La historia de Elsa no estará falta de sacrificios y dolor; conocerá la miseria más terrible en los durísimos años de la Gran Depresión. La autora nos transporta a la época de las grandes sequías que coincidieron en el tiempo con la crisis financiera de 1929 en los EEUU y que acentuaron la recesión económica al dar lugar a malas cosechas que llevarían a la ruina a millones de habitantes de las zonas agrícolas del país. A esto se le sumarían, como consecuencia de la falta de lluvia, tremendas tormentas de polvo, vientos cálidos que arrastraban la tierra de los campos sin cultivar, restos de plantas resecas y todo lo que encontraban a su paso, cubriendo por completo campos y pueblos cuyos pobladores se ven forzados a abandonar. A este fenómeno se le conoció como el Dust Bowl y dejó detrás un paisaje desolador donde las fértiles tierras de cultivo de las Grandes Llanuras del centro del país se vieron convertidas en campos yermos y desérticos. Esta será la realidad que le toque enfrentar a nuestra protagonista que, al igual que tantos compatriotas suyos, atravesó algunos de los años más duros de su Historia a base de un inmenso esfuerzo y enormes sacrificios.
domingo, 5 de diciembre de 2021
Los cuatro vientos
La historia de Elsa no estará falta de sacrificios y dolor; conocerá la miseria más terrible en los durísimos años de la Gran Depresión. La autora nos transporta a la época de las grandes sequías que coincidieron en el tiempo con la crisis financiera de 1929 en los EEUU y que acentuaron la recesión económica al dar lugar a malas cosechas que llevarían a la ruina a millones de habitantes de las zonas agrícolas del país. A esto se le sumarían, como consecuencia de la falta de lluvia, tremendas tormentas de polvo, vientos cálidos que arrastraban la tierra de los campos sin cultivar, restos de plantas resecas y todo lo que encontraban a su paso, cubriendo por completo campos y pueblos cuyos pobladores se ven forzados a abandonar. A este fenómeno se le conoció como el Dust Bowl y dejó detrás un paisaje desolador donde las fértiles tierras de cultivo de las Grandes Llanuras del centro del país se vieron convertidas en campos yermos y desérticos. Esta será la realidad que le toque enfrentar a nuestra protagonista que, al igual que tantos compatriotas suyos, atravesó algunos de los años más duros de su Historia a base de un inmenso esfuerzo y enormes sacrificios.
sábado, 13 de febrero de 2021
El baile de las luciérnagas
Tully es una chica espectacularmente guapa, atrevida y deshinibida, consigue convertirse en popular donde quiera que vaya logrando enmascarar tras su sonrisa permanente los serios problemas que tiene en casa: una madre hippy y enganchada a la droga que la abandona repetidamente a lo largo de la infancia. Por suerte, cuenta con sus abuelos que la crían hasta que ambos fallecen, momento en que los padres de su vecina y amiga Kate la acogerán como a una hija más. Kate es una chica de pueblo estudiosa y discreta a la vez que poco agraciada que crece rodeada del cariño de una familia tradicional y feliz. Pese a sus diferencias, o tal vez porque cada una admira y anhela lo que la otra es, y gracias a que se convierten en vecinas de la calle Firefly Lane, las chicas trabarán una amistad que perdurará a lo largo de varias décadas. La narración nos lleva a seguir las vidas de las dos amigas desde los salvajes años 70 de las drogas y el amor libre, pasando por los agresivos 80 de los yuppies, la laca y las hombreras hasta los años 90 y comienzos del siglo XIX y a lo largo de todo este tiempo iremos acompañando a las chicas en su crecimiento y descubrimiento del mundo, del amor y el sexo, pasando de su pequeño pueblo a la universidad persiguiendo un sueño común de convertirse en estrellas de la televisión. Tully es apasionada y explosiva, tratando siempre de disfrazar sus problemas bajo una imagen de chispeante alegría. Kate es insegura y discreta y sigue la estela de su amiga, el huracán Tully, que la arrastra junto a ella en sus planes haciendo sentir a Kate incapaz de tomar sus propias decisiones. Cada una acabará tomando su propio camino en lo personal y en lo profesional; Tully sigue la senda del éxito profesional mientras que Kate se convierte en esposa y madre de familia pero su amistad, que es una verdadera relación de hermandad, permanecerá firme y será su principal apoyo a lo largo de tantos años.
De la guerra de Vietnam a la muerte de Lady Di, los diversos hechos históricos y fenómenos populares que marcan las distintas décadas aparecen como fondo sobre el que transcurren las vidas de las chicas de Firefly Lane, con su banda sonora de grandes éxitos, las modas cambiantes a las que se apuntan sin dudar y los diferentes problemas y triunfos propios de cada una de las etapas de la vida: la adolescencia, las amistades, las relaciones sexuales, el amor, el matrimonio, la maternidad, la soledad, los éxitos y las decepciones... La historia de Tully y Kate es la historia de toda una generación de mujeres que crecieron y maduraron en unos años complejos en la cambiante sociedad norteamericana de la segunda mitad del siglo XX y que lucharon por lograr compatibilizar sus vidas profesionales con la familia, compitiendo en un mundo diseñado para hombres donde llegar a la cima siempre supuso dejar algo atrás necesariamente.
Como viene siendo ya costumbre últimamente, la novela ha sido convertida en serie para la televisión de la que solamente he visto por ahora unos pocos capítulos. Tengo que decir que a la versión televisiva le falta algún que otro hijo, algunos personajes como la señora Hart es totalmente diferente o un Johnny Ryan que no es ni la mitad de cautivador que en el libro y le sobra un divorcio, bastante contenido sexual, un hermano gay y alguna que otra trama inventada, pero es probable que la termine de ver aunque solo sea por disfrutar de Kate y Tully en carne y hueso y comprobar si al menos se ha respetado la preciosa relación de amistad que supone el eje de la trama de esta maravilla de novela.
martes, 27 de noviembre de 2018
Jardín de invierno
En lo que se refiere estrictamente al argumento de la novela, nos encontramos para comenzar con un drama doméstico originado por la muerte del padre de la familia protagonista compuesta por una madre, Anya, una mujer de origen ruso, siempre distante y fría y las hijas de ésta, Nina y Meredith, dos hermanas totalmente opuestas en carácter y ocupaciones: Nina es fotógrafa de guerra, independiente y sin ataduras, siempre viajando lejos de los suyos mientras que Meredith se ocupa del negocio familiar y de su esposo e hijas, vive pendiente de su casa y de sus padres ya mayores.
Reconozco que relato desgarrador del cerco de Leningrado cuya crudeza tan bien se narra en "El jinete de bronce" es lo mejor que aporta la novela, el relato de una época histórica fascinante por su dureza y por lo que supuso de prueba de la resistencia de la naturaleza humana ante situaciones extremas. El problema está en que durante muchas páginas he tenido la sensación de que no ocurría nada, que se repetían las jornadas familiares monótonas, las conversaciones que no llevaban a ninguna parte en las que las protagonistas se regodean en el duelo por el padre pero tardamos mucho en adentrarnos en la línea temporal del pasado que adivino desde el principio que es la que va a proporcionarnos la historia fundamental, el auténtico valor de esta novela. Por otra parte, debo reconocer que el estilo fantástico no es lo mío por lo que el recurso de acudir a un cuento lleno de magia para acercarnos al verdadero pasado de Anya no ha logrado conquistarme, aunque sí lo ha hecho su historia real, una vez que ésta ha adoptado el tono realista que me ha convencido mucho más.
jueves, 9 de agosto de 2018
Volverás a Alaska
"En Alaska no importa quién eras cuando decidiste venir hasta aquí, sino en quién te conviertes. Estáis aquí, en la naturaleza, chicas. Esto no es ninguna fábula ni ningún cuento de hadas. Es real. Es duro. El invierno llegará pronto y, creedme, no se parece a ningún otro invierno que hayáis vivido. Matará a los rebaños. Y rápido. Tenéis que saber cómo sobrevivir. Tenéis que saber disparar y matar para alimentaros y manteneros a salvo. Aquí no estáis en lo alto de la cadena alimenticia."
miércoles, 6 de julio de 2016
El ruiseñor
"- Pétain nos ha salvado de pasar otra vez por eso. Nos ha mantenido a salvo. Ha parado la guerra. Ahora Antoine y nuestros hombres volverán a casa.
- ¿A un mundo de Heil Hitler? (...) «La llama de la resistencia francesa no debe apagarse», eso es lo que dijo De Gaulle. Tenemos que luchar con los medios de que dispongamos. Por Francia, Vi. Para que siga siendo Francia. - ¿A un mundo de Heil Hitler? (...) «La llama de la resistencia francesa no debe apagarse», eso es lo que dijo De Gaulle. Tenemos que luchar con los medios de que dispongamos. Por Francia, Vi. Para que siga siendo Francia."