El atentado a "Gabito"

El 21/12/2003, cerca de la medianoche, el periodista deportivo Ricardo "Gabito" Acevedo fue baleado a la entrada de su edificio, en Montevideo. Recordemos este atentado, uno de los más graves que vivió el periodismo en Uruguay.
El atacante no dijo una palabra, se acercó y le disparó en la pierna izquierda, luego huyó. Gabito, sin entender qué pasaba, lo corrió hasta que notó que sangraba. Fue internado con una bala de 22 incrustada en el muslo, pero fuera de peligro.
Al poco tiempo, se supo que no fue un intento de robo: había sido un atentado por encargo. El sicario fue identificado como Juan Carlos "el Negro" Martínez, quien confesó haber cobrado 500 dólares por dispararle. Tenía una foto de Gabito, un revólver, y la orden de matar.
Si lo mataba, le pagarían otros 700 dólares. Casi lo intenta pero algo lo hizo dudar. Más adelante, Gabito contó que el propio sicario le explicó que “Yo necesitaba la plata, pero no quería matarte. Quería avisarte que te querían matar”.

¿Quién estuvo detrás del intento de asesinato? 

La investigación judicial apuntó al entonces presidente del Consejo Único Juvenil de la AUF, Nelson Spillman.
Spillman
Dato de color, Spillman trabajó de la mano de Marcelo Corazza, ganador del reallity show Gran Hermano, recientemente acusado de abuso sexual de menores.
Coraza con Spillman
Spillman tenía antecedentes de amenazas. En radio dijo cosas como que “Gabito en cualquier momento iba a encontrar la horma del zapato... ahora va a tener que bailar con la más fea” o amenazas de tono similar. Lo cual hizo predecible su vínculo con el atentado.
Su hermano, Daniel, terminó admitiendo ante la justicia su participación en el atentado. Llamadas telefónicas y testigos protegidos los incriminaron. El abogado de Nelson dijo que su defendido "es una persona que bajo situaciones de estrés no reacciona como una persona normal"El Gol usado para transportar al sicario era de Spillman, y lo manejaba Daniel. Ambos fueron procesados y enviados a prisión. La autoría intelectual del atentado quedó probada en la justiciaGabito venía investigando corrupción en el fútbol uruguayo: lavado de dinero con pasas de juveniles, arbitrajes manipulados, favores cruzados. Lo hacía desde su rol en prensa escrita y en televisión, como panelista en Estadio Uno y columnista en Últimas Noticias.
Tras el atentado, lejos de callarse se mantuvo fiel a su estilo desafiante y redobló la apuesta: “Esto es obra de la mafia del fútbol. Están nerviosos. Me quieren intimidar. No lo van a lograr”.

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