Hace mucho años (es como empezar a contar un cuento), recién iniciada en el patchwork, encontré una estupenda oferta de telas en esa tienda que tiene tres vocales y compré metros y metros de telas que estaban en oferta. Algodones bonitos con mucho cuerpo y diseños atrevidos. Empezaba a cortar telas con cúter y me pareció una buena idea para practicar y perderle el miedo a esa cuchilla que tanto miedo me daba.
Corté las piezas con el cúter, había que unirlo con la máquina, pero a mi el manejo de la máquina se me resistía un poco y para evitar descuadres lo unimos a mano, mi madre y yo.
He olvidado hacerle fotos a la trasera, es a tres colores 3/4 partes son de la tela de cuadrados y el resto en blanco y la tela que imita cachemir.
La cama es grande mide 2 metros de larga por 1,40 de ancha.
No han vuelto a repetir las telas al corte, ahora en ese sitio que todas conocemos, tienen un nórdico con un dibujo muy parecido, esperaré a que lo rebajen y así podré hacer cojines a juego que es lo que le falta, porque aproveché toda la tela al máximo y no me dio para más.
Quilt "Sin patrón".
En la misma habitación, que es de mi hija, está este quilt, que se llama "sin patrón", no consigo hacer mejores fotos, lo mejor de él es el acolchado a mano que lleva que es mu prolijo. Más fotos de éste quilt
aquí.
El relleno es un nórdico muy finito, super finito, llegada la hora de acolchar me fue totalmente imposible taladrar con la aguja las cinco capas que tiene, lo rematé anudando con lana finita en verde las uniones de los bloques, laborioso pero posible.
Cuando lo terminé que fue a finales del 2007, no me gustaba, lo llamé "la colcha hortera quita - miedos"(porque me ayudó a perderle el miedo al cúter), lo cierto es que ahora cuanto más lo veo más me gusta.
Y colorín colorado, la historia de éste quilt se ha terminado.
Nos vemos, adios, adios...
Mavi.🐝