te aísla, te aquieta y te obliga a ser
limitada, lenta, lejana-extraña;
mente-cuerpo-espíritu frente a frente.
Cómo coordinarlos, equilibrarlos...?
La mente perdida entre sombra y luz,
el espíritu intuyendo la prueba,
disfrazada, en el cuerpo dolorido,
que clamaba su abrazo sanador.
Y el tiempo retando a la esperanza,
que tímida estrenaba día a día
su fe, su coraje y su osadía.
Tres meses han pasado en un suspiro:
largo abrazo: mente-cuerpo-espíritu;
vuelve el ritmo, el recuerdo y la palabra
me acerca a vosotros y a la poesía...
Porque cada día empieza la vida...!!!
Imagen de Google.
M.Jesús Muñoz
Corral de Almaguer 23-septiembre-2025