tarea de hacer un reconocimiento del cielo a simple vista, que en su gran mayoría no habían podido ver desde antes de ingresar al Instituto, ya que las ventanas de las celdas no les permiten ver el cielo...”

En la obra de teatro de Albert Camus, Calígula, el emperador en decadencia lo tenía todo pero le faltaba algo, “quiero la luna” vociferaba. A los presos de nuestro país les falta todo o demasiado, pero aun así pueden “querer las estrellas”. El derecho al cielo es mucho más que el deseo de un preso, puede ser el de cualquier ciudadano de este país que no levanta la cabeza y sueña. En esa proyección, en ese olvido del desasosegado, el derecho a las estrellas como deseo para el año que viene.

* Defensor juvenil.


Julian Axat

(1976) La Plata

© 2000-2013 www.pagina12.com.ar  |  República Argentina  |  Todos los Derechos Reservados

Obra: Mujer, pájaro, estrellas  -  Joan Miró


  Julián Axat

2 de agosto de 2013


















Yo 2006*


me meto en el cementerio
me zambullo en osarios
desesperado navego
nado la nada
me ahogo
me ahogo entre fémures y mandíbulas
armo puzzles imposibles
dientes con metacarpos
omóplatos con espinazos
así paso la noche
escondido
cansado
de tanta originalidad
para armar eslabones perdidos
pero antes de convertirme
en el fracasado “equipo de mi mismo forense”
dejo los huesos a un lado
y escribo un poema
que me devuelve
la piel viva de su voz



* Variación del poema, libro Médium (Paradiso 2006)



Yo 2009


ese día
a la misma hora
sueño
viajo al pasado
una hora exacta antes de que caigan
me veo de siete meses
en los brazos de mamá
desesperado
les cuento su destino
hay que irse rápido les digo
quedan pocos minutos
no vacilan
no se inmutan
no hay caso pienso
se quedan
antes de volver me entregan
al niño
cuídalo
y regreso con él en brazos
todos los años
ese día


Nosotros 2012*


Los padres son los huesos

la ausencia del hueso y su búsqueda
perdidos o hallados

Los padres son los huesos

donde los hijos
afilamos nuestros dientes


* Variación del poema incluido en recordatorio publicado en el diario Página /12 del 12/04/2012


Julián Axat 
Argentino – 1976







De: Neo - Ed. el surí porfiado – 2012

Obra: Pezmanía – Adriana Bonanni (Quilmes - Argentina)
Foto: lospoetasnovanalcielo.blogspot.com

  Julián Axat

23 de julio de 2011



XV


Consumirlo todo
tragarlo de un bocado
sin que se escape

como higos pasados en mis entrañas

patíbulo rancio

paladar
y esófago en néctar

a relamerse

¡Hambre!

¡Mucha hambre!

la avidez del ayuno
que me invita a pasar a las bóvedas antiguas
a las morgues con material reciente

¿Probaste dedos?

         ¿Y pezones?

por no decir pelos

         mentón
                   uña

en fin

todo lo que sabe a dulces almendros

y por qué no

         a otros orificios amargos.



XXV

                                                  A Cristina I. della Croce


Te dije Pacha
la “Pacha mama”
Pachita linda
madre de las madres
te nombro mi Pacha
y me acunaste con el mismo calor
y la caricia tibia que había perdido
pudiste recuperarla
qué suerte encontrarte Pacha
ahí estoy saltando en la casita
con la batuta
y el maravilloso hermano que me diste
el juego recobrado
la alegría soportando tanto dolor
la ausencia y la verdad
la que siempre me supiste mostrar
qué puedo decir Pacha
que podrían decir
mis padres
si estuvieran
guardarían  silencio
en respeto a tu paso
a tu inolvidable presencia.


Julián Axat
Argentino – 1976

De: “Peso formidable”
Ed. Zama – 2003

Nació en la Plata, es poeta y abogado. Hijo de Ana Inés Della Croce y Rodolfo Jorge Axat militantes populares secuestrados el 12 de abril de 1977 en La Plata. Están desaparecidos.
Como poeta inicia su actividad en el año 1992 con el grupo Los Albañiles. Ha publicado en diversas revistas nacionales y extranjeras.
Su poesía ha sido traducida al francés, inglés y portugués.
En el año 2007 funda junto con Juan Aiub la Colección de poesía Los detectives salvajes, de la editorial Libros de la talita dorada.
En el año 2010 prepara y edita la Antología: si Hamlet duda le daremos muerte (Antología de poesía salvaje), que reúne a 52 poetas argentinos nacidos a partir de 1970. Prólogo de Emiliano Bustos, y epílogo de Nicolás Prividera.
Obra poética: “Peso formidable” (2004, Edit. Zama -Paradiso);  “servarios” (2005, Edit. Zama -Paradiso);  “médium” (2006, Edit. Paradiso); “ylumynarya" (2008, Edit La talita Dorada-Los detectives salvajes)


Foto extraída del blog  marianoschuster.blogspot.com