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viernes, 24 de septiembre de 2010

Página en blanco

Bajé al mercado
y traje
tomates diarios aguacero
endivias y envidias
gambas grupas y amenes
harina monosílabos jerez
instantáneas estornudos arroz
alcachofas y gritos
rarísimos silencios.

página en blanco
aquí te dejo todo
haz lo que quieras
espabílate
o por lo menos organízate

yo me echaré una siesta
ojalá me despiertes
con algo original
y sugestivo
para que yo lo firme

Mario Benedetti, Inventario Dos: Poesía 1986-1991

domingo, 16 de mayo de 2010

Solitude

(...)
Tengo una soledad
tan concurrida
tan llena de nostalgias
y de rostros de vos
de adioses hace tiempo
y besos bienvenidos
de primeras de cambio
y de último vagón

tengo una soledad
tan concurrida
que puedo organizarla
como una procesión
por colores
tamaños
y promesas
por época
por tacto
y por sabor

Mario Benedetti, Inventario

jueves, 28 de enero de 2010

Síndrome

Todavía tengo casi todos mis dientes
casi todos mis cabellos y poquísimas canas
puedo hacer y deshacer el amor
trepar una escalera de dos en dos
y correr cuarenta metros detrás del ómnibus
o sea que no debería sentirme viejo
pero el grave problema es que antes
no me fijaba en estos detalles.

Mario Benedetti, Inventario

domingo, 12 de julio de 2009

Como siempre

Para G., que hoy cumple años: Viste? Nuestras playas también cumplen años, y sin embargo siempre nos gustan.















Aunque hoy cumplas
trescientos treinta y seis meses
La matusalenica edad no se te nota cuando
en el instante que vencen los crueles
entrás a averiguar la alegria del mundo
y mucho menos todavia se te nota
cuando volás gaviotamente sobre las fobias
o desarbolás los nudosos rencores

buena edad para cambiar estatutos y horoscopos
para que tu manantial mane amor sin miseria
para que te enfrentes al espejo que exige
y pienses que estás linda
y estés linda
casi no vale la pena desearte jubilos
y lealtades
ya que te van a rodear como angeles o veleros

es obvio y comprensible
que las manzanas y los jazmines
y los cuidadores de autos y los ciclistas
y las hijas de los villeros
y los cachorros extraviados
y los bichitos de san antonio
y las cajas de fosforo
te consideren una de los suyos

de modo que desearte feliz cumpleaños
podría ser injusto con tus felices
cumpledías

acordate de esta ley de tu vida

si hace algun tiempo fuiste desgraciada
eso también ayuda a que hoy se afirme
tu bienaventuranza

de todos modos para vos no es novedad
que el mundo
y yo
te queremos de veras

pero yo siempre un poquito más que el mundo.

Mario Benedetti, De otros diluvios

[Una vez más, gracias a Daniel, por su idea de colocar esta webcam que nos permite estar un poco más cerca]

lunes, 18 de mayo de 2009

No voy a irme


No voy a irme así nomás. Tendrán que echarme sin motivo. Yo y mis talones en la tierra decidimos no, que aguantaremos.

Pueden mandarme vendavales o filatelias del agravio: la colección de mis descuidos, de mis erratas, de mis queridos disparates, de mis tropiezos evitables, de mis inútiles extravagancias, de mis escándalos de ateo.

No voy a irme así nomás, por algo aquí me concibieron y fui nacido y caminé descalzo sin herirme, dialogando con el silencio y con el mar y con las nubes, con lluvia y sol tan incesantes y siempre con algún secreto, minúsculo o tremendo pero mío, como una forma de eludir cierta carcoma inevitable.

No voy a irme así nomás. Si soy superfluo o desolado, la trayectoria de mis culpas se va y regresa con lo aprendido, y yo la espero aquí en mi noche.

No voy a irme y si me voy, será para estudiar la nada.

Mario Benedetti, Vivir adrede