Emín Arslán

escritor y periodista libanés

Emín Arslán (en árabe: أمين أرسلان Amīn Arslān), (13 de julio de 1868 - 9 de enero de 1943) fue un escritor y periodista libanés que se desempeñó como cónsul general del Imperio Otomano en las ciudades de Burdeos, Bruselas, París y Buenos Aires. Fue autor de libros y artículos en árabe y en español, además de numerosos artículos periodísticos en francés.

Emín Arslán
Información personal
Nombre en árabe أمين مجيد أرسلان Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacimiento 13 de julio de 1868 o 1873 Ver y modificar los datos en Wikidata
Choueifat (Líbano) Ver y modificar los datos en Wikidata
Fallecimiento 9 de enero de 1943 Ver y modificar los datos en Wikidata
Buenos Aires (Argentina) Ver y modificar los datos en Wikidata
Sepultura Cementerio de la Chacarita Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacionalidad Otomana y argentina
Religión Islam Ver y modificar los datos en Wikidata
Educación
Educado en Universidad de San José de Beirut Ver y modificar los datos en Wikidata
Información profesional
Ocupación Político, diplomático, escritor, editor, journal editor, periodista, journal editor y journal editor Ver y modificar los datos en Wikidata
Cargos ocupados Embajador del Imperio otomano Ver y modificar los datos en Wikidata
Partido político Comité de Unión y Progreso Ver y modificar los datos en Wikidata
Firma

Fue partidario originalmente de las ideas de los Jóvenes Turcos, que procuraban reformar el Imperio Otomano de modo que se restablecieran la Constitución de 1876 y el parlamento y se respetaran los derechos de los ciudadanos y las comunidades nacionales que integraban el Imperio.

En 1914, desde la capital federal de la Argentina, se enemistó con el partido joven turco (ya en el poder a través del Comité Unión y Progreso) debido a la alianza con el Imperio Alemán y la entrada de los otomanos en la Primera Guerra Mundial, que Arslán criticaba duramente.

Fue también uno de los primeros en denunciar el exterminio de los armenios desde las páginas de su revista, La Nota, en agosto de 1915, así como en 1896, desde la prensa europea había denunciado las llamadas masacres hamidianas.[1]

Terminada la Primera Guerra Mundial apoyó inicialmente la conformación del mandato francés sobre Siria y Líbano, pero a medida que fue prolongándose y convirtiéndose, según su opinión, en una forma de colonización corrupta y despótica, adhirió a la idea de la independencia de la Siria histórica, entendida como la superficie comprendida por las actuales Siria, Líbano, Palestina e Israel.

Orígenes

editar
 
Firma de Emín Arslán en caracteres arábigos.

Nació en Choueifat, en la Gobernación del Monte Líbano del entonces Imperio Otomano, en el seno de una distinguida familia de confesión drusa, cuyos miembros usan hasta hoy el título de “emir”. Estudió en la Yasū‘iyya (escuela de los jesuitas de Beirut) y en la Madrasat al-Ḥikma.

Carrera política en el Líbano

editar
 
En colorado: "Mutaṣarrifiyya" de Monte Líbano, Provincia de Beirut, en 1893. Las flechas indican las ciudades de Trípoli, Beirut y el lugar natal de Arslán, Choueifat.

Hacia el año 1892 es designado mudīr de la región del Extremo Oeste (Nāḥyat al-Ġarb al-Aqṣā), perteneciente a la Mutaṣarrifiyya de Monte Líbano, ubicada a su vez en la provincia de Beirut. En 1893 renuncia y marcha al exilio tras chocar con la administración otomana, especialmente con el mutaṣarrif Na‘ūm Pāšā (Naúm Pashá), debido a la proximidad de Arslán con las ideas de la Joven Turquía. El 24 de agosto de 1889 había ingresado en una logia masónica perteneciente al Gran Oriente de Francia en el Líbano.[2]

Exilio en Francia

editar

En 1893 Arslán renuncia a su cargo de mudīr y en compañía de su amigo Salim Sarkís marcha al exilio. Luego de hacer una breve escala en Egipto se instalan en París. Allí, junto con otros árabes partidarios de las ideas de los Jóvenes Turcos fundan el "Comité Turco Sirio".[3]​ Entran en contacto con Ahmed Rıza, principal dirigente turco de esa misma corriente en el exilio y director del periódico en idioma turco Meşveret. La actividad principal de los exiliados es difundir, desde la prensa europea en general y desde algunos órganos partidarios fundados por ellos, fuertes críticas al régimen del Sultán, al que exigían el fin del despotismo, la restauración de la Constitución otomana de 1876, la reapertura del Parlamento y el reconocimiento de derechos iguales a los ciudadanos y a las comunidades que integraban el Imperio.

Las autoridades otomanas presionaban sobre las de la Tercera República Francesa para intentar que censuraran o limitaran la difusión de los comunicados y órganos del Comité Turco Sirio, que además de circular en Europa ingresaban de forma ilegal dentro de los límites del Imperio Otomano.

Revista "Kashf an-Niqāb"

editar

Kashf an-Niqāb (كشف النقاب), es decir "el descorrimiento del velo", fue un periódico en árabe editado en París por Emín Arslán y su amigo el escritor y periodista Salim Sarkís. El primer número vio la luz el 9 de agosto de 1894.[4]​ El último número se publicó el 25 de julio de 1895.[5]

Según Sarkís las autoridades francesas, a instancias de las otomanas, impidieron que esta revista se siguiera publicando en París y ordenaron al encargado del edificio donde estaba su redacción (número 21 de la calle Valette) que informara los nombres de los visitantes.[6]

Revista "Turkiyā al-Fatāt"

editar

Turkiyā al-Fatāt (تركيا الفتاة) – La Jeune Turquie, es decir "La Joven Turquía", fue una revista quincenal bilingüe, en árabe y francés, editada entre diciembre de 1895 y mediados de 1897 por Emín Arslán y Ḫalīl Ġānim (خليل غانم) en París, en nombre del "Comité Turco Sirio".[7]​ En la portada se presentaba como "periódico de propaganda política" y abundaba en críticas contra el régimen del sultán Abdul Hamid II.

Actuación en la prensa de París

editar

En 1896 Arslán escribió cuatro artículos que fueron publicados en La Revue Blanche de París, titulados “Les Affaires de Crète”, “Les Affaires d'Orient”, “Les Troubles de Syrie” y “Les Arméniens à Constantinople”.[8]​ En este último Arslán se refiere a la toma del Banco Otomano por parte de militantes armenios en Estambul y a la brutal represalia contra la población armenia de la capital. En el artículo se transcribe un comunicado del Dashnaktsutiun y se reprocha a aquellos franceses que critican la toma pese a ser herederos de los que tomaron la Bastilla.

Entre otros intelectuales de la época, Arslán frecuenta a Jules Claretie, que lo nombra en algunas de sus obras. Juntos concurren al congreso de la prensa europea en Estocolmo en 1897.[9][10]

La "tregua" con el enviado del sultán

editar

Las actividades de los exiliados en Europa por medio de la prensa causaron gran preocupación en el gobierno otomano, que no ahorraba esfuerzos para neutralizar la acción propagandística y conspiratoria de los opositores.

En mayo de 1896 el embajador otomano en París sobornó a funcionarios franceses para que le permitieran interceptar la correspondencia de Arslán. Las piezas postales y un informe de un oficial de policía de apellido Ducas revelaron por ejemplo que Arslán, en representación del Comité Unión y Progreso, intentaba mediar entre éste y comités armenios para concertar un accionar común.[11]

Aunque no fueran muy numerosos, los exiliados lograban una presencia considerable en los diarios. Incluso el 29 de enero de 1897 lograron que un comunicado se publicara en el Boletín Oficial del Reino de Italia, dirigido a “las seis potencias firmantes de los tratados de París y Berlín”, firmado entre otros por “Murād Bey, delegado general de la Joven Turquía; Ḫalīl Ġānim, ex diputado por Siria al parlamento turco; Ahmed Rıza Bey; el Emir Emín Arslán; H. Anthony Salmoné”, etc., en representación del “partido de las reformas generales en Turquía”. En el comunicado se reprochaba al régimen del Sultán la falta de ejecución de las reformas prometidas al pueblo y a las demás potencias de Europa veinte años antes. Describía al régimen otomano como signado por “pérdidas territoriales, estragos, miseria, abatimiento moral y ruina material”.[12]

El gobierno otomano finalmente envió a un hombre de la mayor confianza del Sultán, Ahmed Cemâluddîn, con la misión de ponerse en contacto con los opositores y ofrecerles una amnistía general a los presos políticos, el reingreso a los puestos oficiales que hubieran desempeñado los exiliados y el restablecimiento de la constitución. A cambio, la Sublime Puerta exigía el fin de la campaña opositora en Europa.[13]

Arslán sostiene en sus memorias que inicialmente se opuso al acuerdo a pesar de que parte de su familia se beneficiaría con la amnistía prometida. Luego propuso dejarlo en suspenso hasta tanto Estambul mostrara el cumplimiento de su parte del acuerdo, cosa que Cemâluddîn rechazó. Finalmente Arslán accedió, logrando ser nombrado cónsul en Europa para evitar quedar dentro del alcance del Sultán en caso de que éste se arrepintiera y optara por recurrir a represalias.[13]

Las promesas del Sultán fueron cumplidas con excepción del restablecimiento de la constitución, que debió esperar hasta la revolución de 1908.

Consulado general en Bélgica

editar

A raíz de la “tregua” de 1897, Emín Arslán es nombrado cónsul del Imperio Otomano primeramente en Burdeos (un cargo que probablemente no haya llegado a asumir) y luego cónsul general en Bruselas, donde ejerció funciones hasta 1908.

Durante su estadía en Bélgica traba amistad con intelectuales como el escritor y periodista Roland de Marès (1874 – 1955), director del diario L'indépendance belge, y Ernest Nys, jurista especializado en Derecho Internacional.

A pesar del ingreso a la burocracia otomana Arslán mantiene su posición crítica frente al régimen y publica algunos cuestionamientos a través de la prensa en inglés.

En 1903 muere en Bruselas el príncipe Dāmād Maḥmūd, fuerte opositor al régimen de Abdul Hamid II y vinculado con los Jóvenes Turcos. El embajador otomano encarga a Arslán que selle el domicilio del difunto y confeccione un inventario de su contenido, oportunidad que aprovecha para hacer desaparecer documentación que ponía en peligro a partidarios de los Jóvenes Turcos.[14]

La única novela que escribió Arslán en castellano, "Final de un idilio", está ambientada en Bruselas poco antes de la Primera Guerra Mundial y trata de la relación entre Van Doren, un aristócrata oficial del ejército belga y la joven Riette, de origen más humilde. La primera de sus cuatro ediciones data de 1917.

Revolución de los Jóvenes Turcos: Estambul

editar
 
Tarjeta postal sobre la nueva constitución del 24 de julio de 1908, escrita en griego, en turco otomano y en francés. El retrato es de "Enver Bey", luego conocido como Enver Pashá. Al principio, la revolución despertaba grandes expectativas en las comunidades minoritarias del Imperio Otomano.

En agosto de 1908 Arslán renunció como cónsul general del Imperio Otomano en Bélgica y viajó a Estambul con el objeto de tomar parte en los acontecimientos políticos que habían comenzado un mes antes, con la Revolución de los Jóvenes Turcos. Estos habían tomado el gobierno pero sin deponer al Sultán Abdul Hamid II, una decisión que Arslán lamenta en sus memorias.

Durante el contragolpe de abril de 1909, tras cuyo fracaso el Sultán es depuesto y reemplazado por Mehmed V, un primo hermano de Arslán llamado Muḥammad Muṣṭafā Arslān, diputado por Latakia, cae abatido frente al Parlamento. Emín debe ocuparse de recuperar el cadáver y arreglar su transporte a Beirut. El diario francés Gil Blas publica el jueves 15 de abril de 1909, en su segunda página, que "el Emir Arslán, diputado por Latakia" ha sido asesinado frente al Parlamento, por lo cual en Europa se da erróneamente por muerto a Emín.[15]

Cónsul general en París

editar

Hacia 1910 y por pocos meses Emín Arslán se desempeña como cónsul general del Imperio Otomano en París.[16]

En sus escritos autobiográficos Arslán sostiene que buscó un destino alternativo a pesar de que el puesto era muy codiciado, sin precisar las razones por las cuales no quería permanecer en ese destino. En todo caso, el superior inmediato de Arslán era el embajador Na‘ūm Pāšā, que había sido mutaṣarrif de Monte Líbano mientras Arslán era mudīr de su localidad natal en 1893 y con quien no había tenido buenas relaciones.[17]

Enterado del reciente establecimiento de relaciones consulares entre el Imperio Otomano y la República Argentina, Arslán pide y logra el traslado a este último país.

Buenos Aires

editar
 
Muestra de los tres idiomas en que publicó el Emir Emín Arslán. Arriba, en francés, en la Revue Blanche (1896). Abajo a la izquierda, en árabe, introducción a su tratado sobre Derecho Internacional. A la derecha, fragmento de un artículo en La Nota, 1916. También estudió turco, pero no dejó escritos en ese idioma.

Cónsul general del Imperio Otomano

editar

El 11 de junio de 1910, el Imperio Otomano y la República Argentina firmaron en Roma un protocolo de relaciones consulares. Intercambiaron cónsules sin esperar a que dicho protocolo fuera aprobado por los respectivos parlamentos (la aprobación argentina se produciría por ley 8184, aprobada recién el 2 de septiembre de 1911).[18]

El Emir Emín Arslán fue el primer y único cónsul que el Imperio Otomano habría de designar ante la República Argentina, antes de encomendar su representación al cónsul general del Imperio alemán.

Arslán llegó al puerto de Buenos Aires el 29 de octubre de 1910 a bordo del vapor Chili, de la compañía naviera francesa Messageries Maritimes. El buque provenía de Burdeos; pero Arslán lo había abordado en Lisboa, ya que al terminar sus funciones como cónsul general en París había viajado a España. En el momento de embarcar se vivían en Portugal las tensas horas de la caída de la monarquía.

Antes de llegar a Buenos Aires, el Chili hace escala en Río de Janeiro, donde llegan al barco diarios argentinos de las semanas anteriores. Otros pasajeros comentan a Arslán que en el Senado argentino se ha cuestionado a la “colonia siro-otomana”, es decir la colectividad de habla árabe, entre otras razones por estar supuestamente integrada por vendedores ambulantes en lugar de agricultores, es decir por elementos poco útiles. Frente a esta posición, sostenida por el senador bonaerense Manuel Láinez, había salido en defensa de los inmigrantes el senador riojano Joaquín V. González. La sesión había sido el 12 de septiembre de 1910. Arslán llega a Buenos Aires el 29 de octubre ya enterado de la situación, por lo que en sus primeros reportajes anticipa al periodismo que uno de los objetivos de su gestión será encauzar a la colonia otomana hacia la agricultura. Días después visita al senador González para agradecerle su posición en el Senado. Se hace acompañar por un traductor, que resulta innecesario pues tanto Arslán como Joaquín V. González hablaban fluidamente el francés. Comienza entonces una amistad que sólo terminará con el fallecimiento de González en diciembre de 1923.[19]

Había llegado a la Argentina sin conocer el idioma español, por lo que al principio fue asistido por Wadi Schamún, editor propietario del periódico Assalam, en sus funciones.[20]​ Al poco tiempo, publica en castellano sus primeros artículos en la revista Caras y Caretas e inicia la escritura de la novela "Final de un idilio". En la "dedicatoria al general Roca" con que empieza la novela, Arslán revela que redactó partes del libro en la Estancia La Larga, perteneciente a Roca. El entonces expresidente de la Nación falleció en 1914 antes de que pudiera concretarse una segunda visita a la estancia. La primera edición de la novela se publicaría en 1917.

Durante sus funciones como cónsul general publica en la Revista Argentina de Ciencias Políticas, dirigida por Rodolfo Rivarola, los siguientes artículos: “La joven Turquía y Europa” (t. II, p. 200-215, 1911), “La Tripolitania” (t. III, p. 177-187, 379-390, 1911) e “Historia diplomática de la Europa Balcánica” (t. VI, p. 635-666, 1913).[21]

 
Arslán por Zavattaro (Mario Zavattaro, 1876-1932), en Caras y Caretas del 12 de noviembre de 1910, página 68, días después de su arribo a Buenos Aires. Al pie de la caricatura dice: "Hace unos días que vino acá // y de este modo, con su llegada // ya está Turquía representada // ¡gracias a Alá!"

Fin del consulado en Buenos Aires y condena a muerte en ausencia

editar

Arslán se opone fuertemente a la entrada del Imperio Otomano en la Primera Guerra Mundial, por lo que su relación con Estambul se torna insostenible hacia fines de 1914.

El Imperio Otomano decide encomendar sus relaciones consulares con la República Argentina al cónsul general del Imperio Alemán, Rodolfo Bobrik. Este reclama entonces a Arslán que le entregue toda la documentación del consulado otomano en Buenos Aires, pero aquel manifiesta que no ha recibido ninguna notificación oficial del Gran Visir que le permita nada menos que entregar el consulado a un funcionario extranjero. El cónsul alemán lleva el reclamo hasta la Corte Suprema de Justicia de la Nación, que entiende en la causa con jurisdicción originaria y exclusiva por tratarse de un pleito entre agentes diplomáticos extranjeros.[22]​ La Corte falla finalmente en favor de Bobrik.[23]

En junio de 1916, a través de la revista literaria La Nota, fundada y dirigida por él mismo, Arslán reflexiona sobre la condena a muerte en ausencia que se le ha dictado en el Imperio, tras declararlo “firārī”, es decir prófugo o rebelde. Los compañeros de la redacción le organizan un desagravio en una cantina llamada "Ferrari".[24]

Fundación y dirección de la revista La Nota

editar

El 14 de agosto de 1915 se publicó el primer número del semanario La Nota, fundada por Emín Arslán y dirigida por él hasta el número 272. Durante 1916 se desempeñó como jefe de redacción el escritor Carlos Alberto Leumann. Se publicaron 312 ediciones, hasta 1921.[25]

Fue una de las revistas literarias más importantes de su época:

  • La Nota es una revista literaria de imprescindible consulta: basta recordar a quienes colaboraron con trabajos inéditos, comentarios bibliográficos, crítica de arte, música y teatro. Colaboradores permanentes fueron Emilio Becher, Juan Pablo Echagüe, Martín Gil, José Ingenieros, Leopoldo Lugones, Ricardo Rojas, José E. Rodó, Eduardo Talero, Manuel Ugarte, Joaquín de Vedia, Joaquín V. González, Alfredo L. Palacios, Franciso Grandmontagne, Víctor Pérez Petit. Cumpliendo con los propósitos enunciados en el primer número, las páginas de La Nota fueron una tribuna abierta “a todos los intelectuales del Río de la Plata”. En incompleta reseña, citaremos aquí algunos nombres: Charles de Soussens, Arturo Marasso, Carlos Ibarguren, Fernández Moreno, Carlos A. Leumann, Ataliva Herrera, Julio V. González, Enrique Banchs, Arturo Capdevila, Alfonsina Storni, Evar Méndez, Mario Bravo, Alfredo R. Bufano, Alberto Mendióroz, José Gabriel, Pablo Rojas Paz, Alberto Gerchunoff, Juan Carlos Dávalos, Ricardo Güiraldes, Roberto Mariani, Antonio Herrero, Ricardo E. Molinari y Enrique Méndez Calzada.[26]
  • Recordemos que en sus páginas firmaban como colaboradores figuras de indudable valor y prestigio en el ámbito de la cultura argentina e hispanoamericana; destacamos, entre otros, a José Ingenieros, Joaquín V. González, Leopoldo Lugones, Carlos López Buchardo, Ricardo Rojas, José Enrique Rodó, Francisco Sicardi, Joaquín de Vedia, Juan Zorrilla de San Martín y Rubén Darío.[27]

La Nota, cuya publicación abarca gran parte de la Primera Guerra Mundial tenía un tono fuertemente hostil hacia la posición alemana. Por ejemplo, el poema "Apóstrofe", de Almafuerte, una verdadera diatriba contra el emperador Guillermo II, apareció en dos oportunidades diferentes: los días 15 de enero y 5 de febrero de 1916 (números 23 y 26, año II).[27]

En esta revista publicó muchos de sus primeros trabajos en poesía y en prosa Alfonsina Storni a partir de 1916. Fue colaboradora permanente entre el 28 de marzo y el 21 de noviembre de 1919.[28][29][30]​ Entre otros, publicó los poemas “Convalecer” y “Golondrinas”.

Miguel de Unamuno, en una carta a Pedro Jiménez Ilundain, del 20 de febrero de 1916, escribió: "Leo bastante y escribo algo, casi todo sobre la guerra, especialmente para la Argentina, en La Nación y en La Nota (¿conoce usted este semanario?)" .[31]​ También calificó a La Nota como "una revista interesante, y francamente germanófoba".[32]

Adopción de la nacionalidad argentina

editar

En 1921, producida la desintegración del Imperio Otomano, Arslán adoptó la nacionalidad argentina, algo que ya tenía en mente mientras se desarrollaba la Primera Guerra Mundial. Según explicó:

(...) ya había resuelto retirarme de la política y residir en la Argentina hace siete años. La razón es muy sencilla y la expresé al Gran Visir en mi memorando citado: era que, tanto si triunfaba Alemania como si era derrotada, nosotros seríamos los derrotados. Puesto que nuestra victoria nos convertiría en sus subalternos y su derrota habilitaría el desmantelamiento de nuestra unidad para convertir nuestro país en un conjunto de colonias. Y que yo antes que ser súbdito de una colonia prefería ser ciudadano de un estado respetado, especialmente si estaba dotado de una posición tan ilustre como el estado argentino.[33]

Fundación y dirección de la revista El Lápiz Azul

editar
 
La Revolución Siria contra el Mandato Francés (edición de autor, Buenos Aires, 1926).
 
Mausoleo del Emir Emín Arslán, Cementerio de la Chacarita.

En 1925 Arslán fundó la "revista semanal humorística, política y literaria" El Lápiz Azul. Su secretario de redacción era el docente y escritor Celso Tíndaro (pseudónimo de Pedro B. Franco, 1894 - 1947). Se publicaron 47 números, entre mayo de 1925 y mayo del año siguiente. Incluyó colaboraciones de Leopoldo Lugones, Alberto Williams, Eugenio d'Ors y Eduardo Acevedo Díaz.[34][35]

Fundación y dirección de la revista al-Istiqlal

editar

En junio de 1926 Arslán fundó el periódico Al-Istiklal (الإستقلال), es decir La Independencia, cuyo texto salía enteramente en idioma árabe, aunque parte de los avisos comerciales estaban en español. Desde sus páginas defendía la independencia de Siria frente al mandato francés. Representaba una respuesta política e intelectual a la convulsión causada por la Gran Revolución Siria.[36]

Siguió publicando este medio hasta su muerte en enero de 1943.[37]

Fundación de la Sociedad Drusa de Beneficencia

editar

En 1926 Arslán fundó la Sociedad Drusa de Beneficencia, hoy conocida como Asociación de Beneficencia Drusa.[38]​ La institución conserva en su sede libros que fueron propiedad del fundador.

Reconocimientos

editar
Es necesario insistir sobre la originalidad de este autor en el contexto argentino de las primeras décadas del siglo XX. Arslán aporta una mirada genuina y testimonial que ilumina ciertos aspectos de la vida oriental. Este es un hecho único para la época. Es el primer escritor musulmán popularmente reconocido, en un segmento inmigratorio que aún no contaba con figuras públicas visibles. Aunque muchos de sus escritos son discutibles en sus aspectos históricos y políticos, tienen el valor insoslayable de haber militado por el debate público en torno a sucesos orientales que hasta entonces fueron solo ocasionales entre la élite letrada nacional ―pensemos en Estrada o en Capdevila―, pues el conocimiento de los mismos era amateur e incompleto (…) Su educación y cultura privilegiada lo situaron pronto en el centro del universo cultural argentino de aquellas décadas, oficiando de nexo vital entre su identidad cultural de origen y el país que lo recibe. Pero su persona y su pluma no pueden reducirse a un único sustrato cultural, sus sedimentos intelectuales eran múltiples y complejos: druso, libanés, musulmán, turco, francófilo, versado en la cultura europea universal, americano por adopción, etcétera. La suma de todos estos elementos era mucho más que el aporte cultural de cada uno de estos componentes por separado. Fueron todos factores indispensables para comprender su gran curiosidad intelectual, viva y en ebullición, marcadamente libre y cosmopolita. Su elevada educación bifronte, oriental y europeísta, facilitó su incorporación al medio intelectual argentino.
Axel Gasquet[39]
editar
 
La Playa El Emir, en Punta del Este, debe su nombre al Emir Emín Arslán
  • El Emir Arslán aparece como personaje del cuento fantástico “El puñal”, de Leopoldo Lugones, que integra el volumen “Cuentos fatales” (1924).
  • Es retratado, en forma mayormente ficcional, en un episodio de la historieta "Roma & Lynch”, de Lautaro Ortiz y Pablo Tunica, publicada en la Revista Fierro.[40]
  • Arslán comenzó a veranear en el balneario uruguayo de Punta del Este poco después de su llegada al Río de la Plata, en 1910. En 1920 encomendó al arquitecto francés Eduardo Le Monnier la construcción de una casa rústica, de una planta, hecha en piedra y con techos de paja, que denominó “La Chaumière”. Se encontraba en la “Manzana 26, lotes b, c, d y e” de dicha localidad. La Manzana 26 (Zona Censal 206) está rodeada por las actuales calles Muergos, Los Arrecifes, Resalsero y Rambla General Artigas. Hasta la actualidad la playa contigua se denomina “El Emir”.[41]
 
Los secretos de los palacios (El Cairo, 1897). Ejemplar donado por Arslán a la Biblioteca Nacional de Francia.
  • Historia de Napoleón I (en árabe), 1892
  • Los secretos de los palacios (en árabe), 1897;[42]​ traducido al español en 2023.[43]
  • Derechos de las naciones y convenios de los estados (en árabe), 1900[44]
  • La verdad sobre el harem (en español), 1916
  • Final de un idilio (en español), 1917
  • Recuerdos de Oriente (en español), 1918
  • La revolución siria contra el mandato francés (en español), 1926
  • Memorias (en árabe), 1934
  • Misterios de Oriente (en español), 1935
  • La verdadera historia de las desencantadas (en español), 1935
  • Los Árabes, reseña histórico-literaria y leyendas (en español), 1941

Obras inéditas

editar
 
Portada de las "Memorias" de Emín Arslán, edición de autor, Buenos Aires 1934

En distintas ediciones de las obras de Arslán se enumeran obras teatrales inéditas, que están perdidas:

  • La sultana (en 4 actos)
  • El Libertador (la vida de San Martín, un prólogo y 4 actos).
  • El amor en la diplomacia (3 actos)
  • Estaba escrito (3 actos)

Referencias

editar
  1. “El cónsul otomano en Buenos Aires y el genocidio armenio”, por Pablo Tornielli. Revista "Todo es Historia", año XLVII, número 576, julio de 2015, páginas 26-27.
  2. «Grand Orient Arabe Œcuménique (G.O.A.O.)». Archivado desde el original el 26 de febrero de 2017. Consultado el 30 de marzo de 2017. 
  3. Arabs and Young Turks : Ottomanism, Arabism, and Islamism in the Ottoman Empire, 1908-1918, por Hasan Kayalı, University of California Press, Berkeley 1997, página 42.
  4. أعداد أولى لدوريات مجهولة . "كشف النقاب" الباريسية Archivado el 13 de febrero de 2017 en Wayback Machine., por Jean Daya, Al-Hayat, 26/6/1999, consultado el 25/11/2014
  5. Arabic Newspapers - K Archivado el 2 de diciembre de 2014 en Wayback Machine.. British Library.
  6. France and the Sultan. To the Editor of The New York Times. New York Times, 7 de septiembre de 1901, consultado el 15 de marzo de 2015.
  7. Libertarian Movements in the Ottoman Empire 1878-1895, Şerif Arif Mardin, Middle East Journal, Vol. 16, No. 2 (Spring, 1962), p. 176.
  8. La Revue Blanche (1896), vol. X y XI, primer y segundo semestre, París. Slatkine Reprints, Genève 1986.
  9. Claretie, Jules, prólogo a “Sarcey, Francis, Quarante Ans de Théatre (Feuilletons dramatiques)”, Bibliothéque des Annales Politiques et Littéraires, París 1900, p. 2.
  10. Claretie, Jules, (1910), “Quarante ans Après; Impressions d'Alsace et De Lorraine, 1870-1910”, Bibliothéque-Charpentier, París 1910. Páginas 103-105
  11. «Hanioğlu, M. Şükrü, The Young Turks in Opposition, Oxford University Press, Nueva York 1995, ISBN 9780195358025, página 49». Consultado el 30 de marzo de 2017. 
  12. Gazzetta Ufficiale del Regno d'Italia, Roma, viernes 20 de enero de 1897, n.º 23, p. 540.
  13. a b Arslán, Emín, “Recuerdos de Oriente”, segunda edición, Talleres Gráficos La Lectura, Buenos Aires, 1918, páginas 211-212
  14. La historia de los papeles de Dāmād Maḥmūd y la actitud de Arslán fue publicada el jueves 27 de agosto de 1908 en el diario parisino Le Temps, en Gil Blas del mismo 27 de agosto, página 3, columna 1, bajo el título "Histoire des papiers de Mahmoud pacha", y en Pro Armenia del 5 de septiembre de 1908, página 7, columna 3, bajo el título "L'Inutilité de l'Espionnage".
  15. Arslán, Emín, “Recuerdos de Oriente”, segunda edición, Talleres Gráficos La Lectura, Buenos Aires, 1918, página 117.
  16. Le Temps del 16/09/1909, página 3, anticipa que el próximo titular del consulado general otomano será el antiguo cónsul en Bruselas, el Emir Emín Arslán
  17. Nweihed, Kaldone,“Al-Amīr Amīn Arslān, nāšir ṯaqāfat al-‘arab fī-l-Arğantīn”, Dār al-Istiqlāl, Beirut 2010. ISBN 978-9953-570-00-6, página 64.
  18. Ley 8184 de la República Argentina por la cual se aprueba el establecimiento de relaciones consulares con el Imperio Otomano.
  19. “El primer cónsul turco-otomano en la Argentina. La amistad de Emín Arslán y Joaquín V. González”, por Pablo Tornielli. Revista "Todo es Historia", año XLVII, número 572, marzo de 2015, páginas 6-19.
  20. Botta, Paulo. «Las relaciones diplomáticas y consulares entre la República Argentina y el Imperio Otomano». Consultado el 4 de octubre de 2024. 
  21. Revista Argentina de Ciencias Políticas - Estudio e Índice General 1910 – 1920 Archivado el 4 de marzo de 2016 en Wayback Machine., publicación de la Academia Nacional de Ciencias Morales y Políticas, ISSN 0325-4763, Buenos Aires, 2008.
  22. El asunto del cónsul otomano ante la Suprema Corte Archivado el 19 de noviembre de 2015 en Wayback Machine.. Texto de la demanda del cónsul alemán y la contestación del cónsul otomano, publicado en La Nota
  23. Corte Suprema de Justicia de la Nación, Fallos 122:129 (1915), “Bobrik, Rodolfo, cónsul general de Alemania c/ Arslan, Emir Emin, cónsul general de Turquía”.
  24. La Nota, Buenos Aires, 10 de junio de 1916, "Reflexiones de un condenado a muerte", n.º 44, p. 862 – 863 y "Una condena festejada con un banquete".
  25. Revista La Nota: antología 1915-1917, Verónica Delgado (editora). Universidad Nacional de la Plata, 2010. ISBN 978-950-34-0679-3.
  26. Las revistas literarias argentinas 1893-1967, Héctor Lafleur, Sergio Provenzano, Fernando Alonso. Buenos Aires 2006. Ed. El octavo loco, p. 80, ISBN 987-22685-1-7
  27. a b La problemática textual en la poesía de Almafuerte, por María Minellono, Universidad de Poitiers, Centre de Recherches Latino-Américains, Introducción, página XXXII
  28. Periodismo y tecnologías de género en la revista La Nota, 1915 - 1918, por Tania Diz.
  29. Alfonsina Storni: Análisis y contextualización del estilo impresionista en sus crónicas, por Mendez, Claudia Edith
  30. Con la mira en la mujer futura Archivado el 28 de febrero de 2017 en Wayback Machine., por Soledad Quereilhac, La Nación, 20 de junio de 2014, consultado el 2 de septiembre de 2015.
  31. Epistolario americano (1890-1936), Miguel de Unamuno, Laureano Robles, Universidad de Salamanca, 1996
  32. Epistolario Miguel de Unamuno-Joaquín Montaner, Josefina de Tarín-Iglesias y Laureano Robles Carcedo, Cuadernos de la Cátedra Miguel de Unamuno, [S.l.], v. 35, p. 199-299, oct. 2009. ISSN 0210-749X
  33. Hombre de tres mundos. Para una biografía política e intelectual del emir Emín Arslán. Archivado el 12 de julio de 2020 en Wayback Machine., por Pablo Tornielli, Dirāsāt Hispānicas Revista Tunecina de Estudios Hispánicos, 2: 157-181. Institut Supérieur des Sciences Humaines de Tunis, Université de Tunis El Manar Archivado el 8 de noviembre de 2015 en Wayback Machine.
  34. Que sean libros en blanco: en torno a una encuesta del diario Última Hora sobre el libro nacional y su venta (febrero a junio de 1926), por Guillermo Gasió y Gabriela García Cedro. Buenos Aires, Teseo, 2011, pp. 152 - 153.
  35. El Lápiz Azul, catálogo de la biblioteca del Cedinci.
  36. María del Mar Logroño Narbona, The 'Woman Question' in the Aftermath of the Great Syrian Revolt: A Transnational Dialogue from the Arab-Argentine Immigrant Press, Al-Raida magazine, Volume XXIV, Nos. 116-117, Winter/Spring 2007, Institute for Women's Studies in the Arab World, Lebanese American University.
  37. Historia, leyendas y clichés del Oriente en la obra del Emir Emín Arslán, por Axel Gasquet
  38. «Crescent Over Another Horizon: Islam in Latin America, the Caribbean, and Latino USA, editado por María del Mar Logroño Narbona, Paulo G. Pinto, John Tofik Karam.». Consultado el 30 de marzo de 2017. 
  39. Gasquet, Axel (2016). El llamado de Oriente: Historia cultural del orientalismo argentino (1900-1950). Capítulo VIII: Eudeba. ISBN 9789502358987. Consultado el 18 de julio de 2017. 
  40. Fierro. La Historieta Argentina. Septiembre de 2007, N.° 11, páginas 52-55.
  41. Ponte, Cecilia y Mazzini, Andrés (2001), “Le Monnier en el Uruguay”, en “Le Monnier; arquitectura francesa en la Argentina”, Fundación CEDODAL, Buenos Aires 2001, p. 33, 34 y 181. ISBN 987-1033-00-1.
  42. Arslán, Emín (1897). «Asrār al-quṣūr : riwāyaẗ siyāsiyyaẗ tārīẖiyyaẗ ġarāmiyyaẗ adabiyyaẗ». Los secretos de los palacios (facsímil del texto completo) (en árabe). Gallica. Consultado el 30 de mayo de 2016. 
  43. Arslán, Emín (2023). Secretos en los palacios (Pablo Tornielli, trad.). Buenos Aires. ISBN 978-631-00-0747-2. Consultado el 29 de septiembre de 2023. 
  44. Arslán, Emín (1900). «Ḥuqūq al-milal wa-muʿāhidāt al-duwal. al-qism al-rābiʿ: al-ḥarb». Derechos de las naciones y convenios de los estados (facsímil del texto completo) (en árabe). Gallica. Consultado el 30 de mayo de 2016. 

Enlaces externos

editar