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lunes, 11 de marzo de 2013

Esa lluvia traicionera

Menuda semana llevamos, ¿eh? Que no para de llover ni ná. Y no es que me importe, porque en realidad, a mí me mola que llueva. Pero ea, ya sabéis la que se arma con los puñeteros desbordamientos y las inundaciones; o con los atascos, que parece que a la gente se le olvida cómo se conduce cuando llueve; o con la gente que va por la acera y lleva paraguas, que se creen que van ellos solos por la calle, y no veas lo que incordian... -"Por Dios, o pasas o te apartas, pero no te pares en mitad de la calle, que los demás también queremos pasar, joeeeeee"-.
Bueno, para qué os voy a decir , si seguro que vosotros también lo vivís así...

El caso es que imagino que tambiés os habéis fijado de que a ratos llueve pa'bajo. Vamos, lo normal. Otra veces, pues llueve pa'rriba, sobretó si pisas una baldosa de esas simpaticonas que esté una mijilla suelta. Y algunas veces, pues también llueve de lao, dependiendo de la ráfaga de viento que haya en ese momento.

Y eso pasó el otro día, que le dio por llover de lao. , sólo diez minutos. Pero vamos, lo suficiente para que todo el balcón, pues se llenase de agua. El tejaíllo que hay que evita que el balcón se moje cuando llueve pa'bajo, no sirve de cuando le da por llover de lao. Y eso, que la cortina también se puso chorreando, y ... el pobre Canijo que estaba en su jaula, en el suelo del balcón, pues...

Canijo punki - Fotillo de la Lou
Angelico, que parecía un cuervo, negro. De hecho, pensé en cambiarle el nombre, o sea que... 
En cuanto lo metimos dentro del piso y le abrimos la puerta de la jaula, fue buscando el calorcico humano. Vale, y también las ropas de la mesa camilla, que no es que sean muy humanas, pero sí que son mú calenticas. 
Pero como se notaba raro el pobre, y no podía volar, se puso él a secarse las plumas. Este pollo es un espectáculo, ya lo sabéis, ¿no?

Canijo arreglándose una miaja - Fotillo de la Lou

Y de pronto, se "vino abajo". Vamos, que le dio un bajón y se quedó traspuesto. Parecía que había envejecido diez años en cuestión de minutos. Tó encorvao, en plan cansao... 
No me digáis que así, en esta posición, no os recuerda a alguien...
 
Canijo "encorvao" - Fotillo de la Lou

Porque yo, cuanto más lo miraba, más me recordaba al Señor Burns. Y no sé por qué...

:)
Ale, gente, ¡feliz semana!

jueves, 18 de febrero de 2010

Se veía venir

Claro que se veía venir. Con la que está cayendo (literalmente hablando), lo que aún me sorprende es haber durado tanto.

, que hoy mi jefe me ha llamado a su despacho y me ha hecho sentarme (qué considerado) para decirme que he terminado. Vamos, que ya mañana estoy de vacaciones. Que la almazara está cerrada; que con tanta lluvia no entra aceituna, y eso, que me cogiese los días que me corresponden de vacaciones, y después, pues ya veremos. Sí, ya veremos, porque según me ha dicho, queda mucha aceituna por recoger, pero no saben si la cogerán o no; que tienen que hacer números, porque la aceituna está podrida, en el suelo, congelá... Vaya, un desastre...

Esta vez ha tenido que ser él el que me diese la noticia, porque la muchacha de laboral, a la que siempre le toca hacer el trabajo sucio, se había pillado unos días de vacaciones y no vuelve hasta el martes.
Ha sido para decirle:-"¿Ves como no podía venir por las tardes ni los fines de semana? ¿Pa qué? Si de todas formas luego me echáis y ya está"-. Pero, bueno, me he aguantado. Cosa rara en mí, todo hay que decirlo.
Sí, porque cuando me ha dicho:-"Y si volvemos a la actividad y te volvemos a llamar, ¿puedes venir los sábados?"-. Me quedo mirándole y digo:-"Pues no. Los sábados tengo cosas que hacer"-. Menuda cara de consternación me ha puesto...
Que sí, joé, estoy ocupá aunque sea ejerciendo de chófer para la jefa, yendo de supermercado en supermercado... O estando tirá en el sofá, viendo la tele... O panza arriba en la cama, leyendo un libro... Pos anda que no hay cosas que hacer los fines de semana, ¿eh?

Y ya está. A ver, que yo lo entiendo, que si no hay trabajo para mí, pues lo normal es que me echen, ¿no? Ya digo que, por lo menos esta vez, ha sido él el que me lo ha explicado todo personalmente. Para mí, suficiente.
Cuando se ha despedido, me ha dicho:-"Bueno, Lourdes, que lo siento"-. Y yo:-"Sí, bueno, más lo siento yo"-. Y he pensado:-"Y no te digo que me devuelvas mis bombones, porque a saber dónde estarán ya, que si no..."-. :)

Pues nada, que a partir de mañana vuelvo a estar en el paro. Ale, otra más en la lista de los casi 5 millones.

Aprovecharé para terminar un libro que empecé en Navidad, y para volver a ponerme en forma, que no me he subido en la bici desde hace más de tres meses, y esto no puede ser.
Ea, que el que no se consuela es porque no quiere.

lunes, 28 de diciembre de 2009

Sigue lloviendo, sigue lloviendo...


Y con la que está cayendo, que no deja de llover, y que da lluvia en Andalucía hasta por lo menos Reyes, yo me pregunto: ¿No me darán vacaciones anticipadas en la empresa? Porque si llueve, no se puede entrar a recoger aceituna. Y si no se puede recoger aceituna, la almazara no funciona. Y si la almazara no funciona, la Lou, que se dedica a analizar los productos de dicha almazara en el lab, no le sirve a su jefe pa ná.

Vamos, que aunque yo no esté allí sentá todo el día en una silla porque en el laboratorio siempre hay cosas que hacer, eso como que mi jefe no lo ve (o no lo quiere ver). Y claro, parece como si la Lou no hiciese en tó el día y estuviese cobrando un sueldo mientras se rasca la barriga. El tío debe pensar que ya tengo un esconchón de tanto rascarme, porque en dos semanas no he tenido que hacer ni un análisis de orujo y ni uno de aceituna.

Además, como yo he dicho siempre, nunca me he notado parte de esa empresa. Cuando me llaman, voy porque me gusta estar allí y no tengo nada más estable. Porque los compañeros son geniales y el trabajo de laboratorio me encanta. Pero cuando me tienen que echar, ni se plantean más nada, y le piden a la muchacha de laboral que me llame para que sea ella la que me dé la noticia. Y me fastidia, claro.
Así que, si yo no me noto parte de la empresa, es porque la empresa cuenta conmigo sólo y exclusivamente cuando les interesa. Y si no les interesa, "si te he visto, no me acuerdo".
Vamos, lo de siempre. Llevo ahí cinco años y todavía no termino de acostumbrarme a las (malas) formas que tienen. Y no creo que me acostumbre nunca, la verdad...

Así que, viendo las noticias esta tarde, cuando han hablado del temporal y de que vuelve a llover otra vez, mi padre ha sentenciado:-"Seguro que te dan vacaciones cualquier día de estos"-.
Pues eso, que igual no va muy desencaminao.

Vale, ¿hacemos una porra? Sí, se admiten apuestas para ver cuánto duro en el trabajo esta vez...
:)

martes, 22 de diciembre de 2009

Pues... no!

Pues eso, que no. Que no soy millonaria... Aunque tampoco entraba en mis planes serlo este año, dicho sea de paso. ;)
Pero como soy más feliz que unas castañuelas, pues como que me da un poco igual que el gordo se haya quedado en Madrid. Eso sí, como uno de mis jefes tuvo un momento iluminao el día que dijeron de comprar los décimos de lotería para la empresa, le pidió al encargado que comprase uno que terminara en 4...
Pues mira qué bien, que por lo menos el reintegro lo hemos pillado todos.
Ay, si es que de vez en cuando tienen hasta ratos de lucidez y todo. Muy de vez en cuando, es cierto, pero mira, alguno hay.

Además, hoy nos han dado las cestas de navidad. Más monas ellas... Vamos, que no me puedo quejar.
Justo ahora estaba intentando hacer un change y cambiar mis dátiles por las bolitas de coco de la Wiza, pero no ha colado. Que dice la criatura que hay dátiles de la cesta del año pasado todavía por su casa, así que... Debe ser que a su familia tampoco les hacen mucho chiste, ¿no?


Eso sí, el que algo quiere, algo le cuesta. Que como no ha dejado de diluviar en todo el día, cruzar hasta la oficina para recoger mi cesta ha supuesto que me haya puesto chorreando. Porque, aunque yo llevase paraguas, hoy llovía graciosamente de lado. Ir a la oficina también ha supuesto que me haya metido en todos los charcos que había por el camino. Que, bueno, en realidad sólo había uno pero ocupaba toda la placeta. Parecía una balsa aquello, vaya.

Pero eso, que me ha dado igual. Ya digo que estoy más feliz que unas pascuas (nunca mejor dicho). Y es que, seguramente, hay gente que me alegra la existencia un día sí y otro también, así que, ¿qué más se puede pedir?

Bueno, pensándolo bien sí que voy a pedir algo. Voy a pedir un deseo navideño. Eso... Que se me tiene que cumplir porque tampoco he sido muy mala del este año, o sea que...
Ale, pues mi deseo para hoy es que todos tengáis unos días muy felices y lo paséis muy rebien con vuestras familias y vuestros amigos.
Que no os vayáis muy lejos porque no me apetece perderos a ninguno de vista, ¿eh?
Y que cuidadito con los excesos, que ya se sabe en estas fechas lo que pasa... :)

FELIZ NAVIDAD!!!


Frasecilla célebre del día: "Para que todos los días sean Navidad, para que cada deseo se haga realidad, para que el mundo sonría al despertar, para que se abra la puerta y no se cierre más..."
(Rosana)

viernes, 18 de diciembre de 2009

Pasados por agua

Pues el día de lluvia pa nosotros se queda. Que una intenta ir una miaja mona a su comida de empresa, pero ya la lluvia se encarga de ponérselo bastante dificilillo. Menudo pelo erizao que tenía todo el mundo hoy. Y la ropa chorreando... Y los piececillos empapaos... Y es que si sólo hubiese sido eso...

Porque el día en sí ha sido un completo desastre. Que ya dije una vez que cuando el día va de leches, hasta las hormigas se ordeñan, ¿no?... ¡Pos eso! Que cuanto menos tiempo tienes, más problemas surgen. Que cuanto más pronto necesitas acabar, más tarde se te hace... Vamos, que seguro que os suena...

Y ya, para colmo de males, la inspectora de sanidad. Que la mujer viene de vez en cuando a darse una vuelta por la empresa para comprobar que los planes de higiene y la trazabilidad se cumplen. Pues no ha tenido otro día para aparecer por allí más que hoy. Y así, sin avisar ni nada.
Que mi compañera la Wiza, que es la que lleva el tema de sanidad, se pone atacá de los nervios, el angelico, cuando la ve aparecer.

Y claro, mientras la inspectora ha dado su vuelta de rigor por la empresa viendo las instalaciones, ha escrito el informe de incidencias, y se ha ido o no, pues nos han dado las uvas en el lab.

Y como no ha dejado de diluviar en todo el día, el atasco de coches por la carretera era monumental. Vaya, que nosotras hemos llegado tarde al restaurante donde era la comida. Una hora y pico tarde... ¡Casi !
Ya estaban todos los demás allí, sentados a la mesa, con mis jefes de anfitriones. De hecho, nada más entrar al local, sin saber en qué sala estaban y sin necesidad de subir al comedor, se lo he dicho a ella:-"Nena, no tienen pérdida. Sigue el vozarrón de tu jefe, que se le oye por ahí arriba"-.
Y claro, al verlos a todos ya sentados, salto:-"Anda que nos esperáis, ¿eh? ¡Qué mala gente!"-. Si es que no me callo ni debajo del agua, joé...
Pero sí que nos estaban esperando, porque aún no habían pedido la comida, y mi jefe tenía el móvil en la mano porque nos estaba llamando en ese momento. Vamos, que encima me han montado un pollo por chincharles más de la cuenta...
-"Vaaaaale, no os pongáis así, que lo he dicho en broooooma"-.

Lo cierto es que no ha estado mal el rato allí. Por lo menos, para intentar olvidar otras cosas. Y además, como es que soy un bicho, les he amenazado con subir las fotos al "feis". Que se han puesto todos más suaves que un guante cuando se lo he dicho, vamos.

¿Lo peor de la comida? Pues que después hay que volver a la empresa a seguir trabajando. Bueno, a hacer como que seguimos trabajando, que tampoco nos vamos a agobiar, ¿no? Pero, claro, como los jefes son los primeros que se levantan para volver, ¿qué vamos a hacer las demás criaturicas? Pos remolonear un rato y volver también... ¡Qué remedio!

Bueno, y aquí, la mejor foto de toda la comida. Un compañero, al que la cámara de fotos le ha complicado la vida más de la cuenta, por lo visto. O quizás, que para él era toda una novedad ver agua en una copa...
¡Uy, qué mala soy!
:)