Corina Wayne
La pasada noche de sábado de este caluroso mes de julio del año en curso, la banda madrileña Hote Valmont presentaba su reciente disco homónimo en la Sala Gruta '77 en el barrio de Carabanchel. Como invitados estaban Corina Wayne, una formación madrileña también que tienen pocos conciertos en su zurrón, pero una buena propuesta, mezclan rock, sonidos fronterizos, algo de surf y en formación de quinteto tienen temas en inglés y otros en castellano (los que más dominan) y canciones todavía por definir en algunos de sus remates, pintan bien.
Y salieron a escena Hotel Valmont, a defender su último disco que tocaron casi entero. Es la tercera vez que los veo en directo, y desde luego ha sido la más salvaje y rockera de las tres, de hecho su propuesta del álbum, un trabajo de lo más interesante con excelentes canciones, suena todavía más rockera en vivo, subiendo el tono de la propuesta inicial de estudio. Como no podía ser menos también cayeron canciones de sus antiguos discos, sobre todo del venerado Señales, su disco de debut, del que he hablado varias veces. La formación que tocó fue Manuel L. Sacristán a la voz, guitarra acústica y eléctrica, Beto a la guitarra solista, Dani Alcaire al bajo y Javier G. Rodríguez a la batería. Herederos del mejor rock callejero y urbano, con toque macarra en muchas canciones, despacharon unas guitarras fuertes e incluso sucias en algunos momentos que moldean grandes temas con profundas letras. Como dije en su día, una banda que sigue un camino indestructible, y lo siguen demostrando, sudor, pasión y guitarras, no hay más.
Sonaron del último La mentira, Dos rombos, Oxidado, Los muertos vivientes, Amapolas, Robot (qué maravilla), Miserables y Marrakech. De Señales su primer disco de 2011 cayeron El rey lagarto, Tren de medianoche, 1959 y La señal (última del concierto). También tocaron Johnny Cougar de El largo viaje (con anécdota incluida).
Os dejo con Miserables tal y como sonó.