Tenia un tarro de paté de ciervo en el frigo desde tiempos inmemoriales, vamos que lo vi en el Corte Inglés para navidad y me llamo mucho la atención, la carne de monte me encanta y me decidí a probarlo. Lo compré y la cagué. No es que este malo, lo que pasa es que tiene un pedazo de cachos de trozos de yo qué se que no me lo explico. Un paté para mi debe de ser como mínimo suave para que se pueda untar no??, pues no, además de duro, cuando intentaba untarlo en una mini tosta el cuchillo iba haciendo ondas de los tropezones que aquello tenía.
Imagino que a muchos de vosotros os habrá pasado algo parecido alguna vez, verdad??. En este caso como no me gusta tirar nada, y como de sabor estaba bueno me decidí a emplearlo en la pasta que iba a preparar para comer... y que éxito.. no me lo podía creer estaba buenisimo!!!
Ingredientes:
300 gr. de nidos al huevo
un tarro de paté de ciervo
queso curado
2 cebollas medianas
hilos de chorizo espuña
200 ml de nata para cocinar
sal
aceite de oliva
nuez moscada
orégano.
Elaboración:
Ponemos a cocer la pasta en abundante agua hirviendo, añadimos un poco de sal y un chorrito de aceite para que no se pegue, transcurridos unos diez minutos la ponemos a escurrir. Mientras preparamos una sartén y vamos pochando la cebolla picada, cuando esté casi hecha añadimos el paté hasta que se deshaga, después ponemos lo hilos de chorizo y salteamos un poco.
Añadimos la nata, el orégano y una pizca de nuez moscada ( yo le puse también un chorrito de leche porque la salsa quedaba un poco espesa).
Después introducimos las pasta en la salsa y le ponemos unas lonchas de queso curado hasta que se funda, le damos unas vueltas y directa al plato.