Teoría de la evolución

Seguramente, Darwin tenía mucha razón cuando escribió "El Origen de las Especies" y se dedicó a hablar de la supervivencia del más adaptado, de la selección natural, y todas aquellas historias que tuve que estudiarme alguna vez. Y cuando habló del origen del hombre y aseguró que descendía del mono, era evidente que las pruebas que dio, no dejaban ni dejan mucho lugar a dudas (sobretodo, en algunas ocasiones). Pero, ¿ya está? ¿La evolución se paró allí o qué?

Pues no, porque la historia sigue... Estudios recientes basados en la observación cotidiana de los comportamientos humanos (...) ponen de manifiesto que la evolución (o mejor dicho, la "desevolución") de la especie, continúa.

A saber... Los niños y las niñas son prácticamente iguales hasta que cumplen los 10 años de edad. Hasta ese momento, las diferencias que existen entre ellos son mínimas. Pero es la única vez que lo son... Sí, porque a partir de esa edad, las niñas empiezan a evolucionar a chicas, a muchachas, y enseguida, se convierten en mujeres. Casi no da tiempo a apreciarlo porque es una evolución muy natural y sin mayores historias.

Pero los niños, no. Los niños no evolucionan. Los niños degeneran. Primero al estadío de "niñato" (con o sin moto). Y pueden estar en esa etapa treinta o cuarenta años. Luego, siguen degenerando a "tío" (con o sin cerveza). Y se sienten orgullosos de serlo. Y por último, caen en picado y degeneran a "viejo verde" (con o sin dentadura). Está claro que la evolución no existe para ellos... Triste, pero cierto.

Y aunque lo ideal sería evolucionar todos a "personas", sin distinciones de ninguna clase, aún somos incapaces de conseguirlo. Incluso, a veces, da la sensación de que la humanidad entera desevoluciona y vamos hacia atrás como cangrejos. O cuesta abajo y sin frenos, que viene a ser lo mismo.

Así mismitico es, sí. Y hasta aquí, mi teoría de la evolución humana. No creo que ande muy desencaminada con todas estas afirmaciones. De lo que sí estoy segura es de que a mucha gente, gracia no le hará. Vamos, que yo, como siempre, "making friends"...

Tengo un amigo al que, precisamente, no le hizo mucho chiste oír esta teoría. Ya ves, el único al que yo habría puesto, sin lugar a dudas, como excepción a toda la argumentación. Aunque, claro, no se puede decir que sea muy objetiva con él, así que, igual me equivocaría tb... O no...

Frasecilla célebre del día: "Vamos a volver a la época del mono con la piedra, para abrir la nuez" (E.F)

La satisfacción del trabajo en equipo

¿Hay algo más gratificante y estimulante que trabajar con gente tan coherente y tan eficaz? ¿Algo mejor que estar al lado de un equipo humano que sabe hacer tan bien su trabajo y, además, facilitarte a ti el tuyo? ¿Algo mejor que saber que nunca se equivocan y todo lo hacen bien?... Guau, qué lujo, ¿no?

Sí, sí, y no os preocupéis, que si algo va mal ya intentaremos entre todos darle solución. Y a nadie se le ocurrirá jamás echarle la culpa a los demás. No, porque sería un irresponsable y un cobarde... Pero eso nunca nos podrá pasar a nosotros, que somos un dechado de virtudes. Hombre, por favor...

Y si algo sale bien, será porque todos hemos estado ahí, haciendo las cosas lo mejor posible, y nadie se echará flores porque, ante todo, nos puede la modestia.

Y si alguna vez, por casualidad (que no por costumbre), alguno metemos la pata, nos faltará tiempo para reconocer nuestro error e intentar enmendarlo con la ayuda de los demás. Sí, porque la soberbia no es uno de nuestros defectos, y dejaremos que nos digan dónde nos hemos equivocado, para aprender de ello y evitar caer allí de nuevo.

Y nadie te dará los datos erróneos para que te vuelvas loco intentando cuadrarlos.
Y nadie intentará pasarte por encima cuando te cojas unos días de vacaciones.
Y nadie querrá hacerte beber agua de una botella aliñaíta con "perfume".
Y nadie jugará al baloncesto en sus ratos libres.

Y es que, ante todo, somos una piña y sabemos trabajar...

Frasecilla célebre del día: "... la rabia, coño, paciencia, paciencia..." (S.R.)

Un antes y un después

Pues ná. Aquí estamos, intentando sobrellevar el "pre-día D". Y es que, desde hace algo más de dos meses, algunas criaturicas vivimos en un estado de desasosiego y de incertidumbre que no podemos con él. Tb es verdad que, al fin y al cabo, yo estoy fuera y lo vivo de lejos. Pero la empatía es lo que tiene.

Mañana es el "gran" día. Y esperemos que todo vaya rodado, porque si bien es cierto que la razón y la verdad sólo tienen un camino, tb es cierto que esto es una obra de teatro en la que, el que mejor actúa, es el que al final se lleva los aplausos y el éxito (gracias, MC).

Como dijo hace un par de semanas un "pseudo-amigo" pintado de azul que tengo por ahí, "siempre habrá cuatro fechas importantes en la historia: el nacimiento de Cristo, la caída del Imperio Romano, el 11 de septiembre (de 2001) y el 28 de julio de 2008"... Y a partir de este 28 de julio, empezará todo a contar de nuevo.

Así que sí, hoy es "el antes" y pasado mañana, será "el después". Y mañana no es el final, no. Mañana es el principio... El primer día del resto de nuestra vida.

Frasecilla célebre del día: "No padezco de estrés, pero soy portador".

El comienzo...

Sí, esto es el comienzo... "El principio de todas las cosas", que diría cierto mago blanco de cierta película que me encantó... Aunque, bueno, si soy sincera, en realidad todo comenzó cuando yo andaba por mis diez o doce años de edad. Desde entonces, nunca he dejado de escribir. Siempre me ha gustado plasmar los pensamientos y las ideas sobre un papel. Seguramente, porque siempre me ha resultado más fácil escribir las cosas que decirlas en voz alta... Y es que, para decirlas, hay que... "decirlas". Así que, ahora, en pleno siglo XXI, lo voy a poder ir haciendo de esta manera virtual.

Lo cierto es que me ha costado decidirme, dicho sea de paso. Sí, porque nunca se me había ocurrido hacer algo como esto. Simplemente, porque las cosas que me pasan habitualmente por la cabeza, las escribo sólo para mí: Para aclarar ideas, para ordenar pensamientos... Aunque tb es verdad que algunas veces he tenido la necesidad de que gente importante de mi vida leyese algunos escritos, cartas, historias...

Pero hoy he decidido romper con todo eso. Ahora toda la gente que quiera y a la que le interese, podrá leer tranquilamente mis días de alegría o mis momentos de ofuscación. Sí, porque de todo hay en "la viña del Señor" y "haberlos, haylos". Je!

Un saludo a tod@s los que se asomen por aquí y deseen comentar lo que quieran.