
Arrancó en 1979 a la virginal edad de 13 años en "Un pequeño romance"(George R. Hill). Tres años y siete películas después consiguió encabezar el reparto del film
LADIES & GENTLEMEN, THE FABULOUS STAINS (Lou Adler, 1982). La película, practicamente desconocida en Europa (y así seguiría de no ser por la vendita red de banda ancha), dirigida e ideada por toda una figura del pop californiano de los 60 (el tal Adler), llegaría a convertirse en todo un film de culto en los EE.UU. La brillante interpretación de
Diane Lane como Corinne Burns la rebelde cantante del grupo punk del título (los Stains) la catapultaría al estrellato. Como quedó comprobado, primero Coppola y luego Walter Hill quedarían prendados (y nosotros después) del desparpajo y p

resencia escénica de esta adorable adolescente neoyorquina. Ella misma cantaba los temas punk en la película, y con ese look ultracooll ( a lo Siouxsie, Debbie Harry o Nina Hagen de la época) dotaba al conjunto de una sorprendente veracidad. Voz e imagen que sin duda influyeron para que el flamante director de "The Warriors" la escogiera para interpretar el papel de Ellen Aim (eso sí, con un apecto mucho más pop) en aquella maravilla de rock-movie futurista que fue
CALLES DE FUEGO (Streets of Fire, 1984). Tras hacer de Corinne Burns en "Ladies & Gentlemen..." encadenaría seguidas
REBELDES (Cherry Valance),
LA LEY DE LA CALLE (Patty), la citada CALLES DE FUEGO,
COTTON CLUB (Vera Cicero) y
MANO DE ORO (Lorry Lane) un film de Ben Bolt, para nada menor, en compañía una vez más de Matt Dillon y un siempre estupendo Tommy Lee Jones. En apenas cinco años la por

entonces veinteañera Diane Lane se había labrado una filmografía de aupa. Todo indicaba, como reina indiscutible que era del cine de
teenager y de acción de los primeros años 80, que su nombre continuaría copando en un futuro los estrenos más exitosos de la cartelera de cine hollywoodiense. Craso error. Vaya usted a saber... Sus fans no tardaríamos en preguntarnos qué fue de Baby Jane, digo, de Diane Lane. Continuar continuó en el negocio hasta nuestros días. Hombre, si le siguen la pista darán con que participó levemente en películas más que decentes, como
Chaplin (1992) o
Wild Bill (1995) (otra vez el
outsider Walter Hill al rescate), pero el resto mejor ni mencionarlas. Como excepción decir que no hace mucho tuve el enorme placer de reencontrarme con la actriz visionando la cinta
Hollywoodland (2006), deliciosa película inspirada en un caso real del Hollywood de los años 50 con Adrien Brody investigando la desaparición de George Reeves, el primer "Superman". Pero pocas, por no decir ninguna, alcanzarían el nivel de sus primeros y gloriosos años deleitando al personal más joven e inconformista, y guardándola para siempre en un rincón de nuestra memoria cinéfila. Nostálgicos sin re

medio, más que preguntar, nos acordamos de su persona. Desde aquí nos rendimos a la guapa actriz neoyorquina y a su trabajo en la década de los 80. Recordando y recomendando una vez más un título como
"... The Fabulous Stains" en el que como apunte final resaltamos además la presencia de otra magnífica actriz ochentera como Laura Dern y, ¡¡al loro!!, que uno de los grupos que aparecen en el film,
The Looters, está compuesto por
Steve Jones, Paul Cook, Paul Simonon, ni más ni menos que los originales The Professionals grupo que Steve y Paul fundarían después de Sex Pistols, ponen música de la buena a esta punk-cult-movie-teenager inolvidable.