Ven, desaparece conmigo, olvida todo pasillo a dentro.
Vamos, no lo pienses tanto. Ven. Aquí te espero.
Es de noche y nuestras sombras ya se abrazan.
Me brillan los ojos sabiendo que te puedo.
Ven, vamos, no nos niegues el descenso.
Siento danzando el latido en las puntas de los dedos.
Quiero alzar mis brazos pero sé que aún no debo.
Ven, vamos, la duda ya sobra en estos tiempos.
Temes el camino, temes al momento, sé lo que pasa.
¿Temes que quiera enredarte o es que sabes que,
si cierro con llave, olvidarás que fuera está tu casa?