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Ottone Rosai
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Ottone Rosai. Pintor italiano. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Florencia, recibiendo la influencia de Jean - Baptiste Camille Corot, Gustave Courbet, Honoré Daumier y Paul Cézanne.
Síntesis biográfica
Ottone Rosai nació el 28 de abril de 1895 en Florencia, Italia. El tercero de los cuatro hijos de un tallador, con una verdadera aptitud para el arte, matricula en el Instituto de Artes Decorativas de la Piazza Santa Croce para estudiar diseño adornado.
Al poco tiempo de ingresar a este centro es expulsado por su carácter impulsivo e inquieto, pero continúa su formación artística por sí mismo sin dejar de lado la literatura.
Inicios
Rosai a los dieciséis años ya es capaz de exhibir sus grabados en estudios o aulas cerradas, pero prefiere las calles de su ciudad y a las personas que asisten el taller de su padre.
Estudió en la Academia de Bellas Artes de Florencia, recibiendo la influencia de Camille Corot, Courbet, Daumier y Cézanne. En 1913, por mediación de Ardengo Soffici, se aproximó al Futurismo, ve las obras de Umberto Boccioni, inspirándose y convertirse en un amigo de algunos miembros del grupo que incluye esponjoso, Carlo Carrá y Severini.
Durante la Primera Guerra Mundial se alistó como voluntario y pronto fue enviado al frente.
Después de la guerra se adscribe al expresionismo y continúa en el desarrollo de su propio lenguaje pictórico, construido en experiencias anteriores futuristas, cubistas y metafísicas.
En sus obras de la época, se nota la proximidad de Carlo Carrá y Giorgio Morandi, la admiración por Paul Cézanne y el Quattrocento toscano, que utiliza una técnica, la preparación de la mezcla de color, fig látex como aglutinante para témpera.
Su obra se desarrolló en un cierto estilo primitivista y arcaizante, inspirado en Masaccio, con una temática basada en los barrios obreros de Florencia, descritos con una cierta visión metafísica.
Los temas de las pinturas hacen referencias a la realidad y al hombre, son naturalezas muertas, paisajes y composiciones con figuras. La muerte de su padre, que se suicidó por la deuda, en 1922, le obligó a trabajar en el taller de carpintería de la familia para enderezar su difícil situación económica, frenando su producción de pinturas.
Ottone Rosai finalmente alcanza el éxito esperado en 1932 con el equipo de su ciudad natal, en la Galería del Palazzo Ferroni.
En 1933, Ottone Rosai firmar el "Manifiesto Realista", en oposición al idealismo de los gentiles, cartel que pone de relieve la cultura y el arte fascista, pero pinta retratos de la humanidad retórico de "perdedores".
En 1939 fue nombrado profesor de la figura de dibujo en la Escuela de Arte y en 1942 fue nombrado profesor de pintura en la Academia de Florencia.
Empleó fuertes claroscuros, con personajes de tipo geométrico y aspecto leñoso, con cierto aire caricaturesco, envueltos en un ambiente un tanto abstracto.
Este aire de abstracción, de atmósferas flotantes, se intensificó tras la Segunda Guerra Mundial , donde deja a un lado los intensos y dramáticos retratos por grandes paisajes impregnados de de luz y escenas de la vida cotidiana que se reproducen en una dimensión suspendida a partir de mezclas de colores densos, temas ya tratados.
Seguro y orgullosos de su arte, Ottone Rosai participado en exposiciones colectivas en Milán, en el '46 y en el '47 y valientemente se abre una exposición personal en Roma.
Muerte
Muere el 13 de mayo de 1957, Ivrea, Italia.