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viernes, 23 de diciembre de 2016

Por la vida entera en un instante, ¡Gracias!

   
                 
            Los profesores ingleses, en la Edad Media, pedían a sus alumnos que redactaran breves notas para felicitar a sus familias antes de las vacaciones de Navidad.

            Las felicitaciones, se hicieron costumbre social tanto en occidente como en oriente. Además, era importante felicitar los cumpleaños.

           Cuentan que el año pasado, en un Colegio Mayor de Irlanda,  los tutores asignaron a algunos estudiantes ciertos cometidos, entre ellos tener el detalle de felicitar, cuando llegara un cumpleaños. John y Peter, que terminaban  ese año la carrera, fueron  los encargados.

             Como ya están próximas las vacaciones de Navidad, sugirieron a los encargados que fueran adelantando las felicitaciones de cumpleaños que restaban hasta fin de año, sin olvidar la felicitación de Navidad. ¡No valía la disculpa de los móviles!

              Felicitaron a Nati, que nació el 25 y por eso la pusieron Natividad.

               -Oye, también Jesús, nació ese día, ¿no? 
               -Sí, claro.
               -Que te parece si le mandamos una felicitación.
               -No nos líes. Además a quien se la enviamos.
               -No hace falta enviarla. La hacemos y punto. Se la damos al Tutor y que haga lo que quiera.
               -Ahí tendremos otro problema.
               -¿Cual?
               -¿Son lo mismo Jesús y Manuel?
               -Buena pregunta, ¿por qué no buscamos? Saldremos de dudas y tal vez encontremos algo de interés.

             Buscamos en Internet.  Encontramos que un profeta llamado Isaías, había anunciado su nacimiento 750 años antes de que sucediera (Isaías,7,14).

              Las profecías o predicciones son algo que inquieta bastante.  Hay gente que duda que una persona sepa lo que va a ocurrir en el futuro. Está escrito. La profecía y su cumplimiento. No sé si deja de sorprendemos cuando sabemos que lo que predijo finalmente se cumplió.

                Pasado ese largo período de tiempo, llegó la duda a un hombre, carpintero, sobre su mujer: "Y José su marido, siendo un hombre justo y no queriendo difamarla, pensó abandonarla en secreto. Pero mientras pensaba en ello, se le apareció en sueños un ángel del Señor, diciendo: José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque el Niño que se ha engendrado en ella es del Espíritu Santo. Y dará a luz un hijo, y le pondrás por nombre JESÚS, porque salvará a su pueblo de sus pecados".

             Y el relato sigue sobre el niño nacido en Belén: "Todo esto aconteció para que se cumpliese lo que había dicho el Señor, por medio del profeta, diciendo: He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, y llamarán su nombre EMANUEL, que quiere decir, Dios con nos otros"(Mt.1,19-25).

           O sea que Jesús es la forma encarnada de "Dios con nosotros", aunque  entonces y ahora, no se entienda o se discuta: "la gente poderosa murmuraba/ -si el niño fuera Dios, jamás hubiera/ nacido así de pobre y desvalido-/. El grupo de pastores no dudaba, que el niño del portal no era cualquiera/ era el Hijo de Dios, el prometido".

            Que cada cual piense lo que quiera, aunque no deja de ser verdad lo que se afirma en ese poema Noche de pastores: "Nunca estrella existió mejor tratada/ ni como su sonrisa hubo ninguna/, ni cueva alguna tan iluminada/ ni tantos reyes nunca, ante su cuna/.

            Así que nos pusimos a  escribir.
      
           Querido Jesús niño, Dios con nosotros, encarnado en María, que naciste en Belén, un año más es tu cumple, aunque no tienes edad, porque el tiempo para ti no existe y después de dos mil años seguimos recordando tu nacimiento.  No sabemos, Manuel, cómo seguir. Tal vez decirte simplemente: Gracias por venir, gracias por nacer y por hacerte hombre para saber de lo que somos capaces los humanos, y transformar nuestra naturaleza en luz y poner nuestro corazón y nuestra tierra, en paz. ¡Seguro que puedes ayudar a que lo consigamos, Niño de Belén, y a que estemos donde estemos, todos vivamos como hermanos!
 
              Dejamos este deseo, el de la clase, el de la familia, y el mundo, ante tu cuna, en el Portal. Disculpa nuestra osadía, porque al acercarnos, asombrados descubrimos el mayor amor jamás imaginado, brillando en los ojos de un bebé indefenso.

              Llenos de ternura, nos inclinamos para hacerle una caricia con el alma.

               Dice nuestro Tutor que eso es "Apapachar", una palabra única, que lo encierra todo cuando sale de lo más profundo de uno mismo.

                Pues eso: ¡Gracias, de corazón porque tu nacimiento es la Navidad!

                 John y Peter

 PUBLICADO EN
 ESPERANDO LA LUZ 23-12-2016
   http://belmontajo.blogspot.com.es/2016/12/por-la-vida-entera-en-un-instante.html 
   
EL HERALDO DEL HENARES: 24-12-2016
http://www.elheraldodelhenares.com/pag/noticia.php?cual=33042

CIVICA, 02-01-2016:
http://www.investigadoresyprofesionales.org/drupal/content/por-la-vida-entera-en-un-instante-%C2%A1gracias

domingo, 20 de marzo de 2016

La Santa Sangre, no sale en procesión.

         El que escribe no pretende que el lector, de la religión que sea, crea o deje de creer lo que cuenta. Su compromiso consiste en no mentir, y exponer honradamente los hechos que narra. Su escrito y su libertad simplemente se ofrecen a la mente y por supuesto al corazón. Deja su relato a la puerta de su inteligencia emocional y a los pies de su fe y su libertad.

         Digo lo anterior, por lo que descubrí en un viaje por Europa. Era algo desconocido para mí  y tiene algo, o mucho, que ver con la Semana Santa.
 Plaza del Ayuntamiento, antiguo Palacio y capilla al fondo.
          Los medios de comunicación machaconamente insisten en imágenes y noticias que nos sitúan en el contexto de la Semana Santa. Voy a narrar no mi viaje, sino ese "encuentro" y el consiguiente recorrido por la leyenda hacia la Jerusalén del viernes Santo.

          Volvía de Alemania, por los Países Bajos hacia Bruselas. Nos detuvimos para visitar la encantadora ciudad flamenca de Brujas.  Mientras tomábamos una cerveza me chocó que alguien hablara, de que allí se encontraba la Basílica de la Santa Sangre. Confieso que en mi viaje anterior ni siquiera había visto esa iglesia. Que alguien, en el corazón de Europa diga que allí existe la Basílica de la Santa Sangre, sonaba tan extraño que la antena de la curiosidad se puso en movimiento, por el deseo de saber más.

           La oficina de turismo, como respuesta a la pregunta, entrega un folleto que indica que esa iglesia alberga una venerada reliquia de la sangre de Cristo, supuestamente recogida por José de Arimatea  y traída de Tierra Santa por Teodorico de Alsacia,  

           Una cosa es que una iglesia, se llame con un nombre, por ejemplo, Santiago, y otra que el santo esté en esa iglesia. Pues más raro aún me pareció, después de conocer el nombre de la basílica, que dijeran que en ella se encontrara una verdadera reliquia de la Santa Sangre de Cristo.

            Comencé a preguntar, indagar y leer lo que pude, y resumo mis pesquisas. José de Arimatea es un personaje que aparece en los  cuatro Evangelios en el contexto de la pasión y muerte de Jesús. Dicen que era discípulo de Jesús, pero, al igual que Nicodemo, lo mantenía  oculto por temor a las autoridades judías.  Poseía un sepulcro nuevo cavado en la roca, cerca del Gólgota, en Jerusalén.  Compruebo también que había dado la cara pidiendo a Pilatos el cuerpo de Jesús para enterrarlo. Concedido el permiso, descuelga al crucificado, con ayuda de Nicodemo, lo envuelve en una sábana limpia y deposita a Jesús en el sepulcro de su propiedad. Tras cerrarlo con una gran roca se marchan (Mt 27,57-60, Mc 15,42-46, Lc 23,50-53 y Jn 19,38-42).  En España hay "Pasos" que recrean estas escenas.

            El Nazareno, por los azotes, los clavos, la corona de espinas, la cruz y la lanza en el costado, había perdido mucha sangre. El aseo del cuerpo del difunto era una tradición, que incluso se mantiene hasta nuestros días. José lavó el cuerpo del difunto con agua y un paño.
(Casi escondida en el rincón de la plaza, está la iglesia.  Un detalle de la fachada alta)
         ¿Cómo llegó a Brujas algo de esa Sangre Santa? Entre los textos anteriormente citados y el otro personaje Thierry d´Alsace o Teodorico da Alsácia hay una distancia de más de once siglos.  Así que descubrir lo que sucedió, supera la historia. Tenemos que entrar en la leyenda o leyendas.
               Teodorico de Alsacia ciertamente existió. Nació en Francia en 1099. Era hijo del duque Teodorico II de Lorena y de Gertrudis de Flandes, hija a su vez del conde Roberto I de Flandes, y de Gertrudis de Sajonia. Fue conde de Flandes de 1128 a 1168.  Según la primera leyenda el habría traído la reliquia, en 1146 al volver de Tierra Santa.

             Era un caballero Cruzado emparentado con el rey de Jerusalén, dado el parentesco de su mujer Sibila de Anjou, que era hija de Fulco V de Anjou, rey de Jerusalén. Según los cronistas Teodorico después de ser reconocido Conde de Flandes, hizo cuatro viajes a Tierra Santa, desde 1139.          
   
            Cuando murió su padre Fulco, Balduino III tenía 13 años y el reino pasó a su madre Melisenda, hija de Balduino II. Con una mujer y un niño en el trono de Jerusalén, la situación política no era fácil. Había muchas ambiciones políticas en su entorno y no había un rey para dirigir al ejército.

              Las Cruzadas se convocaron para ayudar a liberar los Santos lugares. Teodorico participó en la Segunda Cruzada y, según esta versión, allí mismo el rey de Jerusalén, que no era otro que su cuñado Balduino III le entregó la reliquia, como recompensa por los grandes servicios prestados. Existían lazos familiares, pero al participar en la Cruzada, había también  razones para obtener ciertas concesiones o gratificaciones.

               Al regreso, trajo la reliquia a su país y la entregó, para ser depositada en la basílica, construida en el siglo XII como capilla, justo al lado de la residencia del Conde de Flandes (hoy ayuntamiento de la ciudad ).

              La Basílica tiene dos alturas. La capilla inferior, dedicada a San Basilio el Grande, es una oscura estructura románica que se conserva prácticamente en estado original. La reliquia se encuentra en la capilla superior, reconstruida en estilo gótico, y da nombre a la Basílica de la Santa Sangre. La parte visible de la basílica es la fachada. En ella, Teodorico es el guerrero dorado que está a la izquierda de la puerta.

               De aquí, de Brujas, parte también la leyenda del Santo Grial. El Santo Grial era la copa con la que Jesús celebró la última cena. En este caso la leyenda partiría de Felipe de Alsacia, que no es otro que el guerrero dorado que hay a la derecha de la puerta principal. Era hijo de Teodorico y que a su muerte le sucedió también como conde de Flandes. 

              Volviendo a la Basílica, el gran mural tras el altar mayor fue realizado en 1905. La parte inferior representa el traslado de la reliquia desde Jerusalén a Brujas. A la izquierda, Teodorico de Alsacia recibe la reliquia  de Balduino III rey de Jerusalén; a la derecha, arrodillado al lado de la condesa Sibila de Anjou,  entrega la reliquia al capellán. Hasta aquí el resumen esencial de la primera leyenda.

             Existe otra leyenda posterior que sitúa la llegada de la reliquia, años después, cuando Balduino IX, Conde Flandes, intervino en el saqueo de Constantinopla. El saqueo es un dato real e histórico, sucedió durante la Cuarta Cruzada convocada por el Papa Inocencio III. Balduino fue elegido gobernador de un nuevo estado y coronado Emperador en Santa Sofía, pero no hay constancia de que la reliquia viajara primero a Constantinopla, para desde allí ser traída a Brujas.

             La reliquia de Brujas

              Lo cierto es que la reliquia tendría un gran significado, tanto como testigo de la pasión y muerte de Jesús, como por ser un recordatorio perpetuo del mismo, por lo menos como la Sábana Santa.

             La reliquia es venerada en una ampolla o pequeña botella alargada, que contiene un trozo de tela con sangre de Jesucristo.  Según uno de los Evangelios apócrifos, José de Arimatea lo conservó con la Sangre de Cristo después de lavar el cadáver. Es guardada en un espléndido tabernáculo de plata.       

               La ampolla hecho de cristal de roca en el siglo XI o XII era como botella de perfume bizantina, fácil de transportar. Nunca se abrió hasta su llegada a Brujas. El cuello está decorado con cordón de oro y su tapa está sellada con cera. La ampolla está encapsulada en un cilindro de oro con frente de cristal cerrado a ambos extremos por coronas decoradas por ángeles.

              La innegable realidad es que está ahí y que el papa Clemente V, dio mucha importancia a la reliquia. De hecho emitió en 1310 una bula papal concediendo indulgencias a los peregrinos que visitaran la capilla, para ver la reliquia. 

             ¿Cuándo se puede visitar o venerar?

             Al menos un día a la semana, en la capilla superior tiene lugar un acto de veneración de la reliquia. Durante un instante puede uno acercarse al altar subiendo unos peldaños y contemplar e incluso tocar el delicado frasco, ante la atenta mirada de la persona encargada de protegerlo y descender por el otro lado.

            Además, cada año, el día de la Ascensión, se celebra la procesión de la Santa Sangre, una de las más importantes celebraciones religiosas de Bélgica. 

             Existe una Cofradía titulada Noble Hermandad de la Santa Sangre de Brujas. Esta Hermandad se encarga de su protección y veneración, y guarda los Archivos Históricos que hacen referencia a la reliquia y a la propia Hermandad. 

NOTA: Después de leer lo anterior se puede, como complemento, escuchar y ver el siguiente VÍDEO 

PUBLICADO EN
ESPERANDO LA LUZ, 20-03.2016:
http://belmontajo.blogspot.com.es/2016/03/la-santa-sangre-no-sale-en-procesion.html
EL HERALDO DEL HENARES, 20-03-2016:
http://www.elheraldodelhenares.com/pag/noticia.php?cual=29700
CIVICA,22-03-2016:
http://investigadoresyprofesionales.org/drupal/content/la-santa-sangre-no-sale-en-procesi%C3%B3n

sábado, 24 de octubre de 2015

Más importante que la religión, la ética.

         Pedro Sánchez se ha erigido en "portavoz de toda su generación" al decir textualmente: "La prioridad política de mi generación, entre otras, será reformar el Estado y convertirlo en laico. No significa ir contra la religión. No soy un radical que ponga en cuestión la creencia de nadie".  

          Para imponer la laicidad, el cabeza de lista del PSOE, quiere sacar  la Religión (como asignatura) de las aulas, en horario escolar, en todos los centros de enseñanza, tanto públicos como privados. Además propone modificar el Concordato con la Santa Sede para tener una educación laica. Y para ello quiere también, derogar la ley LOMCE y alcanzar una nueva legislación educativa. Concluye que hay que reducir la religión al ámbito privado, sin manifestaciones públicas.

          Cada uno es muy libre de opinar y decir lo que quiera. Pero ateniéndose a todas sus consecuencias.  Ser cabeza de lista de una fuerza política, no es ser representativo, como dice, de toda "mi generación", ni "sus prioridades".  Puede intentar "atraer al elector próximo a Podemos, pero es un error mayúsculo que le va a privar de los votos de amplios sectores de la sociedad española" (V. Prego).

          En todo caso, la pretensión presupone una reforma previa de la Constitución que garantiza a los padres el derecho a que eduquen a sus hijos conforme a sus convicciones religiosas y morales. No parece muy acertado comenzar una campaña anunciando "una ley mordaza" contra el art.27 de la Constitución y contra el art. 18 de los Derechos Humanos, que ampara a los ciudadanos.

          Meterse en tantos charcos al dar el primer paso, sin tener siquiera aún el programa, es difícilmente comprensible. Y peor si en el segundo paso, siembra el malestar en sus propias filas con "las personas que encabezan su lista".

          No tengo nada en contra del personaje y sus traspiés políticos.  Paso totalmente de éste político y de los otros. Este país no necesita más pirómanos ni llamadas a la violencia revanchista, al anticlericalismo, ni a la desunión. Es hora, no de religión sino de regeneración. Es de agradecer que Felipe VI, haya recomendado: "Que nadie construya muros con los sentimientos". No sólo patrióticos, sino también religiosos.

         Con tanta corrupción y tanta manipulación, cada vez más gente ignora de dónde venimos y quienes somos. Se está menospreciando la dignidad que nos iguala como personas, que es única, inviolable y básica para cimentar un Estado y la Comunidad Internacional. Se han perdido o se olvidan valores fundamentales. Esa amnesia es dañina a nivel personal, y a nivel político-social se ha convirtiendo en una pérfida complicidad con la mentira y el fango. Se arrinconaron la ética y la filosofía, que ayudan a los estudiantes a ser decentes y a pensar por sí mismos, pero...eso no interesa."El analfabetismo unánime sigue siendo la gran ambición de la clase dirigente y de la clase política en España" (Antonio Muñoz Molina).

           Y ahora se quiere eliminar "la religión", porque sale gratis y agrada a posibles socios en caso de "pactos".

          No hay valentía para asumir que somos responsables de lo que hacemos. Nos ocultamos tras lo que otros hacen, dicen, o legislan. Con ello prestamos nuestro apoyo y nuestro concurso a que sea la justicia y la policía, quien regenere y decida. Olvidamos que la voluntad y el libre albedrío son la verdadera fuerza que permita salir del hundimiento y de la complicidad. Estamos llegando a un nivel de saturación de errores y actitudes, con la forma de vida que soportamos o aceptamos. Son vendas en los ojos. Parecen querer enterrar la historia, la conciencia y cerrar las puertas al futuro.

          Darse cuenta de eso, sería positivo. Supondría un abandono de la contaminación ideológica y, un acercamiento desnudo y humilde a la verdad. Podría ser el inicio de un camino de liberación. Una muestra de lucidez para salir del autoengaño o autobloqueo emocional.

           No es fácil la regeneración; no es un tema únicamente personal, aunque es imprescindible. Tampoco es un problema puntual de la sociedad española, sino una situación europea y global. Es como el aire que respiramos, individualmente, pero  trasciende las fronteras. Como saben los ecologistas, lo que contaminamos repercute en todos. Hay quienes llegan al poder y pretenden dirigir la vida de los ciudadanos, sin preparación, sin cultura, sin experiencia y sin formas.

          La decencia tendría que ser el objetivo del individuo, de la familia y del político. El contacto con la realidad y la ayuda a los conciudadanos, la meta. Hay que ayudar a quien lo necesita. Además de la desunión de aquí, hay una crisis humanitaria. Pero ni los políticos tienen ideas claras, ni son capaces de marcar directrices claras y consensuadas, ni aquí ni en Europa.

          "Con la llegada masiva de inmigrantes, Europa sufre una transformación que está fuera del control de los gobiernos" dice Hermann Tertsch (ABC). Y añade: "Mientras no cesa la oleada migratoria mayor desde la II Guerra Mundial que comenzó con su máxima intensidad en agosto y se mantiene. Aunque haya desaparecido de las noticias aquí en España. Porque estamos entretenidos con nuestro golpista que baladronea aún impune en Cataluña. Con nuestro presidente que se declara satisfecho con su partido en naufragio y sus grumetes ministeriales de reyerta. Con nuestros socialistas que juegan a comunistas y separatistas, los comunistas que se pretenden socialdemócratas y castristas y toda España que parece decidida ya a lanzarse al camino hacia el Estado ingobernable en el 2016. Porque la indolencia de los unos y el delirio revanchista de los otros harán más imposible que nunca una España firme y respetuosa con sus leyes y consigo mismo. Así, liados como estamos, nadie prepara a los españoles para lo que se les vendrá también encima en los próximos años" .

          Se equivoca el líder socialista: no es un problema de religión sino de ética. No es un problema de creencias, ni de miembros de una religión en particular, sino un problema ético de cada uno y de todos. La ética, es más importante que la religión. "No llegamos a este mundo ni a éste país, como miembros de una religión", sino con una ética innata. Se necesita más respeto a ese humanismo, y también a la historia de la civilización.

          La ética trasciende a todas las religiones y llega hasta los últimos rincones del ser humano, de cualquier ser humano en el planeta. Es el fundamento de la conciencia porque está en la esencia humana. Se puede ser ateo o agnóstico, pero no se puede vivir sin valores que indiquen lo que está bien o está mal. Es natural que el respeto a los demás, el altruismo, la no violencia, sean más valorados por todos. Y cuanto más espiritual, más libre es el hombre  y más humano. Hay que educar el corazón y el espíritu. ¡La fe está a otro nivel!

           Si uno lleva en su interior la paz, puede hacer que la paz en el exterior también sea posible. La ética está en el corazón y de ahí brota lo que podemos ser y todo lo que podremos hacer por los demás. La coherencia entre lo que se dice y lo que se hace.
           Además de que no todos los ciudadanos se comportan al mismo nivel de ética, las ideologías sectarias, la xenofobia, los nacionalismos, los fanatismos religiosos, pueden ser incendiarios. Todos los fundamentalismos son perjudiciales y peligrosos. Pero tienen un poder demoledor, si se amparan en los medios de comunicación y las Redes Sociales.

           Se sabe que mientras se quiere suprimir "una manifestación religiosa" se está financiando a otras religiones o creencias, además de utilizar la enseñanza para un ambiciosos proyecto de reingeniería social y sexual amparado desde el poder.

          La "laicidad" que todos aceptarían, sería la verdad y la decencia.  Dicho de otro modo,  "la única religión" en la que todos creemos: La ética y el imperio de la Ley, para todos y siempre. Claridad, condiciones y reglas de conducta para los nativos y para los que decidan venir o hayan llegado. Los inmigrantes y los refugiados traen su historia, su religión y su proselitismo. Puede ser enriquecedor, pero sin olvidar lo acontecido en Francia, el Reino Unido, Turquía, Suecia, y en el sur de España. El radicalismo islamita está más cerca de lo que pensamos. Que cada uno sepa a qué atenerse en todo el territorio. Privilegios para nadie. ¿Es tan difícil? ¿Hay que reformar la Constitución para poderlo hacer? Seriamos los ciudadanos más felices si algún líder se atreviera a tenerlo en cuenta, llevarlo a su programa y ponerlo en práctica. Hay que dialogar, tender puentes y cuidar las promesas. Mentir al ciudadano, es un riesgo, porque ¡tiene memoria!


          A los políticos no les corresponde quitar o poner "religiones" sino señalar los principios éticos de convivencia, y facilitar las condiciones para crear puestos de trabajo a fin de que cada uno pueda llevar a su mesa el alimento que necesita cada día.

PUBLICADO EN EL HERALDO DEL HENARES, columna LA TANGENTE, 24-10-2015:

viernes, 20 de marzo de 2015

VIACRUCIS, de Gerardo Diego



                  
              Gerardo Diego, la persona.  Es un poeta que nació en Santander el 3 de octubre de 1896 y falleció en Madrid el 8 de julio de 1987. Uno de los más brillantes de la Generación del 27 y autor de esta obra que, ahora en marzo,  cumple 85 años.

             Desde niño  se sintió atraído tanto por la literatura como por la música. Cultivó las dos artes. Pero más que en el piano, que llego a tocar como un virtuosos, destacó y se le conoce, sobre todo, por la literatura.  Llevaba en el alma la musicalidad de una y otra.  En la poesía,  como expresión artística se ejercitaba  a diario como lo demuestra en su libro Versos Diarios  1925 por el que ganó el primer premio Nacional de Literatura( lo volvió a ganar en el 1956).  La música le ayuda a soñar: Nocturnos de Chopin (1963).       
    
          Como docente,catedrático de lengua y literatura en Institutos de Soria, Gijón, Santander y Madrid y como poeta, muestra una tendencia hacia la profundidad. Buscó la autenticidad de una poesía pura, pero de valores humanos, y sin cerrarse a la vertiente moderna y vanguardista. Algunos ven una lucha dialéctica entre clasicismo y vanguardia. Pero ambas vertientes corren paralelas en él.

         No hay contradicción, porque surgen en él de forma espontánea y natural, Como afirmó el mismo en su día: “Yo no soy responsable de que me atraigan simultáneamente el campo y la ciudad, la tradición y el futuro; de que me encante el arte nuevo y me extasíe el antiguo; de que me vuelva loco la retórica hecha, y me torne más loco el capricho de volver a hacérmela –nueva– para mi uso personal e intransferible”.

        Por su perfeccionismo y su abundante obra literaria, fue elegido, por unanimidad, miembro de la Real Academia Española en 1947. Volvió a obtener el Premio Nacional de Literatura en 1956, Y en 1979 se le concedió el Premio Cervantes de las letras.            

       Entre sus poemas más notables dentro de la línea clásica o tradicional son: El romancero de la novia (1918), Soria (1923), Versos humanos (1925), Ángeles de Compostela (1940), Alondra de verdad (1941), Sonetos a Violante (1961), Mi Santander, mi cuna, mi palabra (1961) y La suerte o la muerte (1963).

           Aunque un soneto inmortal y uno de los más conocidos es el que compuso  el 4 de julio de 1924, cuando el escritor cántabro llegó al monasterio de Santo Domingo  para pasar una noche en la hospedería monacal. Al despedirse de los monjes dejó escrito en el libro de visitas, como original dedicatoria, el  soneto  más famoso, que esa misma noche había compuesto, en su celda al... ciprés de Silos.


Enhiesto surtidor de sombra y sueño
que acongojas el cielo con tu lanza.
Chorro que a las estrellas casi alcanza
devanado a sí mismo en loco empeño.

Mástil de soledad, prodigio isleño,
flecha de fe, saeta de esperanza.
Hoy llegó a ti, riberas del Arlanza,
peregrina al azar, mi alma sin dueño.

Cuando te vi señero, dulce, firme,
qué ansiedades sentí de diluirme
y ascender como tú, vuelto en cristales,

como tú, negra torre de arduos filos,
ejemplo de delirios verticales,
mudo ciprés en el fervor de Silos
. 

            La anécdota y el poema, denotan la vertiente de profundidad humana del poeta. La inspiración le encuentra pensando y trabajando.
            Nunca abandonó esa hondura interior,  a la que, en alguna ocasión, sus más íntimos supieron asomarse y a la que hace referencia en estos versos:

Dicen que ya estoy maduro y hasta debe de ser cierto,
que a las dos de la mañana, mientras dibujo estos versos
cierro los ojos y escucho cómo florece el silencio,
cómo presiden los ritmos el sosiego de lo eterno.

            La vida de los hombres, sobre todo de algunos, es una búsqueda constante, un diálogo interior, a veces en la niebla, entre lo humano y lo divino. Y el poeta lo dejó plasmado  en Versos humanos (1925) y Versos divino(1971). No hay un antes ni un después. En su tiempo no era tan fácil como puede parecer. Según Antonio Martínez Cerezo "Las dificultades con que tropieza el artista de nuestro tiempo para tratar un tema religioso son más que nunca crecidas, sobre todo tal vez en la poesía".

            Las fiestas civiles y  las religiosas,  las populares, evocaban por entonces, ritmos de trabajos y alegrías, de presente y de futuro. Pero había también  fiestas religiosas.

        Entre ésta últimas la Navidad y la Semana Santa eran momentos fuertes. El poeta, trata de acercarse al misterio que subyace a una y otra.

            La obra poética  VIA CRUCIS, que ahora cumple 85 años, pertenece a esa Pasión y a su forma de vivirla y entenderla desde su creencia religiosa de entonces.

             El escritor, historiador y académico Martínez Cerezo  gran conocedor de la obra de Gerardo Diego, recordaba el mes pasado, en El Mundo de Cantabria: “Figuradamente VIA CRUCIS se refiere el trabajo o aflicción que sufre una persona sea cual sea la causa que lo motive”.
             En este caso, concreto se refiere a la "aflicción" soportada por Jesús de Nazaret, es decir su "VIA CRUCIS". Según Martínez Cerezo, "el poemario religioso homónimo de Gerardo Diego, es el mejor que conozco en su estilo. Una obra maestra en toda regla, indudable joya de la poesía religiosa hispánica”.

            Creo que es una buena ocasión para ponerlo al alcance del público con motivo del aniversario de su publicación. Es una manera de entender y recordar su fe.

              Tal vez muchos no conocen la obra. Haber nacido y tener mi cuna y mi palabra, como el poeta Gerardo Diego, en Santander, me anima a difundirla. Ese recorrido por el itinerario de la vía dolorosa,  con un admirable poeta puede ayudar a pensar, tal vez también a sentir y acaso también a orar.
            No son un calco de los VIA CRUCIS  que pueden verse en las iglesias católicas. Se diferencia en el fondo y en el número.  Son el sentimiento interior de un poeta profundo, al revivir las escenas junto a su protagonista. Un creyente de cuerpo entero. Y tiene, además, una última estación, la Decimoquinta que da sentido a todo: la "divina certeza". 

La obra...                                                                                                                         

                                   VIA CRUCIS ( de Gerardo Diego)
       
Dame tu mano, María, 
la de las tocas moradas. 
Clávame tus siete espadas 
en esta carne baldía. 
Quiero ir contigo en la impía 
tarde negra y amarilla. 
Aquí en mi torpe mejilla 
quiero ver si se retrata 
esa lividez de plata, 
esa lágrima que brilla.

Déjame que te restañe 
ese llanto cristalino, 
y a la vera del camino 
permite que te acompañe. 
Deja que en lágrimas bañe 
la orla negra de tu manto 
a los pies del árbol santo 
donde tu fruto se mustia. 
Capitana de la angustia: 
no quiero que sufras tanto.

Qué lejos, Madre, la cuna 
y tus gozos de Belén: 
- No, mi Niño. No, no hay quien 
de mis brazos te desuna. 
Y rayos tibios de luna 
entre las pajas de miel 
le acariciaban la piel 
sin despertarle. Qué larga 
es la distancia y qué amarga 
de Jesús muerto a Emmanuel.

¿Dónde está ya el mediodía 
luminoso en que Gabriel 
desde el marco del dintel 
te saludó: -Ave, María? 
Virgen ya de la agonía, 
tu Hijo es el que cruza ahí. 
Déjame hacer junto a ti 
ese augusto itinerario. 
Para ir al monte Calvario, 
cítame en Getsemaní.

A ti, doncella graciosa, 
hoy maestra de dolores, 
playa de los pecadores, 
nido en que el alma reposa. 
A ti, ofrezco, pulcra rosa, 
las jornadas de esta vía. 

A ti, Madre, a quien quería 
cumplir mi humilde promesa. 
A ti, celestial princesa, 
Virgen sagrada María.


Primera Estación: JESÚS ES CONDENADO A MUERTE

"El Consejo en pleno se levantó y llevaron a Jesús ante Pilato. Allí empezaron con sus acusaciones: «Hemos comprobado que este hombre es un agitador. Se opone a que se paguen los impuestos al César y pretende ser el rey enviado por Dios.»" (Lc 23, 1-2)


Jesús sentenciado a muerte. 
No bastan sudor, desvelo, 
cáliz, corona, flagelo, 
todo un pueblo a escarnecerte. 
Condenan tu cuerpo inerte, 
manso Jesús de mi olvido, 
a que, abierto y exprimido, 
derrame toda su esencia. 
Y a tan cobarde sentencia 
prestas en silencio oído.

Y soy yo mismo quien dicto 
esa sentencia villana. 
De mis propios labios mana 
ese negro veredicto. 
Yo me declaro convicto. 
Yo te negué con Simón. 
Te vendí y te hice traición 
con Pilatos y con Judas. 
Y aún mis culpas desanudas 
y me brindas el perdón. 




Segunda Estación: JESÚS CARGA CON LA CRUZ

"Así fue como se llevaron a Jesús. Cargando con su propia cruz, salió de la ciudad hacia el lugar llamado Calvario (o de la Calavera), que en hebreo se dice Gólgota." (Jn 19, 17)

Jerusalén arde en fiestas. 
Qué tremenda diversión 
ver al justo de Sión 
cargar con la cruz a cuestas. 
Sus espaldas curva, prestas 
a tan sobrehumano exceso, 
y, olvidándose del peso 
que sobre su hombro gravita, 
con caridad infinita 
imprime en la cruz un beso. 

Tú el suplicio y yo el regalo. 
Yo la gloria y Tú la afrenta 
abrazado a la violenta 
carga de una cruz de palo. 
Y así, sin un intervalo, 
sin una pausa siquiera, 
tal vivo mi vida entera 
que por mí te has alistado 
voluntario abanderado 
de esa maciza bandera. 




Tercera Estación: JESÚS CAE POR PRIMERA VEZ

 "Luego Jesús llamó a sus discípulos y a toda la gente y les dijo: «El que quiera seguirme, que renuncie a sí mismo, tome su cruz y me siga. Pues el que quiera asegurar su vida la perderá, y el que sacrifique su vida (por mí y) por el Evangelio, la salvará." (Mt 16, 24-25)

A tan bárbara congoja 
y pesadumbre declinas, 
y tus rodillas divinas 
se hincan en la tierra roja. 
Y no hay nadie que te acoja. 
En vano un auxilio imploras. 
Vibra en ráfagas sonoras 
el látigo del blasfemo. 
Y en un esfuerzo supremo 
lentamente te incorporas. 

Como el Cordero que viera 
Juan, el dulce evangelista, 
así estás ante mi vista 
tendido con tu bandera. 
Tu mansedumbre a una fiera 
venciera y humillaría. 
Ya el Cordero se ofrecía 
por el mundo y sus pecados. 
Con mis pies atropellados 
como a un estorbo le hería. 


Cuarta Estación: JESÚS SE ENCUENTRA CON SU MADRE: 

"También estaban allí, observándolo todo, algunas mujeres que desde Galilea habían seguido a Jesús para servirlo." (Mt 27, 55)


Se ha abierto paso en las filas 
una doliente Mujer. 
Tu Madre te quiere ver 
retratado en sus pupilas. 
Lento, tu mirar destilas 
y le hablas y la consuelas. 
Cómo se rasgan las telas 
de ese doble corazón. 
Quién medirá la pasión 
de esas dos almas gemelas. 

¿Cuándo en el mundo se ha visto 
tal escena de agonía? 
Cristo llora por María. 
María llora por Cristo. 
¿Y yo, firme, lo resisto? 
¿Mi alma ha de quedar ajena? 
Nazareno, Nazarena, 
dadme siquiera una poca 
de esa doble pena loca, 
que quiero penar mi pena. 


Quinta Estación: JESÚS ES AYUDADO POR EL CIRENEO

"Cuando lo llevaban, encontraron a un tal Simón de Cirene que volvía del campo, y le cargaron con la cruz para que la llevara detrás de Jesús." (Lc 23,26)

Ya no es posible que siga 
Jesús el arduo sendero. 
Le rinde el plúmbeo madero. 
Le acongoja la fatiga. 
Mas la muchedumbre obliga 
a que prosiga el cortejo. 
Dure hasta el fin el festejo. 
Y la muerte se detiene 
ante Simón de Cirene, 
que acude tardo y perplejo. 

Pudiendo, Jesús, morir, 
¿por qué apoyo solicitas? 
Sin duda es que necesitas 
vivir aún para sufrir. 
Yo también quise vivir, 
vivir siempre, vivir fuerte. 
Y grité: -Aléjate, muerte. 
Ven Tú, Jesús cireneo. 
Ayúdame, que en ti creo 
y aún es tiempo de ofenderte. 

Sexta Estación: LA VERÓNICA LIMPIA EL ROSTRO DE JESÚS

"Muchos quedaron espantados al verlo, pues estaba tan desfigurado, que ya no parecía un ser humano. Despreciado por los hombres y marginado, hombre de dolores y familiarizado con el sufrimiento, semejante a aquellos a los que se les vuelve la cara, no contaba para nada y no hemos hecho caso de él. Sin embargo, eran nuestras dolencias las que él llevaba, eran nuestros dolores los que le pesaban." (Is 52, 14; 53, 3-42)

Fluye sangre de tus sienes 
hasta cegarte los ojos. 
Cubierto de hilillos rojos 
el morado rostro tienes. 
Y al contemplar cómo vienes 
una mujer se atraviesa, 
te enjuga el rostro y te besa. 
La llamaban la Verónica. 
Y exacta tu faz agónica 
en el lienzo queda impresa. 

Si a imagen y semejanza 
tuya, Señor, nos hiciste, 
de tu imagen me reviste 
firme a olvido y a mudanza. 
Será mayor mi confianza 
si en mi alma dejas la huella 
de tu boca que nos sella 
blancas promesas de paz, 
de tu dolorida faz, 
de tu mirada de estrella. 


Séptima Estación: JESÚS CAE POR SEGUNDA VEZ

"... eran nuestras faltas por las que era destruido; nuestros pecados, por los que era aplastado. El soportó el castigo que nos trae la paz y por sus llagas hemos sido sanados". (Is 53, 5)

Largo es el camino y lento 
y el Cireneo se rinde. 
Él se ha trazado una linde 
en su oscuro pensamiento. 
Mientras disputa violento, 
deja que la cruz se hunda 
total, maciza, profunda, 
sobre aquel único hombro. 
Y como un humano escombro 
cae Jesús por vez segunda. 

¿Otra vez, Señor, en tierra, 
abrazado a tu estandarte? 
Ese insistente postrarte 
¿qué oculto sentido encierra? 
Mas ya te entiendo. En la guerra 
por ti luchando, transido 
caeré en tierra y malherido, 
¿y no he de alzarme ya más? 
Yo sé que Tú me darás 
la mano si te la pido. 

Octava Estación: JESÚS CONSUELA A LAS MUJERES DE JERUSALÉN

"Lo seguía muchísima gente, especialmente mujeres que se golpeaban el pecho y se lamentaban por él. Jesús, volviéndose hacia ellas, les dijo: «Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí. Llorad más bien por vosotras mismas y por vuestros hijos." (Lc 23, 27-28)

Qué vivo dolor aflige 
a estas mujeres piadosas, 
madres, hermanas, esposas, 
sin culpa del «crucifige». 
Jesús a ellas se dirige. 
Sus palabras, oídlas bien. 
-Hijas de Jerusalén. 
Llorad vuestro llanto, sí, 
por vosotras, no por mí. 
Por vuestros hijos también. 

Por nosotros mismos, cierto. 
Pero ¿quién por ti no llora? 
Haz que llore hora tras hora 
por mí tibio y por ti yerto. 
Riégame este estéril huerto. 
Quiébrame esta torva frente. 
Ábreme una vena ardiente 
de dulce y amargo llanto, 
y espanta de mí este espanto 
de hallar cegada mi fuente. 

Novena Estación: JESÚS CAE POR TERCERA VEZ

"Felices los que son perseguidos por causa del bien, porque de ellos es el Reino de los Cielos." (Mt 5, 10)

Ya caíste una, dos veces. 
La rota túnica pisas 
y aún entre mofas y risas 
tendido a mis pies te ofreces. 
Yo no sé a quién me pareces, 
a quién me aludes así. 
No sé qué haces junto a mí, 
derribado con tu leño. 
Yo no sé si ha sido un sueño 
o si es verdad que te vi. 

Y yo caigo una, dos, tres, 
y otra vez más, y otra, y tantas. 
Siempre tus espaldas santas 
me sirvieron de pavés. 
Ahora siento bien cuál es 
la razón de tus caídas. 
Sí. Porque nuestras vencidas 
almas no te tengan miedo 
caes, oh humilde remedo, 
y a abrazarte las convidas. 




Décima Estación: JESÚS ES DESPOJADO DE SUS VESTIDURAS

 "Después de clavar a Jesús en la cruz, los soldados tomaron sus vestidos y los dividieron en cuatro partes, una para cada uno de ellos. En cuanto a la túnica, tejida de una sola pieza de arriba abajo sin costura alguna, se dijeron:«No la rompamos, echémosla más bien a suertes, a ver a quién le toca.» Así se cumplió la Escritura que dice: Se repartieron mi ropa y echaron a suertes mi túnica. Esto es lo que hicieron los soldados." (Jn 19, 23-24)

Ya desnudan al que viste 
a las rosas y a los lirios. 
Martirio entre los martirios 
y entre las tristezas triste. 
Qué sonrojo te reviste, 
cómo tu rostro demudas 
ante aquellas manos crudas 
que te arrancan los vestidos 
de sangre y sudor teñidos 
sobre tus carnes desnudas. 

Bella lección de pudores 
la que en este trance dictas, 
tus candideces invictas 
coloridas de rubores. 
Tú, que has teñido las flores 
de tintas tan sonrosadas, 
que en las castas alboradas 
las nubes vistes de oro, 
ay, devuélveme el tesoro 
de mis flores marchitadas. 

Undécima Estación: JESÚS ES CLAVADO EN LA CRUZ

"Al llegar al lugar llamado de la Calavera, lo crucificaron allí, y con él a los malhechores, uno a su derecha y el otro a su izquierda." (Lc 23, 33)

Por fin en la cruz te acuestas. 
Te abren una y otra mano, 
un pie y otro soberano, 
y a todo, manso, te prestas. 
Luego entre Dimas y Gestas, 
desencajado por crueles 
distensiones de cordeles, 
te clavan crucificado 
y te punzan el costado 
y te refrescan de hieles. 

Y que esto llegue es preciso 
y así todo se consuma, 
y, a la carga que te abruma, 
el cuello inclinas sumiso. 
-Conmigo en el paraíso 
serás hoy- al buen ladrón 
prometes. Tierna lección 
la de tus palabras ciertas. 
Toma mis manos abiertas. 
Toma mis pies: tuyos son. 


Duodécima Estación: JESÚS MUERE EN LA CRUZ

 "Desde el mediodía hasta las tres de la tarde todo el país se cubrió de tinieblas. A eso de las tres, Jesús gritó con fuerza: Elí, Elí, lamá sabactani, que quiere decir: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?» Pero nuevamente Jesús dio un fuerte grito y entregó su espíritu." (Mt 27, 45-46.50)

Al pie de la cruz María 
llora con la Magdalena, 
y aquel a quien en la Cena 
sobre todos prefería. 
Ya palmo a palmo se enfría 
el dócil torso entreabierto. 
Ya pende el cadáver yerto 
como de la rama el fruto. 
Cúbrete, cielo, de luto 
porque ya la Vida ha muerto. 

Profundo misterio. El Hijo 
del Hombre, el que era la Luz 
y la Vida muere en cruz, 
en una cruz crucifijo. 
Ya desde ahora te elijo 
mi modelo en el estrecho 
tránsito. Baja a mi lecho 
el día que yo me muera, 
y que mis manos de cera 
te estrechen sobre mi pecho. 



Decimotercera Estación: JESÚS ES BAJADO DE LA CRUZ Y PUESTO EN LOS BRAZOS DE SU MADRE

"Cerca de la cruz de Jesús estaba su madre, con María, la hermana de su madre, esposa de Cleofás, y María de Magdala." (Jn 19,25)

He aquí helados, cristalinos, 
sobre el virginal regazo, 
muertos ya para el abrazo, 
aquellos miembros divinos. 
Huyeron los asesinos. 
Qué soledad sin colores. 
Oh, Madre mía, no llores. 
Cómo lloraba María. 
La llaman desde aquel día
la Virgen de los Dolores. 

¿Quién fue el escultor que pudo 
dar morbidez al marfil? 
¿Quién apuró su buril 
en el prodigio desnudo? 
Yo, Madre mía, fui el rudo 
artífice, fui el profano 
que modelé con mi mano 
ese triunfo de la muerte 
sobre el cual tu piedad vierte 
cálidas perlas en vano. 


Decimocuarta Estación: JESÚS ES SEPULTADO

 "Estaban tan asustadas que no se atrevían a levantar los ojos del suelo. Pero ellos les dijeron: «¿Por qué buscáis entre los muertos al que vive?.No está aquí. Resucitó. Acordaos de lo que les dijo cuando todavía estaba en Galilea." (Lc 24, 5-6)

Fue un José el primer varón 
que a Jesús tomó en sus brazos, 
y otro José en tiernos lazos 
le estrecha de compasión. 
Con grave, infinita unción 
el sagrado cuerpo baja 
y en un lienzo le amortaja. 
Luego le da sepultura 
y una piedra en la abertura 
de la roca viva encaja. 

Como póstuma jornada 
de tu vía de amargura, 
admiro en la sepultura 
tu heroica carne sellada. 
Señor, ya no queda nada 
por hacer. Señor, permite 
que humildemente te imite, 
que contigo viva y muera, 
y en luz no perecedera, 
que como Tú resucite. 




Decimoquinta Estación: JESÚS RESUCITA DE ENTRE LOS MUERTOS

¿Es de ingrávido sueño, 
aire o magia refleja 
este resplandor súbito, 
esta erguida presencia? 

Todo en torno se afirma, 
se deslumbra, se ciega. 
La piedra es más que nunca 
piedra, gozosa piedra; 

la humana piel confusa 
de oscuros centinelas, 
tañida del prodigio, 
centellea evidencias, 

y el alba, el alba tímida 
tan mojada y tan tierna, 
confirma de rubores 
su inocencia perfecta. 

Otra vez sobre el mundo
la Verdad se hace cierta, 
cierta con certidumbre 
transverberada, céntrica. 

No el aire, no, ni el sueño 
ni la magia espejean 
este cuerpo armonioso 
que fulgura y destella. 

Las brisas le acarician, 
la tierra le sustenta 
y la luz que de él mana 
le ciñe y le modela. 

Pudiendo ser más leve 
que plumas o humaredas, 
humana, humildemente 
pisa la hierba, y pesa, 

y al goce del suavísimo 
tacto, contacto, prenda, 
invita -ábranse flores- 
a las yemas incrédulas. 

Resurrección. Oh gloria 
taladrada y tan nuestra, 
tan de hueso y de carne 
firme, caliente, fresca. 

Por Ti, Jesús, tan nuevo 
hoy con tus cinco estrellas 
que en cifra dibujada 
tu caridad constelan, 

por Ti, Señor, devuelto 
a la luz que te estrecha, 
al amor que te ciñe, 
al aura que te besa, 

por ti, todo nos canta, 
oh divina certeza 
para después del tiempo, 
quieta ya primavera.