Gracias por sus latidos de afecto y cariño que alimentan al Alma.

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martes, 8 de septiembre de 2009

Garantía ( 2 y final )

Soy persona eficiente. Desarrollo el desempeño de lo prometido, con entrega y cariño.
A mi este trabajo, me mantiene alerta, vigorosa, y con grandes ánimos. Investigo las raíces, de aquella familia que me contrató.
Rescato, de no se qué, nauseando arrabal, áquel primo, en tercer o cuarto grado de parentesco.
Los busco solitarios. No deseo tensionar mucho, porque, “un cliente satisfecho, te recomienda con diez”. Un cliente defraudado, te quema con 100.

Llego con el pariente aquél, de la familia que me contrató. Le comento, al eslabón perdido, en platica tranquila, como al aire, que el, tiene unos parientes, que no saben, que hacer, con su tiempo, sus personas y su dinero.
Le doy, pormenores del actual vivir, de sus parientes en bonanza.
De la A a la Z.
Donde puede localizarlos, como mails, fax, números telefónicos, aún los privados; su domicilio particular, de oficina, y donde estudian.
Le comento sus fobias, sus anhelos, sus deseos.
Las palancas, que hay que mover, para que sientan culpabilidad, angustias, y un exacerbado, sentido de responsabilidad filial.
En fin, le presento, en charola de plata, la posibilidad, de poder moverse, en un nuevo círculo familiar.
Esos parientes, sacados de la nada, que por algo, ni quien se acuerde de su existencia, son por lo regular, buenos psicólogos recibidos con honores, en la facultad de la vida.
Sé, que pueden sacar, a quien se lo propongan, del limbo en que se encuentre.
A mis clientes, sus teléfonos, siempre sonaran, a horas de lo más extrañas.
Sus llamadas, empiezan con un:
¿Te acuerdas de mí?
Aunque, nunca en su vida, sus caminos se hayan cruzado.
Y continúa, con un “pero si somos parientes”.
A continuación, sueltan, el necesito, urge, es de vida o muerte.
Si mi tía viviera, con lo mucho que me quería.
Cuando mis clientes salgan, en las reuniones, con amigos, en cualquier momento, aparecerá el primo, como por arte de magia.
Tocará su hombro, o codo, y con un fingido semblante tímido, saluda y dice ¡primo!
¡preséntame!
Ahí, del cliente depende, si pone cara de ¿what?
O si con flema británica, lo acepta en su núcleo de ese momento.
Y le inventa hidalguías, o curriculums a lo desesperado. Porque no va a presentar, a un primo, con un…
¡Ah, si! es mi primo y ya.
Porque, los parientes, no se dan en macetas.
Forman parte de tu árbol genealógico. Y ahí está el asunto.
Como te lo quitas de encima.
Es como resucitar a alguien, que ni sabíamos que existía.
Y como no atan ni desatan, ni estudian ni trabajan; esos parientes trampolines, salidos de nuestro deseo de acabar con el aburrimiento, se nos aparecen, en los cumpleaños, día de reyes, navidad, reuniones familiares, que porque es domingo, vacaciones largas, cortas.

Y su bandera implacable es,
- La sangre llama. Y debemos convivir primo, no sea, que sólo en los velorios nos reunamos.
Y como el tiempo crea derechos, se le aparecerá, donde menos lo espera, y le gritara:
¡No seas tacaño!
¡Aliviáname!
¡Dame para el pomo!
-Ya se te olvidó que…y aquí inventan, lo que quieren.
Ya para esas fechas, todos los conocidos de mi cliente, habrán tenido el gusto de platicar con el pariente resucitado, que con tal, de conseguir un préstamo, que nunca pagan, regalará, al oído atento, embustes, sin base alguna.
Que luego, mí cliente, tendrá que desmentir, y aclarar.
Yo cumplo lo prometido.
Están mis clientes, tan ocupados, y preocupados, que sus niveles de glucosa, presión sanguínea, y adrenalina, aumentarán, como pocas veces habían sentido.
Y mientras, tengan vida, no se volverán a aburrir.

domingo, 6 de septiembre de 2009

Garantía ( 1 )

GARANTÍA

Nuestras vidas, cuentan, con más comodidades.
La mayoría de las casas, poseen, todos los servicios básicos.
Contamos con bienes, que ni los reyes de antaño, pudieron, ya no tener sino siquiera imaginar.
A todos, nos ha llegado, por el simple hecho de ser habitantes, del siglo XX1, todos los inventos y descubrimientos de siglos pasados.
Y se continúan mejorando, así como descubriendo e inventando, mas y mas.
Haciendo, todo esto, la vida mas placentera, apacible y divertida.
Con la televisión de cable, que tiene tantos canales, que hasta un folleto mensual, debes consultar, para la programación.
Con los teléfonos, siempre puedes estar en comunicación, con los demás.
Y el Internet, con páginas y páginas Web. Metes una palabra en búsqueda, pinzas el enter, y el resultado, mas de 10 000 sitios del tema propuesto, para que tu escojas, los de tu gusto.
Existen infinidad de juegos electrónicos, de tópicos diferentes, así como grados de dificultad.
Y después de esto boom de inventos, de este deslumbrarnos, con las maravillas tecnológicas, cuantas personas que tú conoces, si les preguntas, un día cualquiera:
¿Qué haces?
Te responden; aquí, ¡aburrido!.
¡Ay! ¡Que fastidio!, no hay nada que hacer.
Mira a tu entorno.
Los jóvenes con cara de hastió.
Cuando se reúnen, en una casa los jóvenes, ya no platican, de lo que sucede en los salones de clase.
Eso no tiene importancia para ellos.
Sus pláticas, son solo las técnicas para pasar niveles de juegos, los trucos, en que paginas Web encuentran soluciones.
En que numero, de la revista mensual, de tal consola de juegos, están las trampas descritas, y como encontrar los caminos y llaves ocultas.
Y cuando ya se pasan la información, y terminan el juego iniciado, esa tarde…
Apagan la pantalla, apagan la magia.
Silencio total.
Y las exclamaciones:
¡Hay que hueva!
¡No hay nada interesante!
¡Haber que hacemos ahora!
Y te miran, a ti, adulto, como si tú, fueras el culpable, de su estado de ánimo.
Como si tú, les pudieras ayudar, a hacer interesante su tarde.
Sin saber, que tu, estas igual, o peor que ellos.
Es ahí, donde yo intervengo.
Garantizo sacarlos de su marasmo, ponerles pimienta a sus vidas.
En el contrato, incluyo cláusulas, que prometen el cumplimiento total de lo prometido; o el desembolso de su dinero. Cobro módico.
Porque hay miles de casos así; y el trabajo, para mi, abunda. Solo pido esperar un poco.
A que llegue su turno a mi agenda.
Pero vale la pena, sus vidas darán un giro completo.

Portada del libro "Más allá"

Portada del libro "Más allá"
Camino de Amor Infinito

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