En un ancho valle vivían tres pequeños y gordos cerditos, los dos más pequeños se pasaban el día tocando el violín y la flauta. El hermano mayor, por el contrario, era más serio y trabajador. Tenían que construir sus casitas para el invierno. El más pequeño de los tres, que era el más juguetón, no tenía muchas ganas de trabajar y se hizo una casa de pajita. El otro cerdito juguetón trabajó un poco más y la construyó con palitos. El mayor se hizo una bonita casa con ladrillos y cemento. Un…