¿cuánta desigualdad puede normalizarse antes de que dejemos de verla por completo?
Encontrada por ahí en redes... El escaparate promete un hogar perfecto: luz cálida, almohadones mullidos, un orden que parece moral. Falta el gatito nomás. A centímetros, alguien intenta dormir en el suelo, invisible por pura costumbre. Seguramente sin demasiada expectativa. No es una metáfora: es la ciudad funcionando tal cual fue diseñada. Todo está bajo control. La estética del confort convive sin fricción con la intemperie real. Es la civilización que integramos. La foto no denuncia una excepción; revela la regla. Y obliga a una pregunta incómoda: ¿cuánta desigualdad puede normalizarse antes de que dejemos de verla por completo?


