De entrada decíros que he descubierto a
Alan Moore en un pasado reciente. Puede que esto suene a sacrilégio pero es algo que poco a poco estoy tratando de remediar. Supe de él grácias a las adaptaciones cinematográficas que se han hecho de su obra y que todos conocéis, para más tarde descubrir que el padre de "
V de Vendetta", "
From Hell", "
La Liga de los 
Caballeros Extraordinarios"... no estaba nada satisfecho con dichas adaptaciones fílmicas y éso fue lo que me llevó a profundizar en sus histórias. He de decir que el primer cómic o novela gráfica que leí "
La Liga de..." además de dar la razón a Moore en cuanto a lo mucho que perdió en su traslado a la gran pantalla, me convertiría de inmediato en un fanático de todo lo relacionado con la obra y nombre de este
chamán, filósofo y grandísimo escritor inglés. De inmediato me cautivó su narrativa; cómo juega con el pasado histórico y todo lo referente a las artes del siglo XIX; la combinación de los monstruos y terrores clásicos con los horrores de la vida cotidiana; sus conocimientos sobre ocultismo, mitología, arquitectura, mágia, cábala, drogas, sexo, conspiraciones y todos esos temas personalmente tan atrayentes. Una vez aparcas su obra y profundizas en su persona, comienzas a fascinarte cada vez más...
.-Visionar el documental, o más bien "legado-mental"
MIDSCAPE OF 
ALAN MOORE (2006), quizá séa la mejor manera de ahondar dentro de tan fascinante cerebro (tarea nada sencilla). Será el propio Moore quien se presente a si mísmo y nos abra la puerta de su imaginación. Hablará de los paisajes sombríos de su Northampton natal (1953-...), de sus problemas escolares, de sus costosos inicios como escritor, de su mezcla de influencias, de la futilidad de la fama, de sus dotes de
mago y alquimista de la sátira, de su poder para manipular imagenes y palabras, de la verdad aterradora del mundo real, de nuestro verdadero Yo... Conclusión: Sólo un loco tan maravilloso como Alan Moore podría tratar de entender un mundo tan caótico como el nuestro y canalizarlo de una manera tan personal y creativa.
¡Que no se extinga la llama!