Mostrando entradas con la etiqueta xz2k. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta xz2k. Mostrar todas las entradas

sábado, 6 de marzo de 2021

Respuestas pasadas

 


No soy un enfermo ,
o un desvalido,
solo soy un hombre sin mujer.


Se quien soy y que hacer,
solo le canto versos al viento,
sin orden ni destino.


Solo sueño que no sueño,
pienso que descanso
cuando no descanso.


Se que algo valgo aun,
y que por duro que sea encontraré mi destino,
pero de recuerdos se llena mi mente,
de sonrisas y pasiones,
y aunque suene feo decirlo
pienso que no todo es aquello que se tuvo,
ni es un loco el que retuvo.


Y aun con mas desdén me explico que no logro borrar tu recuerdo,
y aunque del pasado no se vive
es él mismo el que me reprime.


Aunque meses u años pasen,
si tengo que expresarme para sacar dolor o dudas,
mantengo tranquilo el encuadre puesto que aun las letras me salen.

Mis sentimientos siguen en la coctelera
y entrelazados o mezclados se hallan.
Quisiera no quererte o no recordarte;
pero ondo calaste en mi ser y profunda es tu marca.
Que dichoso es el dios de los mortales,
que permite que las llagas no se marchen,
que los ecos del ayer aun reboten
y que no deja desahogarme.

No he muerto aun por dentro,
aunque a póker juegue con la muerte en la oscuridad de los adentros.
Disculpa mis escritos,
pero no puedo poner en orden los pensamientos,
ni calma en las manos que moldean las palabras.


Solo hallo el espacio para expulsar historias,
pequeños cortos o retales
de lo que una vez fue hermoso
y otra tenebroso.


Aun así no logro dejar de amarte,
ni desearte
y he aquí mi lamento y mi tormento.



                                                                     Enero/2011

miércoles, 29 de junio de 2011

Regando



Tú,
que dejas palabras
las cuales el barro tapó.
Tú,
que cambiaste unas zapatillas
por unos tacones.
Y ahora tu alma se empapa
de una sensación desatinada.
Tú,
que sola querías trazar tu camino...

Yo,
que en pastillas perdí mis sueños;
que el viento contemplé
mientras tiraba mi esperanza;
que sin cobijo me encontré
y de tus pocos versos
un atisbo de luz logré atrapar.

Qué curioso puede ser el destino indeterminado del alma humana?

De todo se aprende,
de todo se duele y parchea.
Aún así miro dentro de mi alma,
para recordar algunos pedazos
que quedaron de mi ser anterior
para así plantar la semilla de un nuevo corazón.

sábado, 25 de junio de 2011

Atado a sí mismo



El silencio y los nervios
condenaron su cuerpo
en un espacio sombrío.

Luces que llegaban al alba,
con el roce de una mano,
la mueca de una cara.

Bolsas llenas arrastraban sus piernas,
dolores convertidos en silencios,
somníferos tragados como sueños.

Boca arriba despertaba,
erguido se mantenía,
en reposo Don caballero.

De nervios lleno estaba
más su ímpetu no cesaba
su sangre aún sentía que hervía.

Pero he allí un alma caritativa,
de sonrisas en gominolas
y palabras embriagadoras.

Y he aquí el perfecto final,
de un alma ruda y cerrada,
que cuando se abre...rápidamente se la insta a cerrarse...

viernes, 24 de junio de 2011

Duele? El qué exactamente...?



Atrapado en una cama,
a un cable conectado
contando las gotas de suero
que entran por mis venas.

En silencio conmigo mismo,
cantándole al vacío,
allá donde se esconden las preguntas sin respuesta,
allá donde se ocultan los miedos.

Anclado en un estado sin estar,
ahogado entre dudas y futuro,
abandonado por la luz y la sonrisa,
arropado por el ángel de la bondad...

Un pañuelo y una navaja,
una sonrisa y una enfermera,
un cigarito y una caricia,
una mirada allá abajo y un no pensar en alto.

Del dolor a el corazón...



Un año ya ha pasado.
- Uno ya? - Pregunta el anciano.
- Uno y solo uno - Le contesto.
Mi alma se partió en dos
y el cielo creí ver.
Mi corazón regalé ,
a ello me aferré
y confié mi destino.

De cuantas cicatrices se hace el hombre?
De una,
de dos,
de ninguna?

Un año ya pasó,
y de él aprendí que nada acaba,
que todo continua,
que no se baja la guardia,
que la paciencia es una virtud,
pero que la virtud no es algo que abunde hoy día.

Mil pesadillas enfrascadas en 365 días,
confundido,
abandonado,
sin conversación,
sin amor...
...sin dolor como le decía a la enfermera.


jueves, 23 de junio de 2011

Mar



Vuelvo a la mar.
Entre los dedos arena,
en la cara sol y una sonrisa.

Como la arena que se lleva el viento
y reposa en otros lares.

Como el aire de la costa,
que refresca y quema.

A la derecha pulseras y cicatrices,
a la izquierda lugares que antes eran de alegría
y ahora de lejanía.

Hundo los pies en la arena,
observo el horizonte
y le sonrío con ironía a la vida.

Debajo del agua nada me molesta,
todo es silencio acuático e imágenes borrosas,
que vuelven rojizos mis ojos
y mi piel oscura.

A la mar he vuelto y a ella he de regresar,
para nunca más regresar.

miércoles, 8 de junio de 2011

Palabras en el saco


Metiendo palabras en sacos cargó el muchacho a la espalda.
Cuanto más avanzaba en la vida más palabras iba metiéndose en el saco.
Había muchos momentos en los que conseguía sacar palabras para volver a utilizarlas.Muchas volvían al saco, otras habían sido recuperadas para su lenguaje.
El peso de sus pies dependían del saco que arrastraba. Si el saco pesaba, el muchacho no avanzaba, sus piernas le pesaban, le sumía la desconfianza, le podía el miedo. En cambio, si el saco iba más ligero, las sonrisas salían, los saltos se convertían en brincos y la esperanza volvía a sus ojos.
Un día el muchacho paró en seco. Ya llevaba muchos días con dolores y decidió parar a reflexionar.
Sentado delante del saco el muchacho se limitó a contar las palabras que había en el saco. Una a una las fue sacando, las miraba, las contaba y las apartaba.
El muchacho llevaba 262.080 palabras! Eran muchas, pensaba el. Así que cogió una palabra, sacó un pañuelo que guardaba en su bolsillo y la limpió.Para su asombro, al limpiar la letra desaparecía!
Así que el muchacho limpió todas las palabras y vació por completo su saco, librándose así de su peso.
Después recogió el saco, miro a su alrededor y se vio reflejado en un charco. Ya no era un muchacho, era un hombre con ojos de muchacho. Un nuevo sol salía para el.
Fueron muchos días, 182 lunas y más de mil sensaciones diferentes. Pero las palabras volvían a estar a su disposición. Solo debía emplearlas con sabiduría...

jueves, 19 de mayo de 2011

De lecciones y palabras

Y aprendí la lección,
de un hombre por hacer
y un hueco que llenar.

Que nada prevalece
si de abono careces.
Que sintiendo el latir de mi gemir,
dejé ante mí
lo que no supe ver venir.

Entre mis dedos resbala la arena,
que no es arena,
si no impureza;
de sentir aquel dolor,
de caer en esa oración,
aún más sin protección,
perdería todo mi amor.

No hay más vuelta que la que ya se le dio,
con ello el pasado queda atrás,
guardado bajo llave
en cajas de metal,
que se quedan ancladas
para no mirarlas más.

Ya aprendí la lección,
que de sentir
es bien sentido,
pero de angustioso
se es muy maldito.



Ahora que veo el sol salir,
anunciar que la luz cubre las montañas
anunciando que ya es hoy.
Ahora que en momentos
el tiempo,
ese amigo del pasado
parece haber parado.
Enemistado con los hechos,
amado por los árboles,
levanto la mirada
de esos ojos vidriosos
sobre un reflejo sucio
en una ventana vieja.

El cantar de día emborrona
los dulces silencios incomprendidos,
amontonados como gotas de té
alrededor de la mesa.
No son claros
ni oscuros,
solo son gotas de infortunio,
que un día fueron agua
y hierba
y que ahora son una mezcla
entre ellas.

lunes, 16 de mayo de 2011

Preso


Incomprensiblemente la cabeza vuela a veces,
patina,
salta de sitio.

Emociones desordenadas en un marco de angustia y extremada estupidez.
Sin un vaso de agua,
sin un solo matiz de humanidad o súplica.
Sintiéndome inservible para la conversación,
el sexo,
el arte.
La calma más normal desaparece de las manos del miedo,
envuelta en imágenes presentes en la retina de mis ojos.

La bestia que vive dentro volvió a presentarse
cuando el hombre perdió su palabra.

Volví a sentir el mal que alojo dentro,
aquel que lleva a la bestia a su terreno,
lleno de incomprensión,
falto de calor,
de amor,
de esperanza.

Pero que también levanta del suelo de la vanidad,
reflota el valor y el sentimiento
de una fortaleza escondida entre papel de arroz.





domingo, 15 de mayo de 2011

Pobre diablo

Despertar de la muerte
para darse cuenta
que muerto aun se está.

En aquel despertar
volver a revivir,
volver a respirar,
volver a sonreirle a los vientos
y a la lluvia.
En la muerte,
volver a ser inerte,
volver a ser un pobre diablo,
un fraude,
una sombra sin cuerpo.

Emociones llevadas al límite del desastre,
al principio de lo que fue el fin.
Un pobre diablo.

viernes, 13 de mayo de 2011

En cuerpo y agua

En cuerpo de azúcar moreno ondean dos hermosas colinas,
con el sol puesto entre ellas
nace un río de agua dorada.
En su bajada un lago ,
donde reposa el agua de tan hermoso viaje,
para emprender su curso natural hacia una negra desembocadura
que en forma de labios
abre el paso fronterizo
hacia el mar de los diamantes.

domingo, 8 de mayo de 2011

28 minutos


Dos ancianos juegan al domino sentados en una mesa del bar, con sus 28 fichas y sus correspondientes carajillos. Un policía tarda 28 minutos en acabar el turno a la salida del colegio a tres manzanas de casa. Una señora mayor tarda 28 minutos desde su casa hasta la tienda de ultramarinos. Esteve enreda en 28 minutos a la señora y a un grupo de Franceses en la tienda para que compren; finalmente consigue que todos salgan con productos de su tienda. 12 monos está basada en un corto llamado "la jetee" de 28 minutos de duración. La última película de Spike Jonze es un corto de 28 minutos llamado "Scenes from the suburbs". En 28 minutos el documental "Capacitados" de Shackleton demuestra que un incapacitado no lo es tanto cuando una persona apta se pone en su lugar. Una pareja de setenta años mantiene una reunión con su banco para declararse en bancarrota; la reunión dura 28 minutos. Una pareja se envía mensajes para poder hablar sin llegar a hacerlo; la "conversación" por mensajes dura 28 minutos.
28, es un número compuesto que tiene como factores propios los números 1, 2, 4, 7 y 14.Como la suma de sus factores hacen 28, esto lo convierte en un número perfecto.

miércoles, 4 de mayo de 2011

Espejismos reflejados en alfileres

Todo fue un sueño,
realmente nada pasó,
la imaginación volvió a jugármela,

los nervios jugaron con los sueños
convirtiéndolos en pesadillas.

Espejismos reflejados en alfileres,
punzantes en mi corazón,
pero pequeños en tamaño.

Escondido entre sábanas protectoras de la noche,
sacando tímidamente los ojos,
pausando la respiración entre vueltas y vueltas de colchón.

Las mañanas comienzan cuando el cuerpo se encuentra abatido.
Pero el sol de Judá calma las vértebras,
que agarrotas entre ellas vuelven poco a poco a su sitio,
cogen oxígeno con fuerza para dar las gracias por un nuevo día.
Las fresas están hermosas,
las lechugas crecen fuertes y los árboles dan sombra a los tomates
cuidando de no se quemen.

Todo fue un sueño,
la belleza se abre paso entre las pesadillas.

domingo, 1 de mayo de 2011



Silenciadas entre mantas se hayan mis palabras.



viernes, 29 de abril de 2011

Peonzas editoriales


Sin noticias.
He tardado semanas en llegar a la conclusión de mi propia estupidez,
de la ingenua inocencia que aun poseo y la cual me muestra como un gilipollas.
El señor de las oportunidades,
el señor de las mejillas.

Recibí mensajes de conciliación,
los cuales me creí,
los nervios volvieron a mi cuerpo,
las nauseas y el insomnio volvieron de sus vacaciones.
Esperé y esperé,
pero el teléfono nunca sonó.





Volví a abrir mi corazón a un doloroso recuerdo
y volvió a ser pisoteado.
He vuelto a picar,
y para colmo en regocijo de unos pocos
y de sus mentes enfermizas.

Hace un par de semanas que me apunté como voluntario para cubrir como reportero la crisis Libia.Cuando mi jefe me preguntó porque quería ir; simplemente le contesté que con un poco de suerte podría morir de algo y no esperar la lenta agonía de la existencia occidental.
Así que ahora escribo desde un pequeño Hotel al norte de Egipto en un pueblo llamado El Alamein, encerrado en una apestosa habitación de Hotel de tercera, donde las ratas son las reinas, la comida te destroza el estómago y el calor es tan intenso que las manchas de la ropa ya forman parte del vestuario.
Lleno la cabeza de basura, falsas noticias, Whisky barato y Lucky Strike esperando que cambien las cosas.

De lo demás?
No sé nada, todo se mantiene igual, lo miro y remiro, reviso el correo sin encontrar mas respuestas, mas entradas, mas nada...Por mucho que le diga a mi mente que lo deje, en cuanto me doy media vuelta, ella vuelve a revisar todo.
La peonza infinita de la mente,
que gira sobre ella misma
y así una y otra vez...
y otra vez...
y otra vez.



( Historia corta sin nada que ver con la realidad )

lunes, 25 de abril de 2011

Pequeña...


Por la garganta de la muchacha
no salía ninguna palabra.
Diminuta era
para un mundo tan grande.

Por las mejillas de la muchacha
sonrisas cristalinas ocultaban su desdicha,
lágrimas saladas se agolpaban en sus ojos,
lágrimas pasadas,
teñidas de presente nostálgico.

Ella sabía que huellas una vez dejó,
pero al no recordar que paso dio,
no pudo recordar donde las huellas dejó.

En sus pulmones humo tuvo un tiempo,
sin humo,
recogió oxígeno,
pero sus pulmones aún sintió incompletos.

Pequeña muchacha para un mundo tan grande,
pequeños vacíos
amontonados en un instante.


domingo, 24 de abril de 2011

Camino sin ruta

Dame una razón para parar el tiempo y lo haré,
dame una,
dentro de este paréntesis llamado deseo
que cubre todo el lecho en cortes de árboles de colores
y tallos sin flores.

Dame la cortina
para que pasen los días.
Corre su tela,
para ocultar el color rojizo de este rocío.

Quítame de nubes negras y arrollos perdidos,
clava tu pecho en el suelo
y siente el latir de la tierra
allá en lo alto de una cima.

Descubre ante mi el misterio
de un largo caminar deshecho.

Dame tan solo una excusa,
para cavar en mi tumba.


sábado, 23 de abril de 2011

La vista de la cima

Con esfuerzo y tesón escalé el abismo en el que caí,
sangre, sudor y sacrificio dejé mientras lo hacía,
pues mucho dejé abajo
por mucho que le cueste a otros reconocerlo

yo acepté mi destino,
tan esquivo
como maldito.
Sus húmedas paredes,
bañadas con las lágrimas del desengaño
trepé con ahínco y valor.
Cubos de saliva tragué
y fuerzas de flaqueza refloté.
Y fue en su cima donde pude contemplar el horizonte,
abriéndose para mi,
mostrándome el color que creí perdido.
Mis heridas cerré mientras descansaba allá en lo alto,
tres miradas dí al vacío,
tres miradas para hacerme recordar que nunca más caería de nuevo.
Aun recuerdo con esmero lo bonito,
aun de mis manos brota la sangre de la caida...