Estos strozzapreti, son la receta perfecta para aquellos a los que os gusta preparar vuestra propia pasta fresca, pero que no disponéis de máquina para hacerla, ya que es una pasta que se maneja fácilmente de forma manual. Los strozzapreti, cuya traducción significa "asfixia curas" (hay varias teorías que le dan nombre), en esta ocasión, llevan tomate en la masa, ya que les da color y permite un acompañamiento ligero, ya que también le aporta sabor. Son muy fáciles de hacer y entretenidos!!!!
INGREDIENTES PARA LOS STROZZAPRETI
500 gr harina de trigo
3 tomates pelados y picados
1 huevo
una pizca de sal
Tamizamos la harina y la colocamos en un cuenco, haciendo un hueco en el centro en forma de volcán. Incorporamos el huevo, la sal, y, poco a poco vamos vertiendo el tomate picado (conviene echarlo poco a poco ya que no todos los tomates son iguales de grandes o tienen la misma cantidad de agua, yo utilicé tres medianos) hasta que toda la harina esté incorporada, formando una masa homogénea que no se pegue en las manos.
Cortamos un cuarto de masa, el resto la dejamos tapada con un trapo para que no se seque, y la hacemos rodar a modo de cuerda. Cortamos porciones de unos 3 cm de largo y de unos 4 mm de ancho. Retorcemos cada porción a modo de tirabuzón. Así hasta acabar con toda la masa. Al principio tardaréis un poco, pero cuando le hayáis cogido el truco, será un momento. Vamos colocando las piezas sobre una base enharinada.
Ponemos a hervir agua en una olla con una pizca de sal. cuando hierva metemos la pasta. Las sacamos cuando salgan a la superficie (suelen ser unos 2-3 minutos).
INGREDIENTES PARA EL ACOMPAÑAMIENTO
50 ml de aceite de oliva
1 ramita de tomillo
125 gr de queso gorgonzola
parmesano rallado
En un bol ponemos el aceite y el tomillo en frío. Incorporamos la pasta, el queso gorgonzola, y 1/4 de agua de cocción de la pasta en caliente. Removemos y añadimos el parmesano rallado. Listo!!!!!