Una estrella que no ciega, un actor de reparto que deslumbra
No experimento ninguna sensación especial ante la lamentable muerte de Jean-Paul Belmondo, pero sí me emocionaba el talento del también fallecido Michael K. Williams
Carlos Boyero
9 de septiembre de 2021
No experimento ninguna sensación especial ante la lamentable muerte de Jean-Paul Belmondo. Nunca me ha dado por revisar sus películas, ni recuerdo que me marcaran especialmente sus interpretaciones. Simplemente, se me había borrado de la memoria. Pero informan de que el luto por su desaparición y el apasionado homenaje a su historia cinematográfica son colectivos en Francia, que todo el público de este país amaba su arte y su personalidad. Reconozco que desprendía cierta simpatía, que imprimía un toque canalla a su inequívoca apariencia de joven de familia bien, que se movía con desparpajo en el cine de aventuras, el policiaco y en la pretendida autoría de la Nouvelle vague, también que sus exuberantes morros como los de Mick Jagger tenían poder para alborotar la libido del género femenino.