Porco Rosso

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viernes, 1 de septiembre de 2017

VERÓNICA de Paco Plaza - 2017 - ("Verónica")


Junio de 1991. Verónica es una adolescente de Madrid que lleva una vida normal y corriente, aunque pasa por una crisis tras la muerte de su padre. Un día, en el instituto, con un par de amigas, intenta jugar a la ouija en un viejo trastero del centro, cuando nadie las ve, para tratar de comunicarse con él... Algo terrible ocurre. Algo diabólico y monstruoso.


Paco Plaza es, como su compañero de andanzas ocasional Jaume Balagueró, un director muy irregular. Es capaz de darnos cosas tan dignas como "El segundo nombre" o la primera "REC" y despropósitos infames como "Romasanta" o la segunda "REC" (la tercera a mi me parece también un rollazo patatero, aunque para muchos es una incomprendida obra maestra). "Verónica", su nueva película, basada en el "Expediente Vallecas", que en 1991 y 1992 fue uno de los casos más famosos de la televisión española (supuestamente el único expediente policial que hablaba de cosas inexplicables hasta aquel momento en el país) es puro tópico, pero puro tópico bien hecho. Maravillosamente hecho, diría. Adolescente maldita, juego de ouija, monja loca, demonio casero, maldición predecible, niños asustados, pero todo es delicioso para el amante del cine de terror bueno. Es cierto que esta película nos la sabemos de memoria, pero también es cierto que Plaza explota el lugar común del género con habilidad y nos presenta una historia llena de referencias bien puestas, con un humor muy gracioso (todo lo del anuncio de Centella es absolutamente desternillante), con unos personajes dignos y con una trama que no da gato por liebre, que va de lo que va sin pretender engañar o rizar rizos absurdos. Y además, los sustos son efectivos. Sí, hay inteligencia a veces en este maltratado género. Las apariciones dan su grima, los efectos especiales son los justos y necesarios y tienen estilo, se explota bien la sugerencia y el miedo a lo que no se ve (y se economiza todo esto hasta el final del filme con gran limpieza), no se abusa del efectismo de baratillo ni de los sonidos estridentes, la atmósfera está bien cuidada y, además, el aspecto ambiental está muy redondeado y lleno de referencias: ahora que está tan de moda revisitar décadas pasadas (los ochenta sobre todo), Paco Plaza nos lleva a unos nostálgicos años noventa españoles donde, tras la Movida Madrileña y sus sucedáneos, España entraba defintivamente en la modernidad y en Europa y empezaban a triunfar bandas míticas como Héroes del Silencio. Es verdad que "Verónica" tiene lagunas de guión. Hay cosas "por la cara", y cabos sueltos, y los personajes hacen tonterías y sobre todo el de la monja no sirve para nada y habla de forma misteriosa porque sí, porque a Plaza le conviene para articular la trama. Sin embargo, todo esto se perdona. Por cierto que los niños protagonistas actúan de forma maravillosa: por fin. Muy recomendable propuesta de terror español es ésta. Hay inteligencia en el género de vez en cuando, sí.


martes, 29 de julio de 2014

REC III. GÉNESIS de Paco Plaza - 2012 - ("REC III. Génesis")


Clara y Koldo se aman y están a las puertas del día más importante de sus vidas: su boda. Sin embargo, algo terrible empieza a suceder en el lugar en el que se va a dar la gran fiesta. Algo terrible que va a convertir ese momento tan especial en la peor de las pesadillas para ellos y para todos sus seres queridos...


Para la tercera y la cuarta entrega de su saga "REC", Jaume Balagueró y Paco Plaza se separaron. El primero va a estrenar a finales de este año, concretamente en Halloween, "REC IV. Apocalipsis", la película que cerrará la cuatrilogía de manera supuestamente definitiva, mientras que el segundo estrenó hace dos esta "REC III. Génesis", que de génesis tenía bien poco y que fue más bien una película completamente independiente aunque ambientada, casi como una excusa, en el universo de "REC". En su día, "REC III. Génesis" me pareció un bodrio. Fue una película que dividió a todos: a unos les pareció genial y a otros infumable. Hoy sigue siendo así. Sin embargo, mi opinión sobre ella ha cambiado ciertamente para bien conforme la he ido madurando aunque tampoco puedo decir que la cinta sea una maravilla. Paco Plaza se desmarca de las líneas argumentales de las dos primeras entregas de la saga y se saca de la manga (tanto en el buen como en el mal sentido) una historia completamente aparte que cambia el tono anteriormente visto por completo. Se acaba el "falso documental" (por suerte, por otra parte; era ya cansino y nada efectivo en "REC II") y se combina el drama con la comedia más desprejuiciada y delirante. "REC III. Génesis" bebe más ya de clásicos del cachondeo gore como "Posesión infernal" o "Braindead" que de clásicos del "mockumentary" como "Holocausto caníbal" o "El proyecto de la Bruja de Blair". El cambio es total. Pero este cambio habría sido mucho más digno si Paco Plaza optase por rodar una comedia pura, y no la mezcla extraña y sin mucho criterio de comedia y drama que rodó.


"REC III. Génesis" se mueve constantemente entre las buenas y las malas escenas. Tiene ritmo y está excelentemente rodada, eso es innegable, pero alterna sin cesar momentos geniales como algunos puntos de acción destacados (los de los sótanos por ejemplo y algunas escenas con la sierra eléctrica), algunos momentos absolutamente de locura (en el buen sentido) como los de los altavoces (los que la han visto me entienden) y un desenlace de infarto (es divertidísimo en todo su demencial desmadre gore) con otros completamente deficientes como las muertes absurdas de numerosos personajes que pierden todo su interés inicial de un plumazo, las apariciones gratuitas de la cansina Niña Medeiros o bastantes y soporíferas escenas de carreritas y grititos repetidas hasta la saciedad.


Como he dicho, además, la combinación de drama y comedia no funciona: en una escena muy dramática unos niños mueren acorralados por los monstruos en un autobús y en otra los novios sueltan diálogos chorras y tontos que no vienen a cuento mientras matan zombies. Esta indefinición no ayuda a la película desde mi punto de vista. Por otra parte, tampoco se libra de tópicos gruesos y lugares comunes (aunque algunos traten de ser homenajes, apestan a manidos, y son demasiado descarados). Sí hay que decir que los actores tienen gracia y en especial Leticia Dolera está de muerte (en todos los sentidos) y en un papel magnífico y plenamente pensado para ella. Pero, en general, "REC III. Génesis" me parece una película irregular, con momentos buenos y otros completamente descolocados.


lunes, 28 de julio de 2014

REC II de Jaume Balagueró y Paco Plaza - 2009 - ("REC II")


En un edificio del centro de Barcelona han ocurrido extraños acontecimientos que todavía no han salido a la luz. El lugar está precintado y rodeado por las fuerzas de la ley y un grupo de bomberos ha entrado en el y no ha vuelto a salir. Una unidad de GEOS es enviada para poner orden y averiguar qué es lo que ha ocurrido. En el interior van a descubrir la peor de las pesadillas inimaginables.


Tras el éxito fulminante de "REC" en 2007, que propició un remake norteamericano al año siguiente llamado "Quarantine" (que paso de comentar porque es LA MISMA película rodada con otros actores; es decir, que tiene interés 0), Jaume Balagueró y Paco Plaza dirigieron, de nuevo aliados, "REC II", una segunda parte de la cinta que, por desgracia, no fue más que un calco encubierto de dicha cinta (de nuevo fue además un "falso documental") empeorando lo bueno que en ella había. Las escenas son las mismas (alargadas muchas innecesariamente), los sustos son los mismos (algunos hasta están repetidos, leñe), los personajes son cartones (y algunos estúpidos: vaya mierda de GEOS, con perdón; parecen unos pandilleros adolescentes), los diálogos son terribles y el metraje, totalmente falto de interés, está extendido de forma gratuita con giros forzadísimos. Para colmo, algunas escenas dan auténtica vergüenza ajena y podrían ocupar un lugar de honor sin problemas en la antología del disparate: esos niñatos colándose en el edificio como Pedro por su casa o ese GEO (supuestamente especializado en "situaciones difíciles") suicidándose a las primeras de cambio son de infarto. Balagueró y Plaza la pifiaron a base de bien con esta película: todo el buen hacer que desplegaron en la anterior está aquí tirado vilmente por los suelos. Nada recomendable es "REC II". Es basura con todas las letras.


ATENCIÓN: SPOILER. Un 10 (nótese la ironía) a los directores por cambiar de golpe y porrazo la trama vírica y más "realista" de la primera entrega por una típica y tópica de conspiraciones de corte satánico con demonios, dimensiones paralelas chorras y curas cutres que saben cómo luchar contra esos demonios. La esencia de la primera "REC", tirada a la basura. Mal. Fatal.


domingo, 27 de julio de 2014

REC de Jaume Balagueró y Paco Plaza - 2007 - ("REC")


Ángela es una reportera de Barcelona que trabaja en un programa en el que se muestra la vida diaria nocturna de distintos colectivos de la ciudad. Esta noche la va a pasar con los bomberos, a los que va a acompañar a una misión aparentemente rutinaria: en un viejo bloque del centro una anciana se ha vuelto misteriosamente loca. Nadie, ni siquiera los vecinos del edificio, saben qué es lo que ocurre. En segundos, comienza la pesadilla: todos se ven atrapados en su interior; la policía rodea y precinta el lugar y algo desconocido les ataca de repente…


Verdaderamente interesante y estimulante me resultó en su día “Rec”, de Jaume Balagueró y Paco Plaza, dos directores que han seguido siempre trayectorias irregulares pero que en esta ocasión realmente supieron sacar adelante una excelente película de horror que insufló aire fresco en el habitualmente malo (cuando no inexistente) panorama del cine fantástico español. Tomando como base el "mockumentary" o falso documental de terror o como quiera que se llame (el que llegó de la mano de obras como “Holocausto Caníbal” o “El proyecto de la Bruja de Blair” y que hoy está tan sobreexplotado), supieron ambos construir una absorbente y delirante pesadilla que (y eso es difícil ya) consiguió angustiar y por momentos incluso aterrorizar al espectador e incluso sorprenderle (lo cual es todavía más difícil). En “Rec” podemos ver lo que graba la cámara de unos documentalistas de un programa de televisión nocturno durante lo que es, en un principio, una rutinaria misión de unos bomberos que han de socorrer a una anciana de un viejo bloque de viviendas del centro de Barcelona que parece haberse vuelto loca misteriosamente… A partir de aquí, comienza la terrible pesadilla de la que nada revelo.


El filme, de muy corta duración (apenas 85 minutos), es agilísimo, directo, conciso, y su ritmo, impulsado por su realista y cortante montaje, resulta en todo momento frenético. El objetivo: que el público no pare un segundo, que lo pase realmente mal y que sufra en sus carnes todo lo que los protagonistas sufren. Violentísimo, muy crudo y con algunas escenas desprejuicidamente gore y feístas, “Rec”, que tiene también ligeros toques de comedia negra y que, como otros filmes de terror, contiene algunas parábolas sociales (en este caso sobre el racismo, la intolerancia o el despiadado abandono de los ciudadanos por parte de los gobiernos ante las crisis), sabe revitalizar perfectamente tópicos mil veces vistos en otras películas de su género para insuflarles aire fresco, lo cual a dicho género le viene muy bien. Muchas escenas de “Rec” se quedaron grabadas en las retinas de los espectadores: el primer encuentro con la anciana, el acercamiento a la niña, la última subida por las escaleras o la escena final en el ático oscuro (genial). La obra fue un éxito total que ha propiciado hasta ahora dos secuelas (una muy mala y otra muy irregular para mi gusto) y que a finales de este año tendrá su cuarta y al parecer última entrega.


domingo, 12 de mayo de 2013

ROMASANTA. LA CAZA DE LA BESTIA de Paco Plaza - 2004 - ("Romasanta")


1851. Galicia. La joven Bárbara vive con su hermana Josefa en un caserío cerca del bosque. En la zona, según creen los lugareños y las autoridades, ronda un asesino, ya que están sucediéndose misteriosos y brutales crímenes que dejan cuerpos destrozados. Algunos incluso hablan ya de que este asesino es realmente un hombre lobo. Josefa tiene una relación con Manuel, un vendedor ambulante por el que Bárbara también se siente atraída y que parece ser el único hombre que se atreve a internarse en los bosques en solitario. Algo está a punto de ocurrirle a estas dos mujeres... Algo terrible relacionado con un secreto que guarda el propio Manuel.


Después de la excelente "El segundo nombre" Paco Plaza tuvo un patinazo con su segunda película, esta "Romasanta", basada libremente en la historia supuestamente real (aunque está sumida en las nieblas de la leyenda) de Manuel Blanco Romasanta, un supuesto "Sacamantecas" conocido en Galicia como "El hombre lobo de Allariz" que según decían era un licántropo real. Técnicamente la película es muy destacada pero falla en lo principal, en su trama, y si eso falla pues tristemente falla el resto por muy bien empacado que esté. Empezando con lo bueno, hay que decir que "Romasanta" goza de una ambientación preciosa y tan lírica como abrupta (la Galicia profunda de Plaza es magnífica y los paisajes están muy bien aprovechados), de una excelente fotografía, de un vestuario riquísimo, de unos efectos especiales verdaderamente destacados y de unas actuaciones en general buenas: Julian Sands brilla con luz propia y clava a un personaje ambiguo, misterioso, peligroso y lleno de morbo y a la vez de mal rollo y Elsa Pataky está solvente en su papel de mujer frágil pero decidida, mientras que los secundarios cumplen todos bien. Sin embargo, como he señalado, la trama falla y hace aguas por todas partes. Primero porque es errática y salta de un lado a otro a veces sin demasiada lógica (parece que haya habido cortes bruscos en el montaje incluso), y segundo porque los personajes actúan de forma a veces tampoco demasiado lógica y por ello terminan mal aprovechados y perdiendo de un plumazo el interés que despierdan en un principio (porque la primera parte de la película resulta interesante, es cierto). En especial, los de Gary Piquer y John Sharian están mal cuidados y no termina de quedar claro su papel final en la función (sobre todo el del segundo, un personaje muy potente en el inicio que queda reducido a la nada sin una explicación convincente).


Estos hechos consiguen que el espectador se pierda en muchos momentos y se aburra con una trama que parece que no va a ninguna parte alrededor de la primera hora de filme y que, cercana al desenlace, se corta de un tajo y sabe a poco porque precipita para colmo todos los acontecimientos. "Romasanta" tiene un cuerpo desarrollado a trompicones y un final muy brusco que afectan todavía más si cabe a su ya también brusco ritmo. Y es una pena, porque la premisa era interesante, los primeros diez minutos del filme de hecho lo son, los actores están como he dicho muy bien, la factura técnica es impecable como también he mencionado y los efectos especiales son verdaderamente buenos. Una pena: otra película española de terror que se estrelló. Fallida incursión de aura gallega en el mito de los "Sacamantecas" y los hombres lobo.

martes, 18 de septiembre de 2012

EL SEGUNDO NOMBRE de Paco Plaza - 2002 - ("Second Name")



La joven Daniela no se explica el misterioso suicidio de su padre, Teodore Logan, un rico y poderoso empresario. Además, pocos días después del entierro, su cadáver es robado del cementerio y aparece destrozado de forma ritual en un vertedero. Nadie le da una respuesta y la policía piensa que ha sido simplemente una gamberrada cruel y macabra. Daniela comienza entonces a ahondar en el pasado de su familia. Pronto, descubre cosas oscuras de las que nunca ha tenido conocimiento. Pronto también el mundo que le rodea empieza a cambiar.

El valenciano Paco Plaza es, junto a Jaume Balagueró, otro de los nombres más conocidos del cine fantástico español moderno. También especializado en el género del terror, ha dirigido tres películas y ha co-dirigido junto al mencionado Balagueró otras dos. Su estilo se aleja bastante del estilo del cineasta catalán, al que siempre aparece unido por sus trabajos comunes y del que es amigo. Las obras de Paco Plaza son, tanto en lo visual como en lo narrativo, más sobrias, menos efectistas, más comedidas en el campo de los efectos especiales y más pausadas que las de éste. Destacan en ellas una forma de rodar más clásica y unas muy destacadas atmósferas oníricas y siniestras poderosamente evocadoras cimentadas en una excelente fotografía. Sus personajes, hasta ahora, han sido seres comunes que se ven enfrentados a algo desconocido o a la verdadera naturaleza de otros personajes que creían conocer. Debutó con dos películas en el mismo año: el documental “OT. La película”, dirigida junto a Balagueró (cinta por la que ambos recibieron durísimas críticas –cuando en realidad fue un encargo, un mero trámite que ellos mismos pensaban olvidar-) y la excelente “El segundo nombre”. Más tarde, dirigió la fallida y muy floja “Romasanta”, su aproximación personal a los legendarios hombres lobo, “REC” y "REC II", de nuevo junto a Balagueró, y la para mi también fallida "REC III. Génesis".


La primera película de ficción de Paco Plaza, “El segundo nombre”, al igual que la ópera prima de Jaume Balagueró “Los sin nombre”, está basada en una novela de Rampsey Campbell. Es una producción española aunque rodada en inglés y con bastantes actores extranjeros. Comparte con el debut del catalán un asunto parecido: el de las sectas, aunque en este caso centrándose en los oscuros secretos que laten en las familias, que aparecen representadas como organizaciones ocultas. Erica Prior debuta como protagonista dando vida a una joven que, tras el misterioso suicidio de su padre, empieza a ahondar en su entorno más cercano, su familia y sus amigos, para descubrir lo que late en su interior, algo inimaginable y oscuro.


“El segundo nombre” es un thriller de terror psicológico excelente que, al igual que “Los sin nombre” (a la que pienso que es superior), no muestra nada que no hayamos visto antes pero que, sin embargo, lo hace de una manera excelente. La dirección, de aura clásica, es comedida en todo momento, alejada de efectismos y de golpes de horror fáciles. Explora el miedo a la institución familiar por medio de la sugerencia y para ello se vale de un ambiente suavemente siniestro, aunque en ningún momento presa de exageraciones artificiales, y de una violencia sin concesiones pero nunca absurdamente desbocada. La trama, interesante desde un primer momento, se sigue sin problemas y de manera tremendamente amena gracias a un buen pulso y un buen ritmo. Podemos decir que, sustentándose en argumentos que no son originales, tanto “Los sin nombre” como “El segundo nombre” logran resultar filmes muy destacados: el primero lo consigue por medio de lo grotesco y de lo estrambótico, de lo desaforado; el segundo hace lo propio por medio del mencionado comedimiento.