¡YA ESTOY AQUÍ, DE VUELTA!
He estado unos días fuera, intentando reponer fuerzas, desconectar del mundanal ruido y recargar energías... creo que lo he conseguido y gran parte del resultado lo tienen mis dos compañeros, ahora amigos.
Hoy entro para daros las gracias a todas por los comentarios que habéis ido haciendo sobre las entradas que os dejé ¡programadas!
Todavía me estoy re-colocando en la rutina diaria y tengo que confesar que no me está resultando sencillo, jeje.
He hecho parte del "Camino de Santiago", concretamente 109 de los 112 últimos kilómetros! Salimos desde Sarria.
Esto no tiene quizás nada que ver con el patch, aunque para mí, cada paso que he dado, lo he sufrido por las lesiones y las agujetas, como cuando empiezas un proyecto y no te sale bien y lo vuelves a repetir, por ejemplo.
Cada paso he disfrutado de los maravillosos paisajes que nos ofrece el camino con sus diferentes ambientes, matices, colores y olores (majestuosos eucaliptos!).
Pero sobre todo he vivido una de mis más maravillosas experiencias que empecé con dos practicamente "desconocidos" y que a lo largo del camino se han ido convirtiendo en unos ángeles que me han guiado, me han animado, me han consolado, me han ayudado y me han dado las fuerzas necesarias para llegar a la meta donde se terminó de forjar el principio de lo que deseo una GRAN AMISTAD!
GRACIAS YOLI Y GRACIAS FRANK. ¡OS QUIERO! Ya lo sabéis.
Nunca hubiese imaginado que algo tan simple como caminar, me resultara tan duro físicamente y tan tremendamente gratificante personal y psicológicamente!
Me es del todo imposible transmitiros mis emociones con palabras, al llegar a la plaza de la Catedral de Santiago!
Sin duda que repetiré este camino en cuanto me sea posible y sin duda que RECOMIENDO ESTA MARAVILLOSA EXPERIENCIA a todo el mundo.
Además de los preciosos parajes, mirad qué cosa más bonita encontró entre paso y paso Frank y me enseñó:
¿No lo véis bien? Pues más de cerca...
Son dos tejas decoradas que había en la entrada de una casita en medio del camino!
¿A que son una preciosidad? Sobre todo por la bordadora que me recordó mi afición!
Y claro, aunque no iba de turista y no visité ninguna tienda de Patch (eso cuando vaya de visita), si me traje un detallito que me ayudará a recordar, en los malos momentos, los inolvidables momentos que he pasado en estos días.
Síii, es un dedalito con forma de PEREGRINO!!
Creo que a partir de este momento, voy a empezar a coleccionar dedales que sean tan originales como éste, aunque por ser el primero y por venir de donde viene, siempre será especial.
Besos