Porco Rosso
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jueves, 20 de diciembre de 2012
MARLEY de Kevin McDonald - 2012 - ("Marley")
Documental sobre el maestro jamaicano del reggae Bob Marley, su vida, su obra, sus ideas y su muerte.
Nunca he sido muy fan de Bob Marley. Es más, conozco apenas sus cuatro o cinco canciones míticas, las que ponen en todas las fiestas, las que ponen en todos los anuncios y las que cantan en todos los karaokes. No por nada en especial: simplemente, el reggae nunca ha sido mi estilo preferido. Y el documental "Marley" me ha apasionado, me ha dejado completamente anonadado: con eso lo digo todo. Al parecer, es la primera vez que la familia del gran artista jamaicano ha dado el permiso para utilizar todo el material sobre su vida y su obra que aparece en la película, que es un repaso exaustivo de más de dos horas sobre todo lo que le aconteció. Kevin McDonald sabe tomar todo este material y completarlo con entrevistas a todos los que rodearon a Marley (familiares, amigos, miembros de su banda, ex compañeros musicales, diversos expertos, otros artistas y otros famosos...) y dotarle de una continuidad y un ritmo magistrales para conseguir que las mencionadas más de dos horas de metraje se pasen en un vuelo. Multitud de asuntos se concentran en la obra: música por supuesto, pero también conflictos artísticos varios, política, rastafarismo, mestizaje, racismo, familia, enfermedad, muerte, amistad, pobreza, elitismo, sexo, machismo, droga, marginación, memoria histórica o una visión crítica de los fenómenos de masas. Y todo ello por medio de las mencionadas entrevistas, imágenes de archivo, conciertos (cómo no), panorámicas (sobre todo de la amada Jamaica del cantante) y documentos hasta ahora inéditos. La banda sonora, por supuesto, maravillosa.
Pero hay algo que hace todavía más grande a "Marley": el hecho de que no es un simple documental que se limite a alabar al personaje que homenajea. Bob Marley es mostrado como un grandísimo de la música mundial, como un hombre que supo salir de la marginación de un barrio chabolista y romper con el racismo hacia los mestizos, como un patriota conscuente que no quiso abandonar su país en pos del Sueño Americano, como un conversador abierto con su propia casa abierta a todos de par en par, como un filántropo preocupado por la pobreza de los suyos y como un personaje que llegó a arriesgar su propia vida para poner un poco de orden en las luchas políticas jamaicanas, que llegaron a ser auténticas guerras fratricidas en las calles. Y, sin embargo, y por medio de testimonios bastante duros hacia su persona (sus hijos no le ponen nada bien: es más, le llegan a destripar incluso), descubrimos que también era, al parecer, un padre duro y rancio y bastante injusto que predicaba lo que no hacía, un machista que demasiadas veces no respetó a sus mujeres y amantes, un negligente en algunos aspectos de su vida y un incosecuente en otros. No sabemos si esto es verdad (como tampoco sabemos si es verdad mucho de lo bueno que dicen de él), pero, a través de personas que le conocieron, queda esbozado el Bob Marley más humano, el Bob Marley lleno de defectos. "Marley" no es el documental de un dios perfecto, y esa es su principal valía final. Creo que éste es uno de los mejores documentales del año que ya vamos a cerrar.
sábado, 30 de abril de 2011
LA LEGIÓN DEL ÁGUILA de Kevin McDonald - 2011 - ("The Eagle")
En el año 140 después de Cristo la orgullosa Roma es dueña de casi todo el mundo conocido. Sin embargo, la fría, neblinosa y hostil tierra de Britania se le sigue resistiendo: incluso su poderosa Novena Legión ha caído ante los brutales bárbaros que la pueblan y ha desaparecido sin dejar rastro. El jefe de legionarios Marco Aquila, hijo del líder de esta fuerza caída en desgracia, llega a estas tierras decidido a encontrar el Águila Romana que su padre perdió y a recuperar el honor de su familia. Por eso, junto a su esclavo britano Esca, al que ha salvado la vida y al que une un pacto de sangre, se adentra en Britania. No sabe lo que le espera en este mundo salvaje e inexplorado... Sin embargo, Esca va a revelarse como el mejor de los aliados.
El enorme éxito de "Gladiator" de Ridley Scott en el año 2000 no sirvió para revitalizar el hasta ahora bastante olvidado género del cine de romanos o péplum (aunque muchos engloban dentro de esta denominación todo el cine que tenga que ver con los imperios occidentales de la Edad Antigua e incluso la historia bíblica), que ha tenido que esperar casi diez años para volver con una cierta fuerza tras el inicial empuje en 2005 y 2006 de las dos soberbias temporadas de "Roma" y el fulminante éxito, a partir de 2009, de la muy destacada serie sobre el esclavo rebelde "Spartacus", posiblemente la más existosa de este mismo momento tras la finalización del hit sin precedentes que ha supuesto "Perdidos". El péplum parece estar ya en buena forma por fin y, cuando casi a finales del pasado 2010 Neil Marshall estrenó la muy divertida película de aventuras "Centurión", llega ahora a las salas "La Legión del Águila", con la que comparte ambientación y tema. El séptimo arte ha retratado en innumerables ocasiones la relación de Roma con pueblos como el judío o el egipcio, las Guerras Púnicas contra Cartago, el mundo de los gladiadores, la llegada del Cristianismo, la rebelión del citado Espartaco o la caída del Imperio ante los bárbaros, pero lo cierto es que el asunto de la siempre infranqueable Britania ha quedado bastante olvidado, y es curioso que ahora lleguen dos películas casi seguidas basadas en los combates contra los antepasados de ingleses y escoceses.
En "La Legión del Águila" Kevin McDonald, apoyado en las muy solventes y carismáticas interpretaciones de Channing Tatum y Jamie Bell, desarrolla una película de aventuras al más puro estilo clásico en la que un romano y un britano habrán de entenderse a veces a su pesar para sobrevivir en la salvaje y fría Britania mientras buscan el rastro de la Novena Legión, que desapareció en estas tierras. Alejada del drama de conspiraciones de otras producciones péplum y más cercana a la acción desprejuiciada del "Centurión" de Marshall (aunque un poco menos sangrienta), el nuevo filme del director escocés se apoya conscientemente en bastantes tópicos del cine épico clásico para regalar un cuento sin pretensiones de amistad, camaradería y honor que, en mi opinión, se queda un poco cojo al mostrar una Roma bastante descafeinada y mucho menos cruel y realista que la que en los últimos años estamos acostumbrados a ver. En la misma mencionada cinta de Marshall el protagonista acababa renegando de su cultura (Roma es presentada tan salvaje como el mundo picto o más) y estableciéndose en las "tierras bárbaras" y en ésta el britano, a pesar de ser el esclavo del romano, termina acogiendo de alguna manera el sentido del honor de su amo y volviendo a una cultura "de adopción" que le condena a la marginación sólo por este honor. Me chirría este hecho, la verdad. Sin embargo, se puede perdonar, ya que "La Legión del Águila" no tiene ninguna pretensión salvo divertir y lo consigue, y mucho. Mención especial merece la fotografía de los esplendorosos paisajes del filme y la caracterización de las tribus britanas. Recomendable péplum de aventuras de sabor clásico.
viernes, 25 de marzo de 2011
EL ÚLTIMO REY DE ESCOCIA de Kevin McDonald - 2006 - ("The last King of Scotland")
Años setenta. El joven escocés Nicholas Garrigan acaba de terminar su carrera de Medicina. Ansioso de aventuras, se marcha una temporada a Uganda para trabajar en una misión humanitaria. Allí conoce, de pura casualidad, a Idi Amin, el nuevo presidente del país, el cual le invita a formar parte de su gobierno como su médico personal. Nicholas accede y entre ambos nace una amistad. Sin embargo, todo empieza a cambiar rápidamente: Amin resulta ser un hombre paranoico e inestable y un tirano sanguinario. Nicholas es testigo de cómo su amigo sume a Uganda en la miseria y en la destrucción. Pronto, él también es uno de sus blancos…
Kevin MacDonald es el nieto del también cineasta Emeric Pressburger (el compañero creativo de Michael Powell). Su primer largometraje de ficción fue “Tocando el vacío”, al que siguieron "El último Rey de Escocia", "La sombra del poder" y el peplum "La Legión del Águila". Creador ecléctico que toca toda clase de géneros, es un cineasta muy solvente en todos los aspectos, aunque aún es preciso esperar un poco para valorar su carrera en la ficción. También ha rodado los excelentes documentales "El Goliat de Chaplin", "Un día en septiembre" y "La vida en un día".
“El último rey de Escocia” está basada en la exitosa novela homónima de Giles Foden, escritor inglés que pasó parte de su infancia y adolescencia en Uganda, país que en él ha dejado una huella imborrable. La película, al igual que la obra mencionada, desarrolla la pesadilla de un personaje ficticio, Nicholas Garrigan, un joven médico escocés recién licenciado que, ansioso de aventuras, viaja a Uganda para desarrollar sus habilidades en una misión humanitaria. Allí, por una casualidad, conoce a Idi Amin, el nuevo presidente del país, con el que entabla una extraña y frágil amistad y de cuyo gobierno entra a formar parte tras ser nombrado su doctor personal. Una vida de lujos se abre ante él, y también de aventuras: va a vivir en directo una época de cambios y de avances en una tierra torturada. Garrigan cree en esta aventura, y también en los mencionados cambios. Es un testigo europeo de una etapa decisiva de la historia de uno de los países de África que más ha dado que hablar en las últimas décadas, y, al igual que Europa en aquel momento, y que todo el planeta, se siente atraído y casi fascinado por la persona de Amin, un hombre salido de la nada y lleno de carisma y de fuerza que puede ser la solución definitiva a los miles de problemas que hunden a Uganda en la miseria y en la corrupción.
Idi Amin cautivó, en los primeros tiempos de su mandato, a la opinión pública mundial y a una grandísima parte de su pueblo, a pesar de que también la disidencia contra su gobierno fue notable y practicante de una violenta oposición. Sin embargo, su persona empezó a rodearse de oscuros secretos, secretos que Garrigan empieza a descubrir horrorizado mucho antes que el resto del planeta. Idi Amin, un hombre en el ámbito privado paranoico, con extrañas crisis y creencias, lleno de contradicciones y de demonios interiores, se fue sumiendo poco a poco en una espiral de decadencia imparable, espiral de decadencia que también arrastró a su tierra. Temido y odiado por muchísimos ugandeses, murió exiliado en Arabia Saudí hace pocos años. Dejó miles de muertos. El filme de MacDonald muestra este mundo de oscuridad en el que sumió a su país: las desapariciones, las torturas, los asesinatos, las persecuciones implacables de los disidentes, las expulsiones racistas de asiáticos, los despilfarros, la corrupción, las enemistades creadas con los gobiernos vecinos, las colaboraciones con terroristas de otros países… Con planos muy cerrados y opresivos, retrata la obra, con una gran crudeza, la vida de Garrigan en la “corte” de Amin, un lugar de lujos donde las conspiraciones son constantes. Forest Whitaker borda de manera soberbia al terrible presidente (se llevó un merecido Oscar), mientras que James McAvoy también realiza una genial interpretación como su amigo médico, un hombre que termina luchando contra el dictador que le protegió y que le acogió e, incluso, contra sí mismo para poder escapar de un lugar del que se le termina impidiendo la salida. La película es una efectiva mezcla de drama con thriller, y está rodada con una gran intensidad y sin concesiones en las escenas de violencia, que son muchas. La trama se va cerrando sobre su protagonista haciendo que el espectador sufra junto a él su decepción y su kafkiana agonía. Los últimos minutos son realmente tensos, aunque se pueda intuir el desenlace. Como he señalado, Whitaker interpreta a Amin con una maestría sin par, aunque sí es cierto que el personaje del presidente podría estar algo más desarrollado, como muchos han comentado. Tal vez le falte más consistencia; hay partes de su vida y de su carácter que aparecen descritas como meros apuntes. A pesar de todo, no cae en el clásico tópico del dictador esperpéntico. Una película muy destacada en todos los aspectos.
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